Rafael Caro Quintero y El Güero Palma, a punto de dejar la cárcel

Las principales acusaciones fueron desvanecidas en tribunales

GUSTAVO CASTILLO GARCIA

En 1985 Rafael Caro Quintero fue detenido y acusado de ser uno de los principales narcotraficantes de México. Tras 17 años de permanecer en prisión, el ex jefe del cártel de Guadalajara está por obtener su libertad, igual que ocurrirá con el ex líder del cártel de Sinaloa, Héctor Luis El Güero Palma Salazar, quien se presume saldrá libre el próximo domingo.

De última hora trascendió que El Güero Palma aún tendría procesos penales por resolver, lo que impediría su excarcelación.

Sin embargo, en ambos casos las principales acusaciones quedaron desvanecidas en los tribunales federales, y la Procuraduría General de la República (PGR) no ha informado de alguna causa pendiente.

Respecto a Palma Salazar, quien fue detenido en 1995 de manera fortuita en los límites de Nayarit y Jalisco, al desplomarse la avioneta en que viajaba, el subprocurador A de Procedimientos Penales de la PGR, Gilberto Higuera Bernal, indicó que "las procuradurías no pueden hacer otra cosa que no sea poner pruebas a disposición de los tribunales, pero quien las valora, quien determina lo que proceda respecto a ellas son los tribunales".

El funcionario refirió que "si existieran" acusaciones pendientes contra Palma Salazar, "seguramente se tendrá que tomar alguna determinación" antes de que sea excarcelado, pero no pudo precisar si hay averiguaciones previas por resolver o recursos ante los tribunales que no hayan concluido.

Caro Quintero

Líder del que fuera el segundo cártel en importancia en México durante los 80, Rafael Caro Quintero está preso desde abril de 1985, mismo año en que fue acusado de ser uno de los autores del asesinato de Enrique Camarena, agente de la DEA (agencia antidrogas de Estados Unidos).

Según el informe Cuatro años en la PGR, de Jorge Madrazo, noviembre de 2000, último en el que se hace mención a su situación legal, Caro Quintero sólo tenía una pena privativa de la libertad acumulada de 16 años y seis meses de prisión.

La sentencia de 40 años por el asesinato de Camarena quedó sin efecto luego de que el tercer tribunal unitario del primer circuito en materia penal determinara, el 24 de mayo de 1996, dejar insubsistente la sentencia condenatoria dictada por el juez primero de distrito.

Entonces, el proceso penal 82/85 y su acumulado 28/85, en el que fue coacusado del narcotraficante Ernesto Fonseca Carrillo, Don Neto, fue regresado al periodo de instrucción.

Don Neto obtuvo la exoneración del homicidio de Camarena y dejó precedente para que Caro Quintero obtenga una sentencia similar, debido a que la mayor condena que pesaba en su contra se diluyó. Las únicas penas que le quedan son las de los procesos 207/85-II-A y 95/86.

En el primero fue sentenciado inicialmente a siete años y seis meses de prisión por el delito de fraude, pero en segunda instancia se modificó la pena impuesta y se dictó una nueva, que es de cinco años y seis meses.

En la segunda se le acreditó la responsabilidad penal por delitos contra la salud en las modalidades de siembra, cultivo, posesión, venta, cosecha, tráfico, exportación de mariguana, posesión y tráfico de cocaína, así como aportación de recursos económicos para la ejecución de delitos contra la salud, por lo que se le impuso una pena de 11 años de prisión.

En sus procesos se llegó a declarar improcedentes declaraciones ministeriales de personas cercanas a Caro Quintero que lo señalaban como narcotraficante, una de ellas fue la de Sara Cristina Cosío Martínez, sobrina del ex gobernador de Jalisco Guillermo Cosío Vidaurri, quien fue señalada en su momento como su amante (lo acompañaba al momento de su detención), pero dijo haber sido secuestrada por el líder del cártel de Guadalajara.

El Güero Palma

Considerado uno de los narcotraficantes más violentos y sanguinarios, Héctor Luis El Güero Palma fue detenido por el general Jesús Gutiérrez Rebollo (acusado de colaborar con el cártel de Juárez) en 1995; también logró que los cargos graves que le imputó la PGR fueran desechados en los tribunales.

Aparentemente, la única sentencia en su contra es de siete años de prisión, misma que se cumplirá el próximo domingo, cuando podría abandonar el penal de máxima seguridad de Puente Grande, en Jalisco.

La única condena que el Ministerio Público Federal logró que se le impusiera fue una sentencia por posesión de cocaína, y sólo le queda pendiente resolver un procedimiento judicial por el delito de cohecho y asociación delictuosa, cargos en los que puede obtener su libertad al pagar una fianza, pues no están tipificados como graves.

Según el informe de Jorge Madrazo, otro proceso penal por el que se le dictó sentencia (acopio de armas de fuego) no pudo aplicárse con pena corporal debido a que el 11 de octubre de 2000 el segundo tribunal unitario del tercer circuito, con sede en Guadalajara, le concedió el beneficio de la sustitución de la pena de 2 años y 10 días de cárcel por el pago de una multa, que en ese momento fue del orden de un millón 216 mil 654 pesos con 50 centavos.

En entrevista se preguntó al subprocurador Higuera Bernal si no le preocupa que un sujeto de este calibre pueda salir y establecer alianzas. "Lo que debe preocuparnos es que existiera alguna indagación, algún acto ilícito que investigar y que no lo resolviéramos con la oportunidad debida", contestó.