Quedan desprotegidos frente a abusos de empresarios
Niega la Corte de EU derechos laborales a indocumentados
Sus condiciones serán "casi de esclavitud": sindicatos
JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES
Washington, 27 de marzo. La Suprema Corte de Estados
Unidos dictaminó hoy que los trabajadores indocumentados no tienen
el derecho de libre asociación en sindicatos ni protección
contra empresarios que violan sus garantías laborales, lo que motivó
protestas de órganos gremiales.
El fallo sienta el precedente de que si una empresa cesa
a un trabajador por actividades sindicales o para resguardar sus intereses
patronales, éste no goza de la protección legal establecida
por las leyes en la materia a causa de su condición migratoria "ilegal".
Con ello, todos los trabajadores indocumentados en campos,
fábricas, restaurantes y hoteles de este país no cuentan
desde ahora con el derecho de demandar salarios caídos ni otra restitución
de empresas que violan la ley al cesarlos o castigarlos por ejercer sus
derechos básicos.
La Corte emitió la decisión dividida, de
cinco contra cuatro de los jueces, resolviendo el caso de un trabajador
indocumentado mexicano, José Castro, cesado junto con otros tres
compañeros por la empresa Hoffman Plastic Compound en Paramount,
California, en 1989, por apoyar esfuerzos para sindicalizar la planta.
La Junta Nacional de Relaciones Laborales, agencia federal
encargada de resolver violaciones de la ley laboral y que supuestamente
garantiza protección a trabajadores contra repercusiones empresariales
por actividades sindicales o de protesta contra condiciones de empleo,
encontró que los derechos de Castro fueron violados y ordenó
que se le pagara, como restitución, salario caído y que fuera
recontratado.
Los tribunales apoyaron la orden de la junta, pero la
Suprema Corte revirtió hoy estas decisiones.
La central obrera AFL-CIO declaró que está
desilusionada con el fallo de la Suprema Corte. "Al permitir a los empleadores
victimizar de forma ilegal a los trabajadores indocumentados sin ninguna
consecuencia económica, el fallo de la Corte socava las normas de
vida y las condiciones de trabajo de todo estadunidense, ciudadanos y no
ciudadanos", declaró John Sweeney, presidente de la AFL-CIO.
Decisión "devastadora"
Arturo Rodríguez, presidente del United Farmworkers
of America (sindicato de jornaleros fundado por César Chávez),
expresó que esta decisión es "devastadora" para los trabajadores
indocumentados, ya que los deja "sin derechos, sin protección legal,
sin trato igualitario de la ley".
En entrevista telefónica con La Jornada,
Rodríguez señaló que los patrones ahora buscarán
contratar a más indocumentados sabiendo que no gozan de protección
legal de sus derechos laborales. "Esto elimina para los trabajadores el
derecho de enfrentar a sus patrones... los sitúa casi en condiciones
de esclavitud, ya que no tienen recursos para defenderse. Esta decisión
representa una amenaza igual de grave a la proposición 187 para
la comunidad inmigrante", afirmó.
Eliseo Medina, vicepresidente ejecutivo del Sindicato
Nacional de Servicios (SEIU), declaró que "es un mal día
para la justicia en Estados Unidos cuando la Suprema Corte le quita a los
inmigrantes las protecciones básicas de su lugar de trabajo". Hizo
énfasis en que los sindicatos continuarán defendiendo a todo
inmigrante trabajador, legal o indocumentado, a pesar de este fallo.
Con ello, y a pesar de que la Suprema Corte ha mantenido
en el pasado que los indocumentados sí gozan de la protección
de las leyes laborales federales, la decisión de hoy retira la protección
para organizar y defender los derechos laborales.