Muchos ya deben jubilarse o padecen enfermedades

Saldrán 230 motopatrulleros

El recorte se decidirá después del curso que recibirán en el Instituto Técnico de Formación Policial de la SSP

SUSANA GONZALEZ G.

Aunque el Agrupamiento de Motopatrullas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) no desaparecerá, unos 230 elementos dejarán de pertenecer a dicha área debido a que están en condiciones de obtener su jubilación o están inhabilitados para trabajar en motocicleta por padecer enfermedades crónico-degenerativas y profesionales, como diabetes, hipertensión y hemorroides, informó Víctor Espinoza Castro, secretario técnico del recientemente creado Comité de Restructuración.

El funcionario precisó que tal cifra representa entre 20 y 22 por ciento de la plantilla actual -calculada en 700 motopatrulleros-, aunque los cambios no serán inmediatos, puesto que durante dos meses todos los elementos tendrán que acudir a cursos especiales en el Instituto Técnico de Formación Policial (ITFP).

Destacó que la finalidad es preparar a los motopatrulleros "técnica, jurídica y físicamente", al tiempo que el Comité de Restructuración trabajará en la integración de manuales, planes y programas, y sistemas de control y evaluación. Indicó que la restructuración incluye la elaboración de un instructivo general de vialidad. Los mandos, añadió, también serán sometidos a evaluación, y los trabajadores administrativos recibirán un curso de actualización, porque no se tiene control ni seguimiento sobre el trabajo que desempeña cada elemento operativo.

Sobre los cursos que recibirán los uniformados, el funcionario dijo que incluyen acondicionamiento físico, actualización legislativa, derechos humanos y vialidad, relaciones humanas, trato al público y servicios de calidad. Incluso tendrán pláticas con representantes de cuerpos policiacos de Estados Unidos y Europa. "No estamos pidiendo que venga un cuerpo extranjero a enseñarles a manejar la motocicleta", aclaró. Aseguró que en el agrupamiento "hay un equipo fundador, la columna", los discípulos de Pedro Infante, "que tienen reconocimiento internacional por sus habilidades en el manejo de la motocicleta".

Una vez que concluyan los cursos, explicó Espinoza Castro, se determinará quiénes se van, pero "con pleno respeto a sus garantías y derechos laborales; a nadie se le privará del empleo". El funcionario estableció que el agrupamiento "no desaparece. No va a ser distinto. Van a ser ellos, pero con un programa de trabajo específico y con los elementos técnicos necesarios para cumplir con su trabajo".

Aclaró que los únicos elementos que serán dados de baja, de acuerdo con la ley, son los ocho motopatrulleros que dieron positivo en la prueba antidoping; "siete por cocaína y uno por mariguana".

Espinoza Castro insistió en que aunque haya cambios en el agrupamiento por jubilaciones, enfermedades o cambios de adscripción (muchos motopatrulleros no están acreditados como tales porque pertenecen a la policía sectorial), la SSP mantendrá la plantilla laboral de 700 elementos, ya que "ese es el número idóneo para atender con calidad la vialidad en la ciudad de México en dos turnos".