Externa Moreno Uriegas su preocupación por el destino de la iniciativa

Solicitará el PRD turnar reforma a otra comisión

Reclamó al senador priísta David Jiménez Guzmán por retrasar el debate deliberadamente

ELIA BALTAZAR Y ANDREA BECERRIL

Mientras el Senado no informe formalmente su decisión de posponer la discusión de la reforma política del Distrito Federal "yo no voy a darme por enterada", señaló la presidenta de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa, María de los Angeles Moreno.

Luego de manifestar su preocupación de que la reforma política no se incluya en el próximo periodo de sesiones del Senado, informó de los acercamientos de diputados locales y federales con senadores, a quienes han expuesto la relevancia del tema y de que sea aprobada en lo inmediato.

"Nos preocupan los tiempos y la posibilidad de que no se incluya en el siguiente periodo de sesiones del Senado", porque a nosotros, dijo, nos gustaría que la reforma fuera considerada en este periodo, para que posteriormente pueda hacer su recorrido por los congresos locales y la ALDF tuviera a su vez tiempo de trabajar en la legislación secundaria.

Interrogada sobre la posibilidad de que la reforma política del DF se congele en el Senado, Moreno Uriegas respondió: "Ese es un riesgo que, aunque remoto, existe siempre con cualquier iniciativa".

Retraso deliberado

Por su parte, el grupo parlamentario del PRD en el Senado de la República demandará que la iniciativa para la reforma política sea cambiada a otra comisión legislativa, porque en la que encabeza el priísta David Jiménez Guzmán -la Comisión del Distrito Federal- se pretende boicotearla.

El vicecoordinador de la bancada perredista, Demetrio Sodi de la Tijera, precisó que hicieron un fuerte reclamo a Jiménez Guzmán por estar retardando el debate para evitar que la minuta sea dictaminada en este periodo de sesiones.

Sodi resaltó que el priísta "se inventó una serie de reuniones cada semana, por lo menos cinco, lo que significa que llevarán todo el periodo ordinario, sin que pueda dictaminarse un tema trascendental para el Distrito Federal". Se trata, agregó, de una clara maniobra para retrasar la discusión en el Senado de una iniciativa ya aprobada tanto en la Asamblea Legislativa como en la Cámara de Diputados.

"No sé qué problemas tenga el senador Jiménez con sus compañeras María de de los Angeles Moreno y Beatriz Paredes, pero él está boicoteando una iniciativa que ellas impulsaron y aprobaron." Dijo que incluso pidió acelerar "la supuesta consulta" promovida por el priísta, para que en una misma semana se pudieran desahogar tres reuniones, pero le respondió "que no hay prisa".

Sodi se preguntó cómo puede ser precipitada una reforma política que fue aprobada por unanimidad por la Cámara de Diputados y "de la que llevamos más de diez años de discutir".

Resaltó que si la estrategia retardataria del PRI es por el bajísimo nivel electoral que tienen en el Distrito Federal, "si insisten en frenar la reforma política, van a descender aún más".

Por lo pronto, precisó, el grupo parlamentario del PRD va a demandar ante el pleno del Senado que la iniciativa salga de la Comisión del Distrito Federal para ser turnada a la de Puntos Constitucionales, que encabeza Manuel Bartlett, toda vez que no hay voluntad de David Jiménez de dictaminarla.

Y fue precisamente la reforma política uno de los temas que abordó la coordinadora de la fracción priísta en la reunión que sostuvo ayer con el jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, en el antiguo Palacio del Ayuntamiento, durante la cual también comentaron el retraso en el envío de iniciativas por parte de la administración capitalina.

López Obrador, informó la diputada local, dijo que hablaría con las diferentes áreas de su administración para que a la brevedad posible tuviéramos, en su caso, los temas que más interesan al gobierno capitalino que trate la ALDF.

"Para nosotros es muy importante tener con oportunidad los temas que interesan a la administración capitalina, porque en la medida en que se desfase a los legisladores se nos acumula el trabajo y el próximo periodo ordinario es muy corto", explicó.

Advirtió que ha tensado la relación con el gobierno capitalino el hecho de que no se ejecuten las leyes aprobadas por la ALDF. Y ayer insistió con el Ejecutivo local sobre la importancia de que se acaten las disposiciones, se publiquen oportunamente, se eliminen distorsiones por ineficiencias administrativas y que haya un diálogo mucho más fluido entre ambas instancias. "Pero también resultados que respondan a ese diálogo."

Lo cierto, agregó, es que hay inconformidad en los diputados porque pasa mucho tiempo para que se acaten las decisiones de la ALDF.