Capacitan al Banco Central para intervenir en crisis

Reformas en Argentina para fortalecer el sistema bancario

Invitan autoridades a instituciones provinciales y municipales a unirse al nuevo Banco Federal Nacional

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Buenos Aires, 21 de abril. El gobierno argentino anunció este domingo que impulsará una serie de reformas en el sistema financiero para fortalecer las instituciones bancarias y evitar la caída de las entidades, muchas de las cuales están al borde del colapso.

''Se introducen reformas para permitir al Banco Central tener más capacidad de intervenir frente a las crisis, de manera de que situaciones como la que estamos viviendo tengan una mejor respuesta del sistema'', dijo el portavoz presidencial Eduardo Amadeo.

La iniciativa oficial impulsa la fusión, en principio, del Banco Nacional de Argentina y del Banco de Inversión de Comercio Exterior en una nueva entidad denominada Banco Federal Nacional. Las autoridades invitaron a los bancos provinciales y municipales a sumarse a esta nueva entidad con el fin de consolidar una estructura sólida.

''Este proceso de restructuración de la banca oficial refuerza el papel central de la banca pública. Necesitamos una banca eficiente'', dijo el portavoz. ''De la unión de estos bancos vamos a tener instituciones bancarias más fuertes, más sólidas, de mayor capacidad financiera para poder prestar'', aseguró. Informó que el gobierno impulsará la reforma de la carta orgánica del Banco Central para otorgarle a la entidad un papel más activo en el sistema financiero y mayores libertades para intervenir en la plaza bancaria.

En tanto, el presidente del primer grupo petrolero español, Repsol YPF, Alfonso Cortina, dijo en Madrid que el impacto de la crisis económica argentina sobre la firma fue menor en el curso del primer trimestre de 2002. ''Progresivamente y de una forma prudente estamos mejorando los márgenes internos, a lo que se añade la evolución favorable de los precios de los crudos'', expuso Cortina.

Recordó que el ejercicio 2001 fue difícil para Repsol, con una caída de los resultados netos de 57.8 por ciento, en relación con 2000 a causa de la crisis del país sudamericano, donde la empresa tiene inversiones importantes.

Sus accionistas recibirán un dividendo bruto de 0.21 euros por título por 2001, es decir 58 por ciento menos que en 2000, aunque esta situación es "temporal y tan pronto como se despejen las incertidumbres actuales podremos normalizar la retribución al accionista'', afirmó. Aseguró que su compañía adoptó medidas para defender ''los intereses de los accionistas''.