Critican grupos estadunidenses evasivas y arrogancia de cardenales participantes

La reunión con el Papa "empeoró" todo: católicos

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Boston, 25 de abril. Católicos estadunidenses dijeron este jueves que las reuniones de esta semana entre cardenales de su país y funcionarios del Vaticano sobre el escándalo de pederastia que sacude a la Iglesia, más que restablecer la confianza en su liderazgo, empeoraron las cosas.

"Ellos necesitan empezar a recuperar la confianza en la jerarquía, y de hecho hicieron que las cosas empeoraran", dijo el reverendo Richard McBriend, profesor de teología en la Universidad de Notre Dame.

Entre la confusión y decepción en torno al plan para lidiar con los sacerdotes pederastas, los católicos estadunidenses estaban molestos con lo que perciben como una actitud arrogante y fuera de lugar por parte de los cardenales que asistieron a las reuniones esta semana.

"El papa Juan Pablo II dejó que los obispos evadieran su responsabilidad por la crisis, y eso mismo hicieron los cardenales", dijo McBriend, un teólogo liberal, durante una entrevista realizada por correo electrónico.

"Estoy convencido de que la jerarquía perdió su credibilidad con la gran mayoría de los laicos y muchos, si no casi todos, los sacerdotes y religiosos. No van a recuperarla por un buen tiempo", agregó McBriend.

El enojo se concentró en la última conferencia de prensa realizada en la noche del miércoles.

Los jerarcas de la Iglesia estadunidense hicieron esperar por casi dos horas a los periodistas y sólo tres de los 12 cardenales y un arzobispo a cargo de una diócesis asistieron a la misma.

Al enfrentar las preguntas de los periodistas, los cardenales parecieron no estar preparados y en algunas ocasiones dieron respuestas evasivas que los hicieron lucir todavía más distantes, si no arrogantes, indicaron observadores.

"De los tres que se presentaron sólo uno es cardenal activo. Pienso que fue una medida arrogante y vergonzosa", opinó Luise Cahill Dittrich, integrante del grupo La Voz de los Creyentes, que busca promover una mayor participación laica en los asuntos de la Iglesia.

"Me sentí avergonzada por ellos porque fue muy claro para mí que simplemente no entienden de qué se trata", agregó.

A su regreso a Estados Unidos, el cardenal de Washington, Theodore McCarrick, dijo que había quedado conforme con las reuniones.

"Estoy muy optimista, ya que ahora estamos en la dirección correcta", dijo a su llegada. "Y pienso que podemos garantizar a la gente en Estados Unidos que estaremos controlando las cosas, y que esto nunca más volverá a ocurrir".

Dittrich y otros expresaron que están molestos porque los cardenales no tocaron el tema de la responsabilidad de la jerarquía eclesiástica o los pedidos para una mayor participación laica en los asuntos de la Iglesia.