Acorralados por la crisis argentina, Uruguay
y Paraguay propugnan acciones
Insistirá el Mercosur en asistencia del FMI
Los miembros del mecanismo consideran "positivas" las
promesas de respaldo de Fox
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 3 de julio. Los ministros de Economía
del Mercado Común del Sur (Mercosur), que integran Argentina, Brasil,
Uruguay y Paraguay, acordaron esta tarde reiterar la importancia de "la
asistencia de las instituciones multilaterales hacia los países
de la región, de modo que se permita afrontar en forma oportuna
las situaciones coyunturales".
Tanto los titulares de Economía como los cancillleres
que integran conjuntamente el Grupo Mercado Común (GMC) han preparado
la agenda que abordarán los presidentes y debatieron sobre las consecuencias
de la crisis que se extiende, la severa alarma sobre Brasil, el desorden
argentino y el virtual acorralamiento de Uruguay y Paraguay, que está
llevando a una situación límite a ambos países.
Las
palabras del presidente de México, Vicente Fox, en la mañana,
después de su reunión con el anfitrión, Eduardo Duhalde,
fueron consideradas muy positivas, al asumir el compromiso de apoyar -sin
ser "mediador"- a Argentina ante los organismos multilaterales.
Entre las expectativas del GMC se mencionó la necesidad
de apoyo a Argentina en sus negociaciones con el Fondo Monetario Internacional
(FMI) por parte de los mandatarios asistentes a la cumbre. Para algunos
el organismo asumió una actitud "inexplicable" en estas circunstancias.
Uno de los temas es mejorar la coordinación económica
del Mercosur, que debió tratarse en diciembre pasado, cuando la
cumbre prevista se vio interrumpida por la explosiva situación de
Argentina, que culminó con la renuncia del presidente Fernando de
la Rúa. La agenda que mañana debatirán los presidentes
Duhalde, de Argentina; Fernando Henrique Cardoso, de Brasil; Jorge Batlle,
de Uruguay, y Luis González Macchi, de Paraguay, y los socios Ricardo
Lagos, de Chile y Jorge Quiroga, de Bolivia -a los que se incorpora Fox
al mediodía-, es la base del documento conjunto que ahora no sólo
deberá ser instrumento de la integración, sino de acción
ante la crisis.
La posición tomada ayer por los presidentes de
México y Brasil, con la que ambos se comprometieron a bregar por
un libre comercio "justo" en América, rechazando todo tipo de proteccionismo,
también fue interpretada como una alusión a las medidas estadunidenses
en la materia.
En el resumido documento que se presentó en la
sede de la cancillería argentina se resalta también la prioridad
de impulsar soluciones para afrontar el impacto de la coyuntura en la región,
"privilegiando los instrumentos que favorezcan los vínculos económicos
internos y externos".
El gobierno de Duhalde espera como el agua la solidaridad
de los países en momentos en que el Parlamento Europeo solicitó
al FMI y al Banco Mundial que ayuden a Argentina a salir del desastre económico
actual, a la vez que reclamó al Poder Ejecutivo local un "programa
económico sólido".
El
presidente uruguayo recordó hoy la gravedad de la crisis que vive
su país y sostuvo que ante lo sucedido en Argentina, muchos ahorradores
sacaron "sin pensar" el dinero apresuradamente, precipitando aún
más la estampida económica. Duhalde se habría sentido
también respaldado por Lagos, quien previo a su llegada a Buenos
Aires reconoció que el "gobierno argentino ha trabajado para alcanzar
compromisos políticos internos, preservando principios democráticos,
instituciones republicanas y estabilidad social".
Según fuentes mexicanas, Fox necesitaba conocer
"de primera mano" el plan del gobierno argentino para calibrar su apoyo.
En general se indica que el acuerdo sobre automotores es muy importante
y reactivador en países que, para algunos analistas, han integrado
"el club del riesgo", en referencia a los dictámenes de las calificadoras
externas.
El factor Otto Reich
A niveles políticos y sindicales se reclama acción
fuerte y soberana al Mercosur y una decisión urgente en lo social,
cuando se vislumbra que la próxima visita de Otto Reich, secretario
de Asuntos Hemisféricos por los territorios del Mercosur -a quien
se considera un "furibundo anticastrista" involucrado en el golpe de abril
pasado contra el gobierno de Venezuela-, trae aparejada la demanda de medidas
duras y el fantasma de futuras represiones conjuntas.