El presidente de EU afirma que las FARC hacen base en Venezuela y atacan sectores de ese país

Niega Bush haber intervenido en golpe contra Chávez

Pide al mandatario venezolano "cumplir lo que prometió y asimilar las lecciones políticas"

AFP, DPA Y REUTERS

Washington, 18 de abril. El presidente estadunidense, George W. Bush, negó hoy que su gobierno haya tenido algún papel intervencionista en el fallido golpe de Estado en Venezuela, y llamó al mandatario Hugo Chávez a "cumplir" lo que prometió y a asimilar "las lecciones" de agitación política que desató la crisis institucional.

Aunque su gobierno rechazó en su momento condenar la intentona golpista, Bush sostuvo que siempre estuvo muy clara su postura, y afirmó: "mi administración habló con voz muy clara sobre nuestro fuerte apoyo a la democracia", y ahora el presidente venezolano debería dar los pasos "correctivos" para solucionar las causas del descontento.

Acompañado por el presidente colombiano, Andrés Pastrana, Bush aprovechó para afirmar que la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no sólo hace base en territorio venezolano para atacar Colombia, sino que también agrede a sectores venezolanos.

Pastrana expresó preocupación por los "informes de prensa" al respecto, pero dijo que haría una petición a Caracas para aclarar la situación. Sin embargo, respaldó a Bush en cuanto a que en América Latina "no hay ninguna duda" acerca del apoyo y la promoción de su anfitrión a la democracia en la zona.

Al continuar su arremetida contra Chávez, Bush lo instó a "hacer lo que dijo que haría", en cuanto a convocar al diálogo y la reconciliación nacional, y a respetar las instituciones democráticas, y lo criticó por haber "cerrado la prensa" cuando la situación se complicó; sostuvo que él nunca tomaría una medida de ese tipo, aunque le hacen "preguntas muy duras".

Sin embargo, cuando aún no terminan las denuncias en torno a que Estados Unidos habría estado atrás de la asonada, el Departamento de Estado se vio obligado este día a negar otra denuncia de que el agregado militar estadunidense en Caracas, cuyo nombre no fue precisado por las agencias informativas, se hallaba con los golpistas en el Fuerte Tiuna en el momento en que ese grupo sacaba del poder al presidente Chávez, medida que duró sólo 48 horas.

"La información es absolutamente falsa", sostuvo el portavoz del despacho para el Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, Chip Barcaly, al ser consultado sobre afirmaciones de fuentes del palacio presidencial de Miraflores, de que el agregado estadunidense estaba en el quinto piso del Fuerte Tiuna, y al preguntarle "qué hacía un funcionario militar en ese lugar y en ese momento con los sediciosos."

El vocero del Departamento de Estado admitió que ciertamente hubo comunicaciones telefónicas, como hace la embajada en una situación de crisis, tratando de recoger información, pero que "la insinuación de que estábamos planeando esto es completamente falsa".

Tanto la Casa Blanca como el Departamento de Estado reconocieron esta semana que hubo contactos desde hace meses con opositores a Chávez, pero que siempre les transmitieron el mensaje de que no aceptaban un golpe de Estado ni cualquier otra acción inconstitucional. Pero funcionarios como Otto Reich confirmaron que contactaron al golpista Pedro Carmona cuando anunciaba su asunción.

Y mientras en Venezuela se consideraba como "falsa alarma" el supuesto hallazgo de una maleta con una bomba cerca de la embajada estadunidense, el jefe del gobierno español, José María Aznar, dijo haber sostenido una conversación telefónica con Hugo Chávez la noche del miércoles para pedirle que busque "la unidad" de Venezuela y se mantenga en una actitud flexible y abierta.