Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Lunes 17 de junio de 2002
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Política
Asciende a cien mil millones de pesos, revela Mario Di Constanzo

Grave quebranto en sistemas de pensión de IMSS e ISSSTE

Seria amenaza a la viabilidad de las finanzas públicas, dice el especialista

ISRAEL RODRIGUEZ

El quebranto en los sistemas de pensión del IMSS y del ISSSTE asciende a cien mil millones de pesos, reveló Mario Di Constanzo, director de análisis económico de la consultoría Comunal, al advertir que lo anterior representa una seria amenaza a la viabilidad de las finanzas públicas de México.

El especialista alertó que la situación del ISSSTE se perfila como uno de los mayores retos de las finanzas públicas, que debe ser atendido con suma urgencia, ya que desde 1999 la nómina de pensiones de la institución genera importantes déficit debido al agotamiento del sistema financiero en el que basa su operación.

Explicó que del monto total del presupuesto aprobado para el IMSS y el ISSSTE en 2002, que asciende a poco más de 190 mil millones de pesos y representa casi 18 por ciento del gasto programable total del gobierno federal, casi la mitad, es decir 94 mil millones de pesos, se canalizarán a los sistemas de pensiones de ambas instituciones.

En la actualidad, el ISSSTE cuenta con aproximadamente 2.3 millones de trabajadores cotizantes y alrededor de 385 mil pensionados; sin embargo, se calcula que existen alrededor de 330 mil trabajadores que ya se encuentran en la posibilidad de pensionarse y aún no lo han hecho. Ello ha generado una deuda potencial, adicional a lo que ya paga el instituto, de aproximadamente 23 mil millones de pesos, con lo que en realidad las transferencias del gobierno federal ascenderían a unos 35 mil millones. Esta cifra es equivalente a los recursos fiscales que se le asignan al rescate bancario.

Se prevé que el número de trabajadores jubilados se incremente a 551 mil en 2005, y a casi 800 mil en 2010; así, de continuar prácticamente sin modificaciones el esquema financiero del ISSSTE, el déficit de esta institución ascenderá en los próximos años a casi 0.5 por ciento del producto interno bruto (PIB), cifra similar al déficit público proyectado para este año.

El también asesor económico del PRD informó que las erogaciones en servicios personales y el pago de pensiones y jubilaciones absorben 82.5 por ciento del presupuesto de estas dos instituciones.

Por medio de las instituciones de seguridad social se garantiza la prestación de servicios médicos y la protección social a 56.7 millones de mexicanos, 56.6 por ciento de la población total del país. Esta cobertura incluye: a) el aseguramiento de 14.9 millones de trabajadores en activo, tanto del IMSS, como del ISSSTE; b) el pago de 2.3 millones de pensionados y jubilados (1.9 millones del IMSS y 0.4 del ISSSTE), y c) la protección a 35 millones de familias de ambos grupos beneficiarios.

La capacidad financiera del esquema de seguridad social depende de dos factores: el empleo y el salario real. El empleo determina el nivel de ingresos del IMSS, y el tamaño del aparato estatal establece el monto de recursos de que dispone el ISSSTE para su operación. Por su parte, el nivel del salario real ha influido de manera determinante en la conformación de los ingresos de ambas instituciones y condiciona el alcance de sus objetivos y programas.

Actualmente la plantilla de poco más de 360 mil trabajadores del IMSS absorbe 36.6 por ciento de sus ingresos, en tanto que la nómina del ISSSTE representa 45.2 por ciento. El Seguro Social asigna a pensiones 37.4 por ciento de sus ingresos y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado 80.4, lo que constata la insuficiencia financiera de este último.

Di Constanzo señaló que un factor de presión en los esquemas financieros de las instituciones de seguridad social ha sido la disminución en el número de trabajadores en activo por pensionado. En el IMSS este coeficiente se redujo de 8.3 en 1990, a 6.5 en 2001, y en el ISSSTE, de 10 a sólo 6 en el mismo periodo, es decir, en 40 por ciento. Otro factor que también ha contribuido a incrementar los costos de la seguridad social es el incremento en la esperanza promedio de vida de una persona que se pensionaba.

Asimismo, mientras que en 1993 el ISSSTE pagó por concepto de pensiones 11 mil 631 millones de pesos, de los cuales 76 por ciento cubrió con recursos propios y sólo 24 con transferencias federales, para el presente año el pago por concepto de pensiones ascenderá a 23 mil 627 millones de pesos, de los cuales cubrirá con recursos propios solamente 40 por ciento, mientras que el restante 60 provendrá de transferencias federales.

Lo anterior evidencia el quebranto del sistema de pensiones del ISSSTE, y de no tomarse medidas en el futuro podríamos tener una deuda tan importante como la generada por el rescate bancario, dijo el experto financiero.

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