Se mantiene la alerta preventiva por el volcán de Colima
Reubican a 46 familias de La Yerbabuena en Cofradía de Suchitlán
VERONICA GONZALEZ CARDENAS CORRESPONSAL
Comala, Col., 12 de junio. Desde el pasado fin de semana, 46 familias de La Yerbabuena se encuentran reubicadas definitivamente en Cofradía de Suchitlán, debido al peligro que corrían en la primera población, ubicada a sólo ocho kilómetros del volcán de Colima.
La nueva colonia se denomina La Yerbabuena II y está conformada por 49 viviendas de concreto, separadas entre sí por un angosto pasillo de tierra. A excepción del agua potable, que se prevé comenzar a surtir en julio, la colonia tiene todos los servicios básicos y una área común que pronto se transformará en jardín.
En tanto se desarrolla el proceso de reubicación definitiva de los pobladores de La Yerbabuena, las autoridades mantienen la alerta preventiva por la actividad del coloso, pues persiste el riesgo de una erupción violenta, informó el secretario técnico del Sistema Estatal de Protección Civil, Javier Velasco Villa.
Agregó que las seis familias que rehúsan la reubicación permanecen en la comunidad bajo el resguardo del Ejército Mexicano.
El comité científico asesor del volcán informó a su vez que el coloso se mantiene en relativa calma, pues en los últimos días disminuyeron significativamente los tremores y los derrumbes de material incandescente. Sin embargo, continúa el derrame de lava, sin que represente peligro para la población.
En La Yerbabuena II la mañana de ayer transcurrió sin contratiempos.
Las familias reubicadas se adaptaron fácilmente a su nuevo hogar, dicen cuatro amas de casa que se quedaron a ordenar sus viviendas y preparar los alimentos mientras sus hijos se fueron a la primaria de Cofradía de Suchitlán y sus esposos a trabajar en los cafetales de La Yerbabuena, la hacienda de San Antonio y Villa de Alvarez, municipio cercano a Comala.
"Estamos a gusto. La gente de Cofradía nos recibió muy bien y no hemos tenido problemas. Además mi esposo trabaja en San Antonio y es más fácil para él llegar allá pronto porque hay camiones a todas horas", comentó Candelaria Ramírez Macías.
A su vez, Leonor Cuéllar Guzmán dijo que se siente bien en su nueva casa, pues aunque tiene algunas goteras "está bonita".
Señaló que la gente de Cofradía los recibió con agrado, aunque la mayoría de las personas reubicadas no convive con la gente del poblado, pues prefiere quedarse en sus casas.
"Casi no salimos porque aquí tenemos todo. La tienda está en la esquina, los vendedores de pollo y pan vienen todos los días, así que no tenemos necesidad de salir", apunta Erica Mejía Medina.
Velasco Villa explicó que el proceso de reubicación definitiva no concluirá hasta que el gobierno estatal ofrezca a las familias otras actividades productivas en un lugar seguro, lo cual podría ocurrir este mismo año.
El funcionario del Sistema Estatal de Protección Civil agregó que los servicios de agua potable y energía eléctrica seguirán suministrándose a las 6 familias de La Yerbabuena que se niegan a abandonar el poblado aledaño al volcán, pues el gobierno espera que se convenzan de que la reubicación se hizo únicamente para proteger sus vidas del peligro volcánico y no para despojarlos de sus tierras.