El gobierno está facultado para investigar
acusaciones hechas en España: Di Costanzo
Sospechan colusión de directivos del BBV y Probursa
para lavar dinero
Un testigo señala a José Madariaga Lomelín
como responsable del blanqueo de 159 mdd
ISRAEL RODRIGUEZ
La sospechosa expansión en sólo cinco
años del grupo Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) en México
y la participación de 12 por ciento que aún mantiene el gobierno
en Bancomer, subsidiaria del grupo español, facultan al Poder Legislativo
a investigar la posible colusión de autoridades mexicanas y directivos
del originalmente denominado Probursa, en ilícitos que pudieran
tipificarse como lavado de dinero, consideró Mario Di Costanzo.
De acuerdo con el director de análisis de la consultoría
Comunal, José Madariaga Lomelín, ex presidente de la Bolsa
Mexicana de Valores (BMV) y de la Asociación de Banqueros de México
(ABM), es acusado directamente por Nelson Rodríguez, antiguo abogado
de BBVA en Puerto Rico y testigo protegido del juez español Baltasar
Garzón, como presunto responsable de blanqueo de dinero por
159 millones de dólares.
El nuevo grupo BBVA-Bancomer, del cual el gigante español
controla ya 48 por ciento, había absorbido en cinco años
a cinco bancos mexicanos, con lo que pasó a controlar casi 30 por
ciento de los activos totales de la banca en México, y adquirió
derechos de cobro del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario
(IPAB) por concepto de pagarés por 126 mil 412 millones de pesos,
cifra que representa 20 por ciento de los pasivos de ese instituto.
La increíble y triste historia de millones de dólares
La historia comienza el 10 de junio de 1990, cuando el
representante de la casa de bolsa Probursa (la sexta en importancia en
ese momento en el país, por el monto de sus operaciones y de empleados:
cerca de 300 personas), propiedad de José Madariaga Lomelín,
pagó 611 mil 200 millones de pesos para quedarse con 77.19 por ciento
del capital social de Multibanco Mercantil (el restante ya estaba en poder
de Gastón Azcárraga, Jacobo Zaidenweber, Boris Sigal, etc.,
en la serie B).
Multibanco Mercantil era un banco regional, con utilidades
netas de enero a abril de ese año que llegaban a 23 mil 51 mil millones
de pesos. Sus activos, para finales de junio, sumaban 537 mil millones
de pesos y su valor, a precio de mercado para abril de 1991, ascendía
a 406 mil 715 millones de pesos. Ocupaba el lugar número 25 entre
los intermediarios financieros.
En la compra de Multibanco Mercantil, según la
información disponible Probursa obtuvo una ganancia de cerca de
200 mil millones de pesos. La integración de los recursos de ambas
instituciones sumaba 7.5 billones de pesos (antes de que se le quitaran
tres ceros al peso), lo que colocó a la nueva institución
en el segundo lugar en tamaño, después de Banamex.
José Madariaga Lomelín, su nuevo dueño,
dijo de inmediato que buscaría la asociación con capitales
fundamentalmente extranjeros, y para hacerlo más eficiente reduciría
el personal por considerar que había demasiados empleados. Así,
el 30 de mayo de 1995 el Banco Bilboao Vizcaya adquiere 70 por ciento del
Banco Mercantil Probursa, pagando a su principal accionista, Madariaga
Lomelín, unos 350 millones de dólares.
Más tarde, el 9 de agosto, el mismo BBV adquiere por
160 millones de pesos la red de sucursales de los bancos intervenidos por
la CNBV, Cremi y Oriente.
La campaña continúa y el 29 de junio de
2000 BBV adquiere por 2 mil 400 millones de dólares al segundo banco
mexicano más grande en ese momento, Bancomer, que a su vez había
adquirido del IPAB a Banca Promex.
De acuerdo con los testimonios del testigo protegido,
José Madariaga solicitó a BBV de España que a cambio
de ceder sus acciones de Probursa le ayudaran a blanquear 159 millones
de dólares. BBV acepta y la transacción se lleva a cabo de
la siguiente manera: José Madariaga entrega los 159 millones de
dólares al BBV de España, que a su vez los remite a su filial
BBV International Investment Corporation en Puerto Rico (BBVIICPR) y posteriormente
esta subsidiaria le otorga un préstamo a José Madariaga por
159 millones de dólares para luego darlos de baja como incobrables.
Ante estas evidencias, Mario Di Costanzo propuso que sea
el Poder Legislativo el que investigue la posible colusión de funcionarios
mexicanos y directivos de Probursa en el presunto delito de lavado de
dinero.
Lo anterior se fundamenta en que dentro del capital social
de BBVA-Bancomer se encuentran directamente implicados recursos públicos,
es decir, 12 por ciento
que tiene el gobierno federal es un activo público.
''Así, de acuerdo con nuestra Constitución Política,
es facultad de la Cámara de Diputados vigilar el uso de los recursos
públicos.'' Además, es más fácil que el gobierno
mexicano en su carácter de ''accionista'' de BBVA Bancomer obtenga
información de las irregularidades que se están investigando
en el grupo español.
Por su parte, BBVA-Bancomer, a través de un comunicado,
informó que este miércoles en su asamblea ordinaria ratificó
a José Madariaga como vicepresidente primero del consejo de administración.
Asegura que Madariaga Lomelín no aparece ni como
imputado ni como testigo en la solicitud que el fiscal de España
hizo al juez de la Audiencia Nacional, y que la solicitud es para que el
juez determine si inicia o no una investigación a la cual el BBVA
y las personas señaladas en la misma acudan, en su caso, para probar
la falsedad de alguna acusación.