Evocación de mar
El arquitecto Alberto Kalach se encargó del rescate del edificio que, en 1993, con el gobierno de Manuel Camacho Solís, se proyectaba como sede de una de las tres delegaciones políticas en que se dividiría Iztapalapa. En su transformación, lo volvió evocador de un barco, e incluso se ahuecaron los cimientos para que el agua de lluvia circulara por debajo, como cuando ahí había un lago.
El Faro, entre la celebración y la novedad, tiene sin embargo pendientes con su proyecto, requiere de un área de invernaderos, otra para separar la basura y convertirla en composta, mejorar sus servicios sanitarios y sacar la ludoteca del edificio. Se estima que serían necesarios para todo este plan 6 millones de pesos.
Con esa evocación de mar, en medio de una decena de unidades habitacionales, este sábado el sitio cultural celebrará su segundo aniversario con actividades producto de los talleres e invitados.
Comenzará el taller de danza folclórica infantil, para seguir con el de contemporánea. María Luisa Vázquez presentará con la compañía de teatro Tierra tierra, una obra de teatro que ella estrenó hace 10 años en una versión libre de Alfonso Bravo y Juan Ezkurdia a la novela El arpa y la sombra, de Alejo Carpentier.
En la plaza pública la celebración empezará a las 16 horas con el taller de danza, seguido de los brujos de Huejutla, el ensamble de voces Muna Turca, el grupo Real de Catorce, Zoe, La Casta y un performance de Saúl Cortés.
RENATO RAVELO