Analiza el TSJ si procede un juicio en su contra;
"demuestren que soy culpable", reta el presidente
Nadie puede prohibir a Venezuela vender petróleo
a Cuba: Chávez
Enfrenta el mandatario acusaciones por daños
a la nación y recibir dinero de BBVA para su campaña
REUTERS Y AFP
Caracas, 23 de junio. El presidente de Venezuela,
Hugo Chávez, a quien la oposición exige que renuncie tras
superar un fallido golpe de Estado en abril, retó este domingo a
sus adversarios a que traten de comprobar los delitos que se le imputan
y afirmó que continuará vendiendo petróleo a Cuba.
"Nosotros le vamos a seguir vendiendo petróleo
a Cuba porque nadie nos va a prohibir que le vendamos a nuestros clientes,
sobre todo los más cercanos en el Caribe", sostuvo durante su tradicional
programa radial Aló Presidente.
El mandatario negó que con ese pacto comercial
esté dañando los intereses de su país y garantizó
que el actual suministro a Cuba se mantendrá, al igual que el de
las otras naciones beneficiadas con el Acuerdo Energético de Caracas.
Chávez enfrenta acusaciones en el Tribunal Supremo
de Justicia (TSJ) por los supuestos delitos de causar daño patrimonial
a la nación con la venta preferencial de petróleo a la isla
caribeña, malversar 2 mil 300 millones de dólares del erario
y, últimamente, de no reportar la recepción de 1.5 millones
de dólares del banco español BBVA a su campaña electoral
en 1998.
Respecto de la demanda por la venta de petróleo
a Cuba a precios preferenciales, dentro de un programa especial que firmó
Venezuela (quinto exportador mundial de crudo) con un grupo de países
del Caribe, dijo: "Háganla, enjuícienme. También tienen
que enjuiciarme por República Dominicana y mu- chos otros países
a los que vendemos petróleo".
El acuerdo con la isla
Bajo
contrato concesional Cuba tiene pactada con Venezuela la compra hasta de
53 mil barriles diarios de crudo y derivados. El resto de su abasto proviene
de su producción local y del mercado internacional. La factura petrolera
cubana fue el año pasado de mil millones de dólares, informó
el corresponsal de La Jornada en Cuba, Gerardo Arreola, el pasado
30 de mayo.
Impugnadores venezolanos del convenio con Cuba aducen
que se trata de un envío subsidiado de crudo, pero las autoridades
de ambos países han confirmado que se trabaja en términos
de mercado.
Venezuela firmó el 19 de octubre de 2000 convenios
bilaterales de suministro petrolero con 10 países centroamericanos
y del Caribe (Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Haití,
Honduras, Jamaica, Nicaragua, Panamá y República Dominicana).
Más tarde se incorporaron otros cinco (Barbados, Guyana, Granada,
Dominica, San Vicente y las Granadinas).
El paquete se llamó Acuerdo Energético de
Caracas y funciona paralelamente al Pacto de San José (1980), por
el cual Venezuela y México venden 160 mil barriles diarios de crudo
a la misma región con créditos blandos.
El acuerdo, firmado por un año renovable, coloca
80 mil barriles diarios de petróleo entre los suscriptores a precio
internacional, en cuotas sujetas al ajuste según las compras efectivas
y la disponibilidad venezolana. Hay un financiamiento a 15 años
de plazo y un año de gracia, al 2 por ciento anual.
Durante su programa de radio, Chávez se refirió
a las acusaciones que han presentado sus opositores ante el TSJ y señaló
que "están buscando una salida extraconstitucional. Enjuícienme
pues", añadió.
También advirtió a los gobernadores, alcaldes
y diputados de su país que estén preparados para sus eventuales
revocatorias de mandato, por medio de referendos que se realizarán
a partir de agosto. "Dentro de un mes o dos podríamos estar haciendo
en Venezuela referenda revocatorios para gobernadores, alcalde mayor, alcalde
de cualquier parte", señaló el mandatario, en alusión
a ese mecanismo previsto por la Constitución.
"Vayámonos preparando, pues es la democracia",
subrayó Chavéz, quien en las últimas semanas ha manifestado
su disposición a someterse a un referéndum revocatorio el
próximo año.
En otro frente para Chávez, esta semana será
demandado por familiares de las víctimas durante la asonada de abril,
que lo acusarán de "delito de lesa humanidad". Y es que 17 personas
murieron y decenas más resultaron heridas por arma de fuego durante
las protestas que antecedieron al golpe de Estado que derrocó brevemente
a Chávez entre el 11 y 14 de abril pasado.
En alusión a estos eventuales procesos judiciales,
Chávez advirtió este domingo: "¿Quién puede
pensar que millones de venezolanos van a quedarse callados en sus casas
mientras vean a Chávez enjuiciado y preso porque un grupito de venezolanos
con mucho dinero, los mismos que trataron de derrocarme el 11 de abril,
buscarán sacarlo de la presidencia?"
Pero Chávez declaró que su gobierno continúa
apoyando el diálogo nacional a pesar del sabotaje de algunos a las
conversaciones pues, subrayó, la población desea un entendimiento
a favor de la paz y la democracia.
Al referirse a la situación de América Latina
aseguró que los pueblos buscan un nuevo modelo de integración,
distinto al plan neoliberal que permite a los poderosos engullir a los
más pobres. "Hay una marea de pueblos despertando en nuestro continente,
retomando la bandera de Bolívar ante el azote del neoliberalismo,
y en este siglo se concretará el sueño bolivariano", concluyó.
Chávez, un ex paracaidista que seis años
después de liderar un fallido golpe ganó la presidencia en
elecciones con el apoyo de la mayoría del país, mantiene
un alto índice de popularidad entre las clases de bajos recursos,
aunque enfrenta una aguerrida oposición de parte de los sectores
pudientes.
Entre las demandas en su contra, la que ha tenido mayor
trascendencia internacional es la relacionada con las cuentas ocultas del
banco español BBVA, cuyo ex presidente Emilio Ybarra confesó
haber dado 1.5 millones de dólares para la campaña de Chávez.
Pero el mandatario venezolano insistió en que no
recibió ningún centavo del banco español. Este domingo
domingo retó: "búsquenlos, ¿de dónde recibí
yo y de quién un dólar?, ¿dónde lo tengo?,
¿dónde los gasté?"
Malversación
El gobernante venezolano también enfrenta una acusación
de que malversó fondos estatales al no depositar una cantidad equivalente
a unos 2 mil 300 millones de dólares en un fondo de ahorro para
ser usado en tiempos de bajos precios petroleros, que se denomina Fondo
de Inversión para la Estabilización Macroeconómica
(FIEM).
Chávez negó su culpabilidad en ese caso
bajo el argumento de que "teníamos recursos y teníamos obligaciones",
y ante la disyuntiva de si se hacía el depósito o se pagan
sueldos, "optamos por la más urgente. Si hubiésemos depositado
en el FIEM no hubiésemos pagado los sueldos, ni salarios a los venezolanos.
"Si por eso quieren enjuiciarme, enjuícienme",
repitió.
Las demandas contra Chávez aún están
en manos del máximo tribunal, que debe determinar si existe mérito
para enjuiciarlo, y que esta semana emitió una sentencia que permite
a cualquier persona iniciar una demanda contra el jefe de Estado, cuando
ese paso era reservado al fiscal general.
Algunos abogados han dicho que esa decisión del
TSJ abrió el paso para enjuiciar al mandatario, en vista de que
no confían en la imparcialidad del jefe de la fiscalía, Isaías
Rodríguez, quien fue vicepresidente en este gobierno antes de ocupar
el cargo actual.
Mientras avanzan los procesos judiciales y abundan los
rumores de otro golpe, los opositores han realizado varias manifestaciones
contra Chávez, a quien responsabilizan de haber llevado al país
a una crisis con su autoproclamada "revolución" en favor de los
pobres.