Decide el Tribunal Supremo no suspender los servicios mínimos fijados por Madrid
Acatada en forma "desigual", la huelga general en el País Vasco en su primer día
Hubo enfrentamientos entre sindicalistas y la policía; un trabajador y un agente heridos
ARMANDO G. TEJEDA ENVIADO
Sevilla, 19 de junio. El País Vasco se paralizó de forma "desigual" en el primer día de huelga general en protesta a las reformas laborales emprendidas por el gobierno del conservador José María Aznar, quien aprobó recientemente una modificación a la ley de ayuda a trabajadores desempleados, que reduce considerablemente las prestaciones que hasta ahora recibía ese colectivo.
La jornada transcurrió con algunos enfrentamientos entre sindicalistas y fuerzas del orden, con saldo de al menos un trabajador y un policía heridos, y ataques a algunas em-presas que se negaron a secundar la huelga.
Euskadi será la única región de España que vivirá la huelga general en dos fases: la primera hoy, convocada por los sindicatos nacionalistas ELA y LAB ante los reiterados desacuerdos con las centrales mayoritarias, Comisiones Obreras (CO) y Unión General de Trabajadores (UGT), y la segunda este jueves, en la que los afiliados a CO y la UGT se sumarán al resto de los trabajadores, que pretenden paralizar el país por primera vez en los seis años de gobierno de Aznar.
El consejero de Justicia, Empleo y Seguridad Social del gobierno vasco, Joseba Azkárraga, explicó que la jornada de huelga provocó "una paralización importante en la actividad económica e industrial" de Euskadi, si bien explicó que fue "desigual" en las tres provincias vascas (Vizcaya, Guipúzcoa y Alava), situación que se explica por diferencias entre los sindicatos vascos y españoles.
En todo caso, la actividad económica en la región quedó prácticamente paralizada, en una protesta a la que también se sumaron algunos medios de comunicación, como la Televisión Autonómica Vasca, Radio Euskadi y los periódicos Gara, Diario Vasco y Euskaldon Egunkaria, que hoy no salieron.
Además, durante el paro general en Euskadi se realizaron dos multitudinarias concentraciones que aglutinaron de forma separada a miles de trabajadores, que justificaron la huelga general ante la embestida neoliberal del gobierno español.
Porcentajes de la movilización
Azkárraga explicó en rueda de prensa que en Guipúzcoa la participación en la huelga es "muy importante", mientras que en Vizcaya es "desigual" y en Alava es "menor", en tanto que informó que los servicios mínimos funcionaron "con normalidad".
Por sectores, el paro en Euskadi fue secundada por 30.9 por ciento de los trabajadores de la administración pública de Euskadi; en el ámbito educativo, por 58.3 por ciento de los centros públicos y privados y por 36.5 de los profesores; en el aparato judicial se su-maron a la huelga 20 por ciento de los trabajadores en Vizcaya, 30 en Guipúzcoa y 2 por ciento en Alava.
En el sector de sanidad, Azkárraga señaló que se registró un paro de 8.55 por ciento en Vizcaya, 18.19 por ciento en Guipúzcoa y 7.71 por ciento en Alava.
El gobierno vasco también resaltó que no hubo incidentes "destacables", si bien se detectaron algunos "piquetes" violentos so-bre todo en el transporte público, donde tuvo que intervenir la policía autonómica vasca, Ertzaintza, para permitir que algunos trabajadores pudieran laborar, porque la mayoría pretende secundar la huelga este jueves.
Los sindicatos ELA y LAB, que también tienen representación en Navarra, lograron un escaso seguimiento en esta región, donde según informó el gobierno local la huelga general fue secundada por menos de 15 por ciento de los trabajadores.
Entre las acciones violentas registradas en la primera jornada de huelga en Euskadi destaca el ataque a una sede del Partido Nacionalista Vasco (en el gobierno regional), a un bar y a una sucursal bancaria, sin que hubiera mayores incidentes.
El Tribunal Supremo español decidió hoy no suspender cautelarmente los servicios mínimos fijados por el gobierno español con base en decretos del pasado viernes, si bien admitió a trámite la batería de recursos judiciales presentados por las fuerzas sindicales, que los consideran "abusivos" y "atentan contra el derecho constitucional de huelga".
Con esta decisión judicial, que no fue unánime al emitir un voto particular dos de los cinco jueces de la sala, los servicios mínimos fijados por Aznar serán firmes, si bien UGT y CO advirtieron que no tenían ninguna in-tención de respetarlos.
A pesar de que el Tribunal Supremo decidió no suspender los criterios fijados por el gobierno, los recursos de apelación conti-núan su trámite habitual, que podrían resolverse por lo menos hasta dentro de un mes.
Sindicatos auguran éxito
Ambas centrales sindicales dejaron claro que recurrirán a "todos los decretos y órdenes ministeriales" que contemplen servicios mínimos excesivos, de los que no garantizan su cumplimiento, por lo que reiteraron que su compromiso es respetar criterios fijados en anteriores paros nacionales y en las sentencias dictadas por diversos tribunales.
Cándido Méndez, líder de la UGT, reiteró su disposición de no cumplir lo estipulado por la administración. José María Fidaldo, líder de CO, se mostró convencido de que la huelga de este jueves será un rotundo éxito, con un total apoyo popular a la protesta.
Según una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas, 50.6 por ciento de los españoles está de acuerdo con la huelga frente a 34.7 que opina lo contrario. Además, 53.7 por ciento de la población considera que la huelga es justificada, contra 37.1 que la considera infundada.
Asimismo, más de 700 artistas, académicos, actores e intelectuales firmaron hoy una carta en la que dijeron que la huelga nacional está "plenamente justificada". Entre los firmantes figuran los músicos Miguel Ríos, Víctor Manuel, Ana Belén, Ismael Serrano, Luis Eduardo Aute, Raimón, Rosendo y José Meneses, y los cineastas Héctor Alterio, Pi-lar Bardem Juan Diego Botto, Manuel Gutiérrez Aragón, Achero Mañas, Pepón Nieto y Beatriz Carvajal.
De los escritores, editores y filósofos, apoyaron la huelga José Caballero Bonald, Al-mudena Grandes, Jorge Herralde, Juan Mar-sé, Eduardo Mendicutti, Rosa Regás, Francisco Umbral y Manuel Vázquez Montalbán.
En todo caso Aznar, quien vivirá su primera huelga general precisamente la víspera de la cumbre de jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea en Sevilla, la última que presidirá como presidente de turno de la Unión Europea, advirtió que el "deber" de los sindicatos es garantizar los servicios mínimos fijados por el gobierno, que a su entender "no son una concesión, una donación o un regalo que hace ningún piquete sindical a los ciudadanos, sino un derecho de los ciudadanos y un deber de los sindicatos", por lo que exigió su íntegro cumplimiento.
Inmaculada Alascio, secretaria de Sanidad de la Federación de Servicios Públicos de UGT-Sevilla, fue atacada presuntamente por la policía nacional mientras realizaba pintas a favor de la huelga general en las inmediaciones de un centro comercial.
Alascio sufrió diversas lesiones, entre ellas un esguince cervical, contusión en un codo y una fisura del metacarpiano derecho.