Los uruguayos reaccionaron en el complemento, perdían 3-0
Con mal arbitraje, Senegal 3 Uruguay 3
Los senegaleses avanzan a la siguiente ronda; los charrúas, a casa
AFP, DPA Y REUTERS
Suwon, Corea del Sur, 11 de junio. En un partido para el infarto y con pésimo arbitraje del holandés Jan Wegereef, que se equivocó por igual para ambos lados, Senegal empató con Uruguay 3-3 y consiguió una histórica clasificación a octavos de final del Mundial 2002, detrás de Dinamarca, que ganó, en el grupo A.
Los subcampeones africanos, en su estreno en una Copa del Mundo, jugarán el domingo frente al vencedor del grupo F, que saldrá de Inglaterra, Suecia y Argentina, mientras Dinamarca lo hará el sábado contra el segundo lugar de ese sector.
Los dirigidos por el francés Bruno Metsu, al contrario de lo que se podía prever, tomaron la iniciativa y, en vez de defender su área, esperaron en media cancha a un conjunto sudamericano que no salió a atacar y a buscar el resultado, pese a que la victoria era lo único que le servía para clasificar.
En ese contexto poco había pasado en el estadio Suwon, al que asistieron 30 mil espectadores, hasta que al minuto 20, en grave error, Pablo Montero intentó ceder al portero Carini, pero no hizo más que regalarle el balón a El Hadji Diouf, quien fue una pesadilla para la zaga charrúa.
El habilidoso atacante encaró al guardameta y pareció caer sin que nadie lo tocara, pero el árbitro cobró la pena capital. Khalilou Fadiga engañó a Carini con tiro suave a su izquierda para el 1-0.
Los celestes no se habían recuperado del impacto cuando seis minutos más tarde el debutante Alassane Ndour comandó un veloz contragolpe; cedió para Papa Douba Diop, que marcó el segundo tanto con tiro alto desde la entrada del área mayor.
Al 38 Senegal pareció dar el golpe final, cuando Bouba Diop, en posición adelantada, recibió solo en el punto de penal y marcó el 3-0 en grave falla arbitral.
Tras la pausa el técnico de Uruguay, Víctor Púa, decidió enviar a la cancha a Richard Morales y a Diego Forlán en busca de ofensiva, y apenas al minuto 46 Morales aprovechó un rebote del portero senegalés a un tiro de Darío Silva, para descontar, 3-1, desde la boca del arco.
Los sudamericanos siguieron creando varias oportunidades de gol y tuvieron una excelente reacción. Al 69 Forlán puso el 3-2 con un cañonazo desde fuera del área.
A partir de ese momento, el público, que había apoyado tímidamente a los africanos, se volcó en favor de Uruguay y el partido se hizo no apto para cardiacos, ya que al 75 Diouf quedó sólo ante Carini y el arquero le tapó el remate; en la jugada siguiente Forlán tenía el empate, pero su disparo cruzado fue desviado.
A los 88 minutos el árbitro compensó los errores contra Uruguay y marcó un penal sobre Morales, que tampoco existió. Alvaro Recoba empató con tiro esquinado y la emoción creció al máximo.
Uruguay dispuso de la ocasión para la victoria a los 90, cuando un defensa sacó un remate de Varela que se metía y en el rebote Morales cabeceó desviado. Allí murieron sus ilusiones.
Y mientras el país sudamericano amaneció con más frío que el que marcaban los termómetros, en Dakar fue la locura.
Los aficionados se congregaron frente al palacio presidencial para celebrar con bailes, cantos y bocinas la clasificación.
El presidente del país, Abdoulaye Wade, declaró este día de fiesta nacional. Escuelas y comercios permanecieron cerrados.