No esperaba que Corea tuviera una ayuda tan descarada, dijo

Para Camacho, España ganó 2-0

Helguera intentó golpear a un abanderado al finalizar el partido

AFP, DPA Y REUTERS

Gwangju, Corea del Sur, 22 de junio. Para el técnico José Antonio Camacho España fue el triunfador. "Hemos ganado el partido por 2-0. Nos vamos a casa sin haber perdido ningún partido, sin que el rival de hoy fuera superior. Hemos ganado porque metimos dos goles. Estoy triste porque el equipo ha luchado y ha trabajado, pero se nos impidió ganar.

"No esperaba que Corea tuviera una ayuda tan descarada en este partido, porque al ser cuartos de final ya lo está viendo todo el mundo, pero parece que no les importó", señaló el timonel ibérico.

Camacho fue especialmente duro con los jueces de línea Alí Tomusange, de Uganda, y Michael Ragoonath, de Trinidad y Tobago. "Es un escándalo que en un partido de esta importancia nos pongan unos jueces de línea de donde son estos dos. Pero a Italia, Portugal y Estados Unidos ya les hicieron lo mismo. La FIFA sabrá si esto es lo que le conviene al futbol".

No negó que se va del certamen "indignado, cabreado... Si un equipo es superior a ti, te vas de otra forma, pero así sientes una enorme tristeza. Nos marchamos sin perder ningún partido, al fin y al cabo, y con la idea clara de que no fuimos inferiores a ningún rival".

El entrenador tuvo que controlar al término del partido al jugador Iván Helguera, quien estaba dispuesto a encararse con Tomusange, quien se caracterizó por señalar repetidos fueras de juego de forma errónea. "Hemos luchado hasta el final y hemos sido eliminados, porque Corea del Sur tuvo más suerte que nosotros. Es una verdadera lástima que no clasificáramos", agregó.

Helguera dijo que "fue un auténtico robo" y lloró desconsoladamente en el vestuario, donde confesó que quiso pegarle al juez de línea. "No iba a preguntarle nada, iba por él. Que me metan diez partidos de suspensión, 30, 40... Que me suspendan hasta el próximo Mundial, al fin y al cabo se juega cada cuatro años", señaló.

El infortunado Joaquín, que falló un penal, fue escueto, todavía con el peso de su error: "El futbol fue hoy injusto con España. No sé qué decir del árbitro... Me ha tocado a mí fallar el penalti y estoy un poco jodido". A su vez, Fernando Hierro dijo que se retira del Mundial "con la cabeza bien alta y la conciencia tranquila".

Desde Sevilla, España, el rey Juan Carlos I llamó por teléfono a Camacho para darle un mensaje de ánimo, felicitó al equipo por su participación y deseó "que sea recibido en casa con todos los honores". En tanto, el presidente del gobierno, José María Aznar, expresó su reconocimiento al plantel y lamentó: "No nos ha acompañado la suerte y alguna cosa más".