Los coanfitriones tendrían ayuda de los polacos
Corea, EU y Portugal, en pos del pase
Saldremos a ganar, aseguró el técnico de los coreanos, Guus Hiddink
AGENCIAS
seul, 12 de junio. Corea del Sur está lista para vivir el viernes la que podría ser una de las noches más gloriosas de su historia deportiva, clasificándose a octavos de final del Mundial 2002.
El problema para los coanfitriones es que ese objetivo lo persiguen también dos rivales del grupo D: Portugal, que viene en ascenso, y Estados Unidos, que está en inmejorable situación si vence o aun si empata frente al eliminado Polonia.
"Saldremos a ganar; cuando se piensa en perder uno se contiene un poco", manifestó el técnico de Corea del Sur, el holandés Guus Hiddink, de cara al juego en el estadio Munhak de Incheon, ante unos 50 mil espectadores, en tanto que Polonia se medirá a Estados Unidos en Daejon.
"Le daremos un regalo al pueblo surcoreano que nos trató tan bien", prometió el portero polaco Jerzy Dudek, quien aseguró que se encargará de impedir goles a los estadunidenses para facilitar el avance a Corea del Sur.
Pero si Dudek fracasa en su intento los locales dependerán de sí mismos para arrancar al menos un punto ante Portugal, que parece haber cobrado fuerza tras golear 4-0 a Polonia.
Estados Unidos, dirigido por Bruce Arena, llegó como uno de los débiles de la llave en los pronósticos y venció a Portugal (3-2), y luego empató 1-1 con los anfitriones, en un partido rodeado de un clima tenso y enrarecido ante las manifestaciones políticas de estudiantes contra el equipo visitante en Daegu.
En alusión a la caída prematura de los grandes favoritos (Argentina y Francia), Hiddink comentó que este Mundial "ha sido marcado por sorpresas y Corea del Sur será una más".