El libro rojo de la DFS
Los detenidos de la Liga Comunista 23 de Septiembre
En
las instalaciones de la Dirección Federal de Seguridad (DFS) era
común que se torturara a los detenidos mediante la práctica
del pocito (inmersión de la cabeza en agua hasta casi provocar
asfixia) o la aplicación de descargas eléctricas principalmente
en los testículos o pezones.
Eran los interrogatorios "científicos" que se realizaban
en lo que hoy son las oficinas centrales del ISSSTE en avenida de la República,
a un costado del Monumento a la Revolución, y también en
el Campo Militar número Uno, donde la DFS tenía cárceles
clandestinas. En las instalaciones castrenses operaba la Novena Brigada
de la DFS, al mando del mayor Marcos Cavazos Juárez. Era una de
las más temidas porque ahí, supuestamente, se llevó
a cabo el mayor número de desapariciones.
La DFS elaboró un libro de pastas duras, de color
rojo. En la costilla, el volumen tiene como título: Liga 23 de Septiembre.
Es una especie de álbum con los rostros de las personas calificadas
por esa corporación como subversivas.
Las hojas del libro son de papel bond y, después
de cada tres, están enmarcadas con trozos de madera para garantizar
su durabilidad. Cada página tiene la fotografía de un detenido
de la Liga Comunista 23 de Septiembre. En total son 139 rostros de los
presuntos guerrilleros, la mayoría con su ficha sinaléctica.
En
dicho álbum se aprecia que algunos de los presuntos guerrilleros
fueron fotografiados en los momentos en que eran medidos, y aparecen de
frente y de perfil. Debajo de cada imagen están el nombre y el lugar
de encarcelamiento.
Las fotos de ese documento muestran a personas con golpes
en la cara, algunos con los labios reventados, otros en cama y con sondas.
Dicho libro también contiene fotografías
de detenidos que fueron desaparecidos desde el momento de su aprehensión,
pero según la DFS estaban presos; es el caso de Javier Gaytán
Saldívar o el de Jesús Piedra Ibarra, a quien considera como
prófugo
.