Se aprobó sin consultar a investigadores; es un refuerzo del presidencialismo, afirman
Piden expertos derogar la nueva Ley de Ciencia y Tecnología
FABIOLA MARTINEZ
Científicos y tecnólogos, representantes de diversas organizaciones académicas y sindicales, iniciaron una campaña tendiente a gestionar reformas, amparos e incluso la derogación de Ley de Ciencia y Tecnología.
Lo anterior por considerar que incluye un proceso de "burocratización" y una "dependencia excesiva" del Poder Ejecutivo, así como una orientación al servicio de la industria con base en recursos públicos. "En síntesis, es un refuerzo del presidencialismo".
En el primer día del Foro nacional sobre ciencia y tecnología, convocado por 10 organizaciones, Margarita Rosado, representante del personal académico del Colegio de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), dijo que el proceso de consulta del que derivó la aprobación de la nueva ley (abril y mayo) fue muy breve, "si acaso 10 días en términos reales", debido a que en ese periodo el grueso de los científicos se hallaba en trámites para renovar su inscripción en el Sistema Nacional de Investigadores.
En su exposición, como integrante de la Federación de Colegios de Personal Académico de la UNAM, la doctora Rosado advirtió que en diversos artículos de la nueva ley se deja la puerta abierta para transferir recursos del erario al desarrollo industrial de la iniciativa privada, lo cual "no es malo en sí, pero afecta el presupuesto para ciencia y tecnología y la condena a desaparecer en el mediano plazo".
Ante afiliados a los sindicatos de la UNAM, UAM, Industria Nuclear, Instituto Mexicano del Petróleo, INAH, Estudios en Antropología Social, IPN, entre otros, la astrónoma hizo un llamado a la organización de los propios científicos y tecnólogos, como la única alternativa para lograr enmiendas o la derogación de la nueva ley aprobada sin las consultas necesarias en la comunidad científica.
"Hemos sido como obreros de la ciencia porque no nos han dado la oportunidad de participar en la definición de la ley que rige nuestro ámbito de trabajo", señaló.
Los organizadores del foro, especialistas de instituciones de educación superior e investigación, afirmaron que "si bien hubo consultas y los legisladores buscaron asesoría, la mayoría de los científicos y tecnólogos mexicanos no fueron tomados en cuenta", por lo que mediante la organización buscan incidir en la definición de las políticas gubernamentales en la materia.
En el auditorio del Sindicato Unico de Trabajadores de la Industria Nuclear, el investigador Gabriel Torres, del Centro de Investigación en Antropología Social, dijo que la ley en cuestión representa sólo una solución pragmática en la que se refuerzan estructuras burocráticas.
"La Ley de Ciencia y Tecnología es un triunfo del régimen foxista inclinado al desarrollo empresarial... la sujeción del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología al Presidente, es un signo antidemocrático y poco funcional", dijo.
Por su parte, el abogado laboral Arturo Alcalde Justiniani alertó que las reformas en materia de contratación de personal científico representan un "golpe legislativo impune a la política de ciencia y tecnología". En particular por la integración de un consejo general en la materia integrado por 12 participantes, de los cuales nueve son electos por el Ejecutivo.
"Es una visión autoritaria y excluyente. No se diga respecto a la relación laboral: es la concreción del sueño más autoritario del patrón con facultades ilimitadas para determinar quién ingresa, permanece, asciende o es despedido en un empleo de este sector", expresó.