Diferendos entre funcionarios crean incertidumbre
en mercados financieros, dicen
El gobierno, paralizado por disputas: legisladores
La oposición rechaza la figura presidencial interina
planteada en el proyecto panista de reforma del Estado
RENATO DAVALOS Y ANDREA BECERRIL
Legisladores de oposición rechazaron la propuesta
de la figura presidencial interina que plantea el proyecto panista para
la reforma del Estado, e hicieron un llamado para que los integrantes del
gabinete encuentren nuevas formas para dirimir sus diferencias, sin que
ello afecte el sentir de la población.
A juicio de representantes de PRI, PRD y PT, la administración
pública se mantiene paralizada por los diferendos entre funcionarios
de alto nivel, porque "todos trabajan para sí mismos".
Para la senadora priísta Laura Alicia Garza Galindo,
el hecho de que los miembros del gabinete foxista "se la pasen peleando
públicamente desgasta al gobierno federal y crea incertidumbre en
los mercados financieros y en la población".
Aseguró que los problemas entre funcionarios deben
resolverse internamente y no atraer con ello el desprestigio hacia el sector
gubernamental.
"Hay un problema grave de exteriorización de divergencias
fuera del círculo íntimo del presidente Vicente Fox, que
deberían resolverse en corto, porque de lo contrario provocan falta
de confianza en los agentes económicos, en los propios mercados
y en la población".
No
se trata, explicó, de ocultar puntos de vista distintos entre los
funcionarios o conflictos entre ellos, sino que los llevan al ámbito
público. "Eso desgasta mucho a cualquier gobierno, y creo que sería
interesante que se encontrara otra forma de dirimir las diferencias en
el gabinete. Problemas entre grupos siempre existen, porque donde hay dos
ya es difícil tomar decisiones, ya que cada individuo tiene su propia
percepción de la realidad, pero no debe pasar a la confrontación".
Las constantes disputas y peleas entre secretarios de
Estado del gobierno de Fox, aseveró Garza Galindo, han creado ya
un desgaste en el ánimo nacional, porque entre otras cosas falta
coordinación y armonía entre quienes dirigen el país,
además que hay ausencia de decisiones a tiempo, que han erosionado
la figura presidencial.
La legisladora priísta consideró que el
contralor Francisco Barrio ha actuado de manera "poco clara", y merece
los señalamientos de "mentiroso o con Alzheimer" que le hizo el
secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, ya que "ha llevado al
baile al Presidente de la República en varias ocasiones, y el
papel que ha desempeñado en el caso Pemex ha sido precipitado, oscuro,
porque en un afán de desgastar al PRI hizo acusaciones sin tener
todos los elementos en la mano".
Afirmó que, contrariamente a tal pretensión,
"quienes se han desgastado son ellos".
Los miembros del gabinete, concluyó Garza Galindo,
han perdido credibilidad y ha habido un deterioro de la imagen del gobierno
en lo general. "Ello es muy lamentable para el país, porque pega
en los mercados financieros y en el sentir de la población".
Por su parte, el Partido de la Revolución Democrática
(PRD) aseveró que el conflicto entre integrantes del gabinete foxista
revela que el Presidente está paralizado, al igual que su administración.
Las acciones de los secretarios de Estado dibujan una dispersión
de intereses en la que todos trabajan para sí. A ello se suma la
vieja estructura intacta, en la que resaltan priístas, como el propio
secretario de Hacienda, Francisco Gil, puntualizó.
El coordinador del PRD en la Cámara de Diputados,
Martí Batres, indicó que el equipo de Fox carece de cohesión
y se encuentra atrapado en una dispersión de intereses. No apoyan
al Presidente y sólo pretenden la consecución de sus propios
objetivos. Lo mismo sucede con Gil Díaz, Jorge G. Castañeda,
Francisco Barrio o Santiago Creel, dijo.
Lo que pasa, explicó Batres, es que personajes
del PRI como Francisco Gil forman parte de un gobierno compartido entre
priístas y panistas. Y están también Benjamín
González Roaro o Santiago Levy, quienes pertenecen a la misma estructura
de los regímenes anteriores.
Ciertamente, apuntó, no puede hablarse de un programa
de gobernabilidad, pero es claro que el programa de gobierno no se ha aplicado
y está inmerso en un problema de incapacidad. Estamos como al principio,
en el primero de diciembre de 2000, asentó.
Sobre el tema de la figura presidencial interina Batres
señaló que es un planteamiento panista que "no deja de ser
sintomático, porque proviene del partido en el gobierno".
Al respecto, el Partido del Trabajo (PT), en voz de los
diputados Alberto Anaya y José Narro, planteó que en las
negociaciones de la reforma del Estado, si cabe ese cambio, toda decisión
no puede ser una prerrogativa del partido gubernamental, sino decisión
del Congreso de la Unión.
Bravo Mena descarta problemas en el gabinete
MARTIN DIEGO CORRESPONSAL
Leon, Gto., 1º de junio. El senador Carlos
Medina Plascencia calificó como parte del "anecdotario político"
las fricciones entre los secretarios de Hacienda, Francisco Gil Díaz,
y de la Contraloría, Francisco Barrio Terrazas, mientras el dirigente
del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, consideró que las diferencias entre
ambos no significa que haya problemas en el gabinete.
Bravo Mena dijo que la discusión entre Gil y Barrio
no es de fondo, ni tampoco se trata de una diferencia sobre algún
programa de gobierno. Si bien reconoció que los señalamientos
de los dos secretarios pueden llamar mucho la atención, refirió
que no tienen mayor importancia.
Desde Colima, el dirigente panista insistió en
que hay diferencias de matiz, pero no problemas en el gabinete.
Por su lado, el legislador federal panista Juan Alcocer
Flores consideró que la "confrontación" que se dio entre
el secretario de Hacienda y el titular de la Contraloría se debe
a que el gabinete del presidente Vicente Fox Quesada "carece de vinculación
entre sus secretarías y también entre el Ejecutivo federal
y la Cámara de Diputados y Senadores, además de con el Partido
Acción Nacional".
Señaló que en más de una ocasión
se han externado las quejas hacia el propio mandatario federal, "porque
no hay tal vinculación, lo que permite que se den golpes entre los
funcionarios.
Por su parte, Carlos Medina Plascencia redujo al anecdotario
político la situación entre los secretarios de Estado: "los
dos trabajan bien, van por buen camino y están haciendo su tarea",
subrayó.
Aseguró que dicho conflicto no se percibe como
una falta de control político ni por pugnas entre panistas y no
panistas dentro del gobierno federal; "son situaciones que se dan, pero
más allá del anecdotario político es necesario ver
el trabajo que hacen ambos secretarios de Estado", dijo.
Quejas contra el Presidente
Al término de la reunión que se dio este
sábado entre legisladores federales panistas, algunos asistentes
se mostraron inconformes con el actuar del presidente Vicente Fox ya que,
según comentaron, "podría evitar que el propio partido gane
mayorías para el próximo año".
Sólo dos de los 15 asistentes coincidieron en que
el mandatario debería poner orden en el gobierno federal debido
a que, comentaron en corto, "el país no es un Guanajuatote".
Por su parte, el subsecretario de Gobernación,
Juan Molinar Horcasitas, afirmó que las instancias del gobierno
federal trabajan de manera normal y bajo la coordinación del jefe
del Ejecutivo federal.
El funcionario restó importancia al tono de las
declaraciones del secretario de Hacienda en contra del contralor Francisco
Barrio: "los aspectos sustantivos del gobierno se mantienen; trabajamos
coordinadamente bajo las órdenes del Presidente".