Entre tanto, sólo un miembro de un grupo
paramilitar ha sido detenido, señala
"Alarmante" embestida del gobierno chiapaneco contra
defensores de derechos, acusa Global Exchange
ANGELES MARISCAL CORRESPONSAL
Tuxtla Gutierrez, Chis., 24 de marzo. Al menos
259 operativos castrenses, nuevos actos de impunidad de grupos paramilitares
y una "alarmante" embestida gubernamental contra organismos y particulares
dedicados a la defensa de los derechos humanos es el saldo, en los últimos
10 meses, de la administración de Pablo Salazar, dio a conocer en
su informe la organización Global Exchange, la cual cuanta con estatus
consultivo en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El
documento, dirigido al gobernador Pablo Salazar Mendiguchía, explica
los resultados del monitoreo sobre la situación que imperó
en Chiapas en materia de derechos humanos de abril de 2001 a la fecha,
según Global Exchange.
Durante ese periodo el organismo contabilizó 259
operativos militares, "un promedio de 25.9 intimidatorios por día.
Treinta y cinco por ciento de dichas acciones estuvieron concentradas en
el municipio autónomo zapatista Ricardo Flores Magón", acotó.
Las acciones incluyeron patrullajes intimidatorios, hostigamientos,
interrogatorios, sobrevuelos rasantes, disparos al aire dentro y fuera
de las comunidades indígenas, y la reinstalación de retenes
militares intermitentes o permanentes.
"En el caso del municipio Ricardo Flores Magón,
existe un constante rumor sobre un posible desalojo forzado de algunas
comunidades concentradas en la región Montes Azules", señala
el informe.
En materia de grupos paramilitares, Global Exchange plantea
al gobernador: "Con alta preocupación vemos que desde el periodo
en el que usted asumió la gubernatura sólo ha sido posible
la detención del integrante de un grupo: Diego Vázquez".
A la par, "existe una seria preocupación también
por el caso del líder del grupo paramilitar Paz y Justicia, Samuel
Sánchez Sánchez, y 10 miembros más, que fueron liberados
el 19 de abril de 2001, 10 días antes de la aprobación de
la ley indígena".
Según el organismo, "a la fecha todos (los paramilitares)
siguen gozando de impunidad". La mayor parte del documento, de tres páginas,
Global Exchange la dedica a lo que considera una "embestida" del gobierno
estatal contra los defensores de los derechos humanos.
"Nos parece alarmante la actitud mostrada por usted contra
el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, la Red
de Defensores Comunitarios, el presidente de la Comisión Estatal
de Derechos Humanos (CEDH), Pedro Raúl López, y contra el
abogado Miguel Angel de los Santos", destaca.
De acuerdo con Global Exchange, la postura de la administración
estatal se ha demostrado en "costosas inserciones pagadas por el gobierno
del estado en medios de información nacionales contra el Centro
de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas o contra la CEDH.
Asimismo, resulta preocupante su agresividad contra la Red de Defensores
Comunitarios y contra el abogado Miguel Angel de los Santos".
Abunda: "Tanto el Centro Fray Bartolomé de Las
Casas como el abogado De los Santos llevan laborando en Chiapas varios
años en materia de derechos humanos. En los hechos han demostrado
profesionalismo, ética y credibilidad ante las comunidades indígenas
?a las que han defendido en términos jurídicos? y ante organismos
nacionales e internacionales".
Como soporte de esta última afirmación,
Global Exchange sostiene que ninguna de las personas o comunidades indígenas
defendidas por éstos ha presentado denuncia o queja por malos manejos,
como acusa el gobernador Pablo Salazar.
"Generar climas de linchamiento contra cualquier defensor
de derechos humanos que cumpla con su trabajo no facilita un ambiente propicio
para el diálogo ni para la procuración de justicia; por el
contrario, lo enrarece", señala el organismo.
Resalta que los nuevos presos políticos, los operativos
militares y los hostigamientos contra las comunidades indígenas,
denunciados por organismos humanitarios agredidos y cuestionados desde
el gobierno, "tienen fecha, ubicación y nombres".
Al respecto, puntualiza: "Consideraríamos apropiado
retomar el concepto de procuración de justicia haciéndola
valer y no acusando a quienes dignamente la defienden. El enfoque de los
defensores de los derechos humanos radica en el cuidado de la procuración
de justicia; por lo tanto, ellos son y deberían ser considerados
por usted como coadyuvantes de un proceso democrático y de justicia".
En ese sentido, Global Exchange hace al gobernador "un
atento llamado a reflexionar sobre su actitud beligerante contra los defensores
de los derechos humanos. Lo invitamos a proceder jurídica y penalmente
contra quienes violentan flagrante y sistemáticamente los garantías
en la materia de las comunidades indígenas".