Baja la reserva internacional; Cetes caen a 5.72%
Habrá crecimiento de la economía pero no será vigoroso, afirma Ortiz
ANTONIO CASTELLANOS
La reciente estabilidad financiera es señal de que los mercados de capital anticipan un crecimiento importante, afirmó el gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz, pero aclaró que no será muy vigoroso. En materia de empleo, aceptó, no se ve una recuperación como la de 2001, y será necesario que se adopten medidas para ser más flexibles.
Se observa, dijo al reunirse con dirigentes de la Asociación de Industriales del Estado de México, un aumento de la productividad en la economía, que se refleja en una entrada significativa de capitales, principalmente en forma de inversión extranjera directa y, en menor medida, a través de inversión de portafolios.
De acuerdo con los informes oficiales, en la última semana disminuyeron los activos internacionales 899 millones de dólares. La reserva internacional también se redujo en 172 millones de dólares y se ubicó en 41 mil 689 millones de dólares. Asimismo, el Banco de México reportó una baja generalizada en los Cetes: la tasa líder a 28 días cerró en 5.72 por ciento, con una disminución de 0.12 por ciento.
En la reunión con los industriales, Ortiz manifestó que el reto consiste en que el futuro dinamismo de la productividad contribuya a acelerar el crecimiento económico, la creación de empleos y la elevación de los salarios reales. De esta manera, la evolución de la economía y del poder de compra de la población validarán las perspectivas favorables incorporadas en los precios de los activos mexicanos.
Según el gobernador del Banco de México, si bien la economía nacional no ha exhibido señales de recuperación tan claras como la de Estados Unidos, se anticipa una modesta recuperación del crecimiento en 2002.
Por lo anterior, los analistas de las principales corredurías revaluaron sus expectativas de crecimiento al alza y de inflación a la baja. El comportamiento más positivo del producto interno bruto (PIB) para el cierre del presente año se ubica en 1.6 por ciento, de acuerdo con los analistas del Deutsche Bank; la previsión inflacionaria es de 4.8 por ciento.