MEXICO, S A
Carlos Fernández-Vega
PARA LAS EMPRESAS trasnacionales, nunca famosas por su legalidad y transparencia, el descrédito es el pan de todos los días: ayer, con el mejor estilo del caso Enron, estalló un nuevo escándalo en torno a lo malos manejos financieros y contables del gigante telefónico estadunidense de larga distancia WorldCom, el segundo en jerarquía en el sector de las telecomunicaciones, con ingresos anuales superiores a 30 mil millones de dólares e inversiones en 65 países de América, Africa, Europa y Asia.
EN MÉXICO, UNA empresa muy querida en las principales esferas del gabinete del cambio se ve directamente afectada por el descrédito y la desconfianza que genera el escándalo WorldCom: la telefónica Avantel, la misma que presidió el multimillonario -libre de impuesto- Roberto Hernández Ramírez y dirigió el actual secretario de Hacienda, el gaucho Francisco Gil Díaz, consorcio en el que la trasnacional, junto con Citigroup y su filial Grupo Financiero Banamex, participan como sólidos dueños -49 y 51 por ciento de acciones, respectivamente. WorldCom invirtió alrededor de mil millones de dólares en Avantel, de acuerdo con su propia información.
UN REPORTE DE la agencia Reuters, fechado en Filadelfia, da cuenta del suceso: "WorldCom quedó al borde de la quiebra después de que un escándalo contable por unos 3 mil 800 millones de dólares golpeó fuertemente los precios de los bonos y las acciones. Este caso, la más reciente revelación de un escándalo contable en una empresa estadunidense, podría echar abajo los esfuerzos de la trasnacional para asegurarse 5 mil millones de dólares en financiamiento fresco y podría llevar a la empresa a la bancarrota, dijeron analistas. La agencia calificadora de crédito Standard and Poor's rebajó aún más la calificación de la deuda basura de la telefónica, argumentando un alto riesgo de incumplimiento de pagos. Los bonos de la empresa se cotizaban a 15 por ciento de su valor, independientemente de su fecha de vencimiento, una convergencia de precios que sugiere que la bancarrota es probable ya que los tenedores de bonos tienen la misma categoría en una quiebra... WorldCom despidió el martes a su presidente financiero, Scott Sullivan, y dijo que replanteará sus resultados para los últimos cinco trimestres, lo que eliminará todas sus ganancias desde comienzos de 2001. El escándalo de contabilidad de la compañía se suma a un rosario de episodios similares que ha afectado fuertemente a Wall Street desde que el gigante de energía Enron Corporation colapsara en diciembre pasado. Enron también arrastró en su caída a una de las cinco grandes empresas de auditoría de Wall Street, Arthur Andersen, que llevaba los libros de contabilidad de Enron (y la de WorldCom hasta los primeros días de 2002) y que fue sentenciada a entregar su licencia de operaciones después de haber sido hallada culpable del cargo de obstrucción a la justicia. Las noticias de WorldCom socavaron aún más la confianza de los inversionistas, ya suficientemente dañada por la falta de transparencia en la contabilidad de las empresas. Otras grandes compañías, como el gigante de telecomunicaciones Global Crossing y el grupo diversificado Tyco Internacional, están también entre las involucradas en casos de irregularidades contables".
EL DESCRÉDITO, SIN embargo, no es el único efecto del escándalo de WorldCom. Al conocerse el suceso, las acciones de las principales empresas de telecomunicaciones del mundo cayeron en picada, así como las de los fabricantes de equipos, agencias de publicidad, bancos y aseguradoras que tienen relación con la trasnacional. "Esto es simplemente otro clavo en el ataúd de la confianza", dijo Paul Marsch, analista de telecomunicaciones de Morgan Stanley, con sede en Londres. Además, la trasnacional decidió despedir a 20 por ciento de su plantilla laboral, equivalente a 17 mil trabajadores.
LA COMISION DE Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) ya metió la mano en el caso, una vez enterada de que WorldCom había registrado en sus libros de contabilidad gastos operativos como inversiones de capital, práctica que permitió a la trasnacional esconder gastos, inflar el flujo de caja y registrar ganancias en forma artificial. La SEC comentó que "la divulgación de WorldCom confirma que se han cometido irregularidades de contabilidad de una magnitud sin precedentes en los mercados públicos".
CUALQUIER SIMILITUD ES coincidencia, pero los reportes indican que el ex presidente ejecutivo y cofundador de WorldCom, Bernie Ebbers, "conocido por sus modales desenfadados y sus botas vaqueras", saltó a la escena mundial cuando hizo una oferta de "adquisición hostil" por el grupo de telecomunicaciones MCI Communications Corp. para arrebatársela a la británica BT Group Plc. Ebbers consiguió salirse con la suya y Worldcom y MCI se fusionaron en una operación por valor de 40 mil millones de dólares. Este personaje renunció en abril, y para entonces tenía deudas con la empresa de más de 408 millones de dólares en préstamos personales, aunque su fortuna ascendía a mil 400 millones de dólares. En el punto más alto del boom de las telecomunicaciones, WorldCom estaba valorada en 180 mil millones de dólares, con 80 mil empleados. Ahora, el cálculo no sobrepasa los 2 mil 500 millones.
DE ACUERDO CON un reporte de los rotativos inglés y español The Guardian y El Mundo, respectivamente, WorldCom nació como resultado de una fusión entre una compañía de telefonía de larga distancia (Long Distance Discount Service), y dos pequeñas firmas (MFS Communications y Unet) a principios de los años 90. La carrera de adquisiciones culminó en 1999, con el acuerdo de fusión con MCI, lo que convirtió a la empresa resultante -Worldcom-MCI- en la segunda compañía telefónica del país, sólo superada por la golpista ATT.
ACALAMBRADO POR EL caso Enron -remember el atorón del pretzel-, George W. Bush se adelantó a calificar de "escandalosos" los informes de que WorldCom falsificó activos por 3 mil 800 millones de dólares, y aseguró que su gobierno "investigará exhaustivamente y encontrará a los responsables". En la revisión, nada raro sería que salieran a la luz aportaciones económicas de la trasnacional a la campaña del presidente amigou.
Las rebanadas del pastel:
QUE SI, QUE siempre sí, pero tantito: el presidente Fox aceptó que México sí corre el riesgo de enfrentar una situación económica similar a la de Argentina, si no se generan los suficientes "recursos de ahorro y fiscales que el país requiere", en declaraciones al diario argentino Clarín.... "De alguna manera comienza a tener algún efecto la situación de Argentina y Brasil", dijo el inquilino de Los Pinos, aunque intentó matizar: ..."En México tenemos, en general, una situación de estabilidad en este momento (...) Toda esta situación global de inquietud en los mercados, la volatilidad tiene cierto efecto en México, aunque no significativo"... Poca significativa será, sin duda, la nueva oleada de las hordas especulativas.
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