El ex administrador de Presidencia, declarado muerto en 98
Ex funcionario operador de Raúl Salinas estaría vivo, indica la PGR
GUSTAVO CASTILLO GARCIA ENVIADO
Tijuana, BC, 10 de junio. Según la Procuraduría General de la República (PGR), Ernesto Sentíes Hoyos, ex director general de Administración de la Presidencia de la República, quien entre 1989 y 1994 supuestamente desvió en favor de Raúl Salinas más de 200 millones de dólares de la partida secreta, no estaría muerto, como se aseguró en 1998.
La dependencia que encabeza el general Rafael Macedo de la Concha investiga su paradero, revelan documentos en poder de La Jornada.
La integración de la acusación por peculado de la PGR en contra de Raúl Salinas de Gortari, y las investigaciones que autoridades suizas desarrollaron desde 1996 por los supuestos vínculos del hermano del ex presidente Carlos Salinas con el narcotráfico y el depósito de 144 millones de dólares en el país helvético, permitieron a la actual administración obtener copia del pasaporte de Sentíes Hoyos.
Según las fuentes gubernamentales consultadas, el documento registra una salida del país posterior al 28 de agosto de 1998, fecha en la que supuestamente falleció de cáncer.
La localización del ex director general de Administración de la Presidencia no paró, pese a que desde el 11 de septiembre de 2001 la PGR recibió el oficio número GA/MM/1108/01, elaborado por el primer comandante de la Policía Judicial Federal Mario Rodríguez Negrete, en el que se "informa que Ernesto Sentíes Hoyos falleció en el año de 1998, encontrándose sepultado y con antecedentes en el Panteón Mausoleos del Angel", y que a ese oficio se anexó copia del acta de defunción.
Las investigaciones han continuado hasta la fecha, e incluso se solicitó la colaboración de autoridades de Estados Unidos para verificar las fecha en que Sentíes Hoyos ingreso y salió de aquella nación entre 1998 y tres años más tarde.
En México, la PGR "recabó la declaración ministerial de Martha Sentíes Arzamendi", hija de Ernesto Sentíes, el 13 de septiembre del 2001. En su comparecencia ante el Ministerio Público Federal ella dijo que su padre "falleció el 28 de agosto de 1998, y que en relación a su vida laboral (de Ernesto), recuerda que en 1978 ingresó a trabajar a la entonces Secretaría de Programación y Presupuesto, en la Dirección General de Política Económica y Social, ocupado el puesto de subdirector administrativo, siendo su jefe Carlos Salinas de Gortari, quien se desempeñaba como director.
"Laborando hasta finales de 1981, fecha en la que es nombrado e un puesto administrativo en el Instituto de Estudios Políticos y Sociales del PRI, siendo su jefe inmediato Carlos Salinas de Gortari durante la campaña de Miguel de la Madrid Hurtado, y al término de ésta su padre ocupa el puesto de director general de Programación y Presupuesto de la Secretaría de Programación y Presupuesto, siendo su titular Carlos Salinas.
"En 1987 Carlos Salinas es nombrado candidato a la Presidencia de la República, donde su padre es nombrado tesorero general de la campaña, y ya siendo presidente Carlos Salinas fue designado como director general de Administración de la Presidencia de la República hasta 1994.
"En los primeros días de 1995 es nombrado oficial mayor de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, y desde el mes de marzo de ese año y hasta el día de su muerte no volvió a ocupar ningún cargo público", declaró la hija de Sentíes.
De manera oficial, la PGR menciona así la investigación en Estados Unidos: "se solicitó y se recabó mediante petición de asistencia jurídica al Departamento de Estados Unidos, información relacionada con diversos sellos estampados por diversas autoridades migratorias de ese país, que se encuentran en el pasaporte a nombre de Ernesto Sentíes Hoyos, así como sobre entradas y salidas en el territorio estadunidense".
Para el 7 de noviembre del 2001 la PGR "solicitó y recabó la orden de cateo número 21/2001-II, librada por el juzgado quinto de distrito en materia de procesos penales, relacionada con el inmueble ubicado en avenida de Los Andes número 265, colonia Lomas de Chapultepec".
El cateo se realizó dos días después. El acta levantada por el Ministerio Público Federal contiene, entre otros datos, que en "ese lugar se localizó, entre otros documentos, un fólder con la leyenda 'estado de cuenta 1986', mismo que contiene diversos documentos, informe de comprobación de gastos de la partida 2.00023.50.00.8100.1.1.7 del Estado Mayor Presidencial, la Secretaría Particular, la Coordinación General de Comunicación Social, la Dirección Federal de Seguridad, Comisión Nacional Campesina, la Revista Tiempo, la Academia Mexicana de a Lengua, Infonavit, Pensiones Especiales a Viudas de Diputados Constituyentes y Notas generales, escrito-informe de Asuntos Confidenciales que se llevaron en la Secretaría Privada del C. Secretario de Programación y Presupuesto relativo a entregas de fondos a diversas personas y entidades a cargo de la partida 2.00023.50.00.00.8100".
Tras el cateo, los familiares de Sentíes Hoyos, dejaron pasar algunos meses y fue el 9 de marzo de este año, cuando Martha Sentíes envió un escrito a la PGR "mediante el cual manifiesta que ni ella ni su familia tienen nada que ver con los hechos que se investigan; asimismo refirió que a acreditado que su padre Ernesto Sentíes Hoyos ha fallecido, motivo por el cual solicita se le devuelva la documentación que se aseguró en su domicilio".
Pero la PGR continuó la indagatoria, y el 15 de marzo de este año "recabó la declaración ministerial de Francisco Guadarrama Quijada, que es médico en el Hospital ABC, y manifiesta que participó en la atención del paciente Ernesto Sentíes Hoyos, colaborando con la vigilancia y el tratamiento, y que la causa de su defunción fue sepsis abdominal y el shock séptico".
Siete días después José Octavio Ruiz Speare, médico del Estado Mayor Presidencial, también declaró. Repitió también que Ernesto Sentíes Hoyos padecía cáncer y que murió el 28 de agosto de 1998 en el Hospital ABC.
Para la PGR Sentíes podría estar vivo y en caso de que así fuera se le acusaría por peculado junto con Raúl Salinas, por haber desviado más de 200 millones de dólares de la llamada partida secreta del Presidente, durante el mandato de Carlos Salinas, entre 1989 y 1994.