Irrumpen tropas y tanques de Tel Aviv en dos campamentos de refugiados

Unidades del ejército israelí abaten en Juzaa a un general palestino

La intensificación de los ataques desafía críticas de EU y cuesta la vida de al menos 26 personas

Anuncia la Casa Blanca el envío a Levante del vicepresidente Cheney y el emisario especial Zinni

AFP, DPA Y REUTERS

Tulkarem, viernes 8 de marzo. Tropas de Israel respaldadas por tanques y aviones irrumpieron esta madrugada en dos campos de refugiados palestinos desafiando las críticas de ayer de Estados Unidos a la intensificación de las acciones israelíes en territorios palestinos, que en las últimas 24 horas costaron la vida de al menos 26 personas.

En la madrugada de hoy fuerzas israelíes comenzaron a ingresar a Belén, sur de Jerusalén, luego de un ataque perpetrado por un palestino en el asentamiento de Atzmona, que dejó cuatro israelíes y al atacante muertos y provocó heridas a 18 israelíes más.

Asimismo, unidades del ejército apoyadas por helicópteros entraron a Juzaa, franja de Gaza, donde mu-rió el comandante de la seguridad pública palestina en el sur de ese territorio, general Ahmad Mufrij, al ser alcanzado por disparos.

Se trata del responsable de ma-yor rango de las fuerzas palestinas muerto desde el principio de la intifada. En la misma zona los soldados israelíes mataron a tres miembros de una misma familia.

Ante ese panorama, el presidente estadunidense, George W. Bush, decidió poner nuevamente a la diplomacia de su país en el centro del conflicto, al anunciar que serán enviados la próxima semana a Medio Oriente el emisario especial para la región, Anthony Zinni, y el vicepresidente Dick Cheney.

El secretario de Estado, Colin Powell, reiteró poco antes la postura de Washington de enviar al emisario sólo bajo la condición de que disminuya la violencia.

Pero más tarde Bush declaró que "Estados Unidos hará todo lo que pueda para ayudar al gobierno de Israel y a la Autoridad Nacional Pa-lestina a restaurar la esperanza para su gente y la región", y agregó que la combinación de los viajes de Zinni y el vicepresidente "podrían tener un impacto positivo".

Peligra el apoyo irrestricto

Según informes de The New York Post publicados hoy, el gobierno de Bush decidió poner fin al apoyo ilimitado que brinda a Israel.

Al citar a representantes del go-bierno, el diario señaló que se llegó a la conclusión de que el silencio de Washington sobre la dureza de la actuación de Tel Aviv se puede entender como que está de acuerdo en que el conflicto siga escalando.

Sin embargo, Powell suavizó los términos en los que se dirigió la víspera a Israel al afirmar en una audiencia ante el Comité del Presupuesto de la Cámara: "Somos vistos como el gran aliado de Israel; lo somos y siempre lo seremos".

Posteriormente agregó, con palabras cuidadosamente escogidas: "Los israelíes tienen que ser muy cuidadosos con los medios que usan para defenderse, porque en los últimos meses eso sólo ha producido una serie de escaladas en vez de poner las cosas bajo control".

El miércoles Powell dijo que el primer ministro Ariel Sharon "tiene que examinar sus políticas para ver si funcionarán. Si uno declara la guerra a los palestinos pensando que se puede resolver el problema viendo a cuántos de elos se puede matar, eso no conduce a nada".

Tel Aviv respondió este jueves al duro pronunciamiento. "Israel no ha declarado nunca la guerra a los palestinos, pero hace la guerra contra las organizaciones terroristas", señaló la presidencia del consejo israelí, un día después de que Sharon aseguró que su gobierno "hará todo por ganar esta guerra".

El jefe del partido Meretz, de la oposición de izquierda, Yossi Sa-rid, aplaudió las críticas estadunidenses y afirmó: "Ya era hora de que Powell despiertara y comenzara a comprender que la política de Sharon no lleva a ninguna parte".

En las afueras de Belén, por otra parte, soldados israelíes se enfrascaron en tiroteos con palestinos en el campamento de refugiados de Aida, donde murió un militante y 15 más resultaron heridos.

Al tiempo, tanques israelíes pe-netraron en Belén desde tres direcciones, mientras aviones F-16 lanzaron misiles contra los ya destruidos cuarteles centrales palestinos.

Esta incursión ocurrió poco después de que un palestino logró ingresar al fuertemente custodiado asentamiento de Atzmona, donde empezó a disparar y a lanzar granadas indiscriminadamente, matando cuatro israelíes e hiriendo a otros 22, cuatro de ellos de gravedad, antes de ser ultimado por soldados.

Este atentado fue reivindicado por Hamas por sus voceros en Gaza, que identificaron al atacante como Mohamed Fathi Farahat. Posteriormente Hamas también se atribuyó este ataque.

Por la madrugada, cañones de la marina israelí lanzaron misiles contra edificios de la policía palestina, y soldados se enfrentaron en el norte de ese territorio, donde fa-llecieron al menos tres palestinos: dos civiles y un policía.

En la noche del jueves murió también un socorrista palestino que trabajaba para la Organización de Naciones Unidas (ONU) y fue blanco de disparos israelíes cuando se trasladaba en una ambulancia de la organización para evacuar a palestinos heridos de un campo de refugiados en Tulkarem.

Así, Kamal Hamdan, quien recibió un disparo en el corazón, se convirtió en la primera víctima de la ONU en los 18 meses de la actual intifada. El secretario general del organismo mundial, Kofi Annan, anunció que pedirá a Tel Aviv que investigue esta muerte.

Otro socorrista palestino, identificado como Said Chelayel, murió también la madrugada de hoy a bordo de su ambulancia en la franja de Gaza, acción en que fue atacado un puesto policial palestino, matando a otros tres hombres.

Escalada incontrolable

Helicópteros artillados lanzaron dos ataques contra los campamentos de refugiados cercanos a Tulkarem y Nour Shams, en Cisjordania, en los que, según fuentes hospitalarias, murieron cinco palestinos y 25 más quedaron heridos.

Un miembro del grupo Jihad Islámica murió en un tiroteo en el norte de Cisjordania y otro más falleció en una emboscada de soldados is-raelíes en la franja de Gaza.

En el mismo territorio nueve is-raelíes resultaron heridos y un atacante suicida murió la tarde del jueves en un supermercado cercano al asentamiento judío Ariel; uno de los heridos se encuentra grave.

Posteriormente, en el centro de Jerusalén, transeúntes se abalanzaron sobre un palestino que llevaba consigo un gran artefacto, y que intentaba ingresar a una cafetería en el Barrio Alemán, situado en el oeste de la ciudad.

En Pardes-Hanna, sur de Haifa, un israelí informó a la policía sobre un paquete sospechoso que estaba en una calle, que resultó ser una bomba oculta en el doble piso de una jaula , donde había palomas.

En Nablus, un israelí fue gravemente herido esta noche cuando el automóvil en que viajaba fue tiroteado por presuntos palestinos.

Al sur de esa ciudad un palestino murió y otro fue detenido cuando ambos trataban de colocar una bomba en la carretera que conduce al asentamiento de Elon-Moreh. Además, se registraron nuevos ataques contra el complejo de oficinas del presidente palestino, Yasser Arafat, en Ramallah, Cisjordania.

Con respecto a Arafat, el encargado de los asuntos exteriores de la Unión Europea, Javier Solana, anunció que esa comunidad espera que Israel le permita salir de Ramallah, donde permanece sitiado desde el 3 de diciembre, para que asista a la cumbre árabe que se celebrará a fin de este mes en Beirut.