La banda británica Reme y la de la Escuela
Naval tocaron en el recibimiento
Arribó a Veracruz el buque inglés Sutherland
por el centenario de la modernización del puerto
ARTURO CRUZ BARCENAS ENVIADO
Veracruz,
Ver., 4 de marzo. Confirmando la redondez de la Tierra, el buque de
la armada inglesa Sutherland apareció en el horizonte de
las aguas del Golfo de México. Procedente de Inglaterra, hizo su
primera escala en Florida, para de ahí seguir a esta franja con
el fin de participar en los festejos del primer centenario de la modernización
del puerto artificial de Veracruz, que mañana miércoles tendrá
la visita del presidente Vicente Fox y el príncipe Carlos.
El arribo fue tardío por el norte que tiene fría
y ventosa esta normalmente calurosa ciudad. Los niños que aplaudirían
tuvieron que esperar más de tres horas, lo mismo que las bandas
que amenizaron la recepción. El mástil mayor emergió
por la pleamar calmando a los organizadores, quienes procedieron a dar
instrucciones de estar listos.
Decenas de trabajadores apuraban composturas, resanes;
tapaban hoyos, cambiaban losas rotas. Desaparecieron los baches del muelle.
Los niños que venden volovanes fueron retirados para ofrecer una
escenografía adhoc, es decir, carente de ruidos visuales.
El bolero hacía su agosto ante clientes expectantes y una vendedora
de dulces agotaba sus chocolates.
La fragata HMS Sutherland ?de última generación
de la Marina Real? se fue acercando al muelle; giró y quedó
de frente a todo lo largo. Fue acercándose lentamente; en cubierta,
marineros se alistaron para colocar las boyas que amortiguan el impacto,
en lo que será su vuelta a tierra continental. La solemnidad produjo
un silencio que manifestó respeto. Se tomaba conciencia de la efemérides,
de los cien años de ese puerto artificial generador de progreso,
aunque ahora se ha soltado la polémica ante el anuncio de la intención
de levantar un puerto alterno.
Las fanfarrias provocan los primeros aplausos. El público
agita sus banderitas inglesas. Unos jarochos colocan varios lábaros
patrios del Reino Unido en su marimba. Al Sutherland lo rodean barcos mercantes
de varias naciones. La nave inglesa es comandada por Paul Thomas, quien
señaló que su unidad es la número 13 de 16 fragatas
tipo 23, que cuentan con armamento pesado y son bastión de la Marina
moderna. Sus usos con múltiples y pueden ser usadas contra submarinos,
aeronaves o barcos. Por esta ocasión, venían en son de paz.
La compañía del buque se compone de el oficial
comandante, 17 oficiales, 57 suboficiales y 111 marinos junior.
Después de romper filas, los marineros saludaron a los jarochos
que los saludaban, mientras la banda militar británica Reme interpretaba
temas propios de estos actos. Para no quedarse atrás y guardando
el protocolo, la Banda de Música de la Escuela Naval de este puerto
interpretó las suyas, entre ellas las clásicas e insoslayables
Tierra blanca y Marinos mexicanos. Un grupo de soneros se
arrancó con varias tradicionales, como La bruja y el Querreque.
Exposiciones y otras actividades
Otras actividades del día fueron la inauguración
?en el Museo de la Ciudad? de las exposiciones de filatelia, en la que
se muestra la importancia del correo en la vida de México, particularmente
de este puerto. Aparecen fotografías de los diferentes medios de
transporte para llevar la correspondencia, como el realizado en bote, en
camión, caballo, carruaje, bicicleta, velocípedo, camión,
acémila (en mulas), etcétera, de profunda nostalgia no exenta
de humor.
En la Estación del Ferrocarril se realizó
la apertura de una exposición portuaria y por la noche el maestro
Arturo Márquez estrenó mundialmente su obra musical Tangueo
sobre un puerto, con la Orquesta Sinfónica Juvenil Daniel Ayala
de la Escuela Municipal de Bellas Artes. El programa aún es amplio.