Los británicos recuperaron a su dupla Beckham-Owen

Inglaterra, a cuartos de final con triunfo fácil; 3-0 sobre Dinamarca

La escuadra danesa sólo fue la sombra del equipo vencedor de Francia

DPA

Niigata, Japon, 15 de junio. La noche de hoy no pudo ser más perfecta para Inglaterra, que no sólo ganó un lugar en los cuartos de final al aplastar 3-0 a una decepcionante Dinamarca, sino que recuperó a su dúo estelar, integrado por David Beckham y Michael Owen.

El Spice Boy del Manchester United y el jovencito del Liverpool habían aparecido a cuentagotas, y todos saben lo que significan para el conjunto.

Pero en el estadio local ambos volvieron a aparecer y hacen soñar a los hinchas ingleses con volver a llevar la Copa a casa después de 36 años.

Inglaterra sólo necesitó de 45 minutos para dominar el partido. Entregó una actuación colectiva muy convincente, que incluyó pinceladas del talento de Beckham y el rencuentro de Owen con el gol. En tanto, Dinamarca fue la sombra de la escuadra que venció a Francia, pagó caro sus errores defensivos y al ataque no existió.

Los ingleses pegaron primero, casi a la salida del vestuario, y eso les facilitó mucho las cosas, porque los daneses, que nunca antes habían estado en desventaja, sintieron el impacto, mientras que el cuadro inglés ganó en seguridad.

A los 5 minutos, Beckham ejecutó un córner al segundo palo, donde Ferdinand ganó en el salto a su marcador y cabeceó. La pelota no iba hacia el arco, pero el portero Sorensen, que intentó atraparla, terminó por empujarla a su red; 1-0 y los casi 8 mil hinchas ingleses en las gradas multiplicaron su delirio.

Por cierto, el partido deparó una de las escenas más insólitas; al inhabitual buen comportamiento de los ingleses se unió su cara de placer comiendo cerezas, mientras japoneses vestidos con camisetas danesas apuraban con avidez latas de cerveza.

Dinamarca tenía casi todo el partido por delante, pero a Inglaterra la habían llamado a su juego, al que mejor le sienta: esperar agrupada atrás y salir en contragolpes rápidos, en busca de Owen y Heskey.

Los dirigidos por Morten Olsen pusieron empeño, pero esta vez no encontraron espacios para aprovechar su futbol simple y veloz, como sí lo habían hecho ante Francia. En el primer tiempo tuvieron dos oportunidades: un tiro de Ebbe Sand, que pasó cerca del palo de David Seaman, y un remate de larga distancia de Thomas Gravesen, que el arquero desvió a tiro de esquina.

En contraposición, Inglaterra no perdonó. A los 22, Nicky Butt tocó de primera en el área, Gravesen disparó, pero le salió un pase a Owen, quien como una saeta se dio vuelta y de izquierda mandó el esférico a la red, en su debut como goleador en el torneo.

Y a los 44 los ingleses liquidaron el partido, en otro aprovechamiento de un error rival: un largo saque lateral pegó en un defensor danés, y Beckham habilitó con precisión a Heskey, que definió con certeza para el 3-0.

El complemento estuvo de más. Inglaterra siguió como dueña del partido y apenas pasó un par de sustos. Los daneses tuvieron una posesión de balón de 63 por ciento, pero no supieron qué hacer con él.

En la ciudad inglesa de Hanley, más de 100 hinchas arrojaron vasos y botellas contra la policía. Un hombre resultó levemente herido y otros 16 fueron detenidos. Para controlar la situación, la policía necesitó dos horas y una dotación de 120 agentes. Un portavoz oficial dijo que "es decepcionante que una minoría no pueda festejar sin violencia".

Sven-Goran Eriksson, técnico de Inglaterra: "Dinamarca fue un rival muy duro, tal vez el marcador final haya sido demasiado amplio. No creo que hayamos merecido un 3-0, pero anotamos tres veces y creamos otras oportunidades también; así que creo que merecimos ganar, tal vez no por ese tanteador. Fuimos afortunados de haber anotado temprano. Ahora ya estamos en cuartos de final y cuento con que juguemos ante Brasil. Ahora tenemos seis días para prepararnos y recuperarnos de las lesiones, pues Michael Owen y Paul Scholes tienen molestias".

David Beckham: "Estoy muy orgulloso de los jugadores. Somos un equipo joven y no tenemos miedo de jugar al futbol. Nos dedicamos a nuestro juego y no nos preocupa contra quién sea. Brasil tiene uno de los mejores equipos del mundo y Bélgica tiene también uno bastante bueno, así que no estamos preocupados ahora por ellos".

Morten Olsen, entrenador de Dinamarca: "Jugamos un buen partido pero cometimos un par de errores. Tras el primer gol era difícil porque ellos tienen muy buena defensa; después, al cuarto de hora, están al frente 2-0. Reaccionamos bien y jugamos buen futbol a ratos, pero justo antes del descanso cometimos un error y el partido estaba acabado, porque es casi imposible anotar tres goles a Inglaterra".

Ebbe Sand, delantero danés: "Los ingleses aprovecharon sus oportunidades con una efectividad enorme. 3-2 hubiera sido un resultado justo. Jugamos cuatro buenos encuentros y representamos a Dinamarca de manera muy honrosa".

Inglaterra - Dinamarca 3-0 (3-0)

OCTAVOS DE FINAL

Estadio: Gran Cisne de Niigata

Tiempo: Húmedo

Terreno: Resbaladizo

Espectadores: 40,000

Arbitro: Markus Merk (ALE)

Goles:

Inglaterra: Ferdinand (5), Owen (22), Heskey (44)

Amonestaciones:

Dinamarca: Tofting (24)

Inglaterra: Mills (50)

Equipos:

Dinamarca: Thomas Sorensen - Thomas Helveg (Kaspar Bogelund 7), Rene Henriksen (cap.), Martín Laursen, Niclas Jensen - Dennis Rommedahl, Thomas Gravesen, Stig Tofting (Claus Jensen 58), Jesper Gronkjaer - Jon Dahl Tomasson, Ebbe Sand. DT: Morten Olsen

Inglaterra: David Seaman - Danny Mills, Sol Campbell, Rio Ferdinand, Ashley Cole - David Beckham (cap.), Nicky Butt, Paul Scholes (Kieron Dyer 49), Trevor Sinclair - Michael Owen (Robbie Fowler 46), Emile Heskey (Teddy Sheringham 69). DT: Sven-Goran Eriksson