El gobierno chileno, la Iglesia y la derecha saludan la decisión del ex dictador

Renuncia Augusto Pinochet a su escaño de senador vitalicio; mantiene la dieta parlamentaria

Continúa la inmunidad por su condición de "ex presidente", informa el líder del Senado

AFP, DPA, PL Y REUTERS

Santiago, 4 de julio. El ex dictador chileno Au-gusto Pinochet, renunció este jueves a su escaño de senador vitalicio, aunque mantendrá su inmunidad en virtud de su carácter de "ex presidente de la república", luego de que el lunes la Corte Suprema anuló los cargos que pesaban en su contra por los crímenes del caso de la caravana de la muerte y lo sobreseyó en definitiva por padecer demencia progresiva e irrecuperable.

La decisión de Pinochet de abandonar la senaduría vitalicia fue saludada por la derecha, la Iglesia católica y el gobierno de Ri-cardo Lagos, quien dijo esperar que con es-to haya "más tranquilidad", y que así "se cierra un capítulo de una historia que co-menzó hace mucho tiempo atrás".

En contraposición, los familiares de las víctimas dijeron que la renuncia no resuelve el tema de las violaciones a los derechos humanos y preparaban una protesta para el próximo sábado.

Además, la parte querellante anunció que presentará una demanda contra el ex dictador por daño patrimonial a los familiares de los 75 presos políticos ejecutados por los militares en octubre de 1973, por un monto de 441 mil dólares por cada uno.

El presidente de la Corte Suprema, Mario Garrido, rechazó una petición para revisar el dictamen que cerró el proceso a Pinochet, acusado de asesinatos y secuestros.

Al negar la reposición, como quería la parte acusadora, Garrido aplicó el código orgánico de tribunales, que lo faculta para acoger o rechazar estas peticiones.

Si bien Pinochet renunció a su cargo, ahora adquiere un nuevo fuero como "ex presidente de la república", confirmó el presidente del Senado, Andrés Zaldívar; la renuncia se hará efectiva el martes.

"Automáticamente se le aplica la condición del estatuto de los ex presidentes de la república", indicó Zaldívar, tras recibir la renuncia en una carta enviada por Pinochet por conducto del cardenal arzobispo de Santiago, Francisco Javier Errázuriz.

En su carta de una cuartilla y media, que Zaldívar dijo dará a conocer completa después de la sesión ordinaria del martes 9 de la Cámara alta, el ex general incluye sus motivos para dar este paso y algunos párrafos en que justifica el cruento golpe militar de 1973 contra el presidente constitucional Salvador Allende.

En la misiva, anticipada en la versión electrónica del diario El Mercurio, dirigida a los senadores, hace un breve recuento de los sucesos clave de la historia chilena en que intervino, y sobre el derrocamiento de Allende sostiene que no lo buscó sino que se vio forzado por "las profundas discrepancias entre los civiles", aunque sin mencionar el saldo sangriento de su acción.

El Mercurio dice que la carta de renuncia fue redactada por los abogados de Pinochet sobre la base de sus ideas y que después de 16 años de haber gobernado y "organizado" instituciones sólidas para el desarrollo económico de Chile, los años le impiden seguir ejerciendo el cargo legislativo que tenía.

El hijo menor de Pinochet, Marco Antonio, señaló que su padre tomó la decisión desde anoche junto con sus abogados, y que estaba contento de que la carta la recibiera el cardenal. Ante él, dijo, le reiteró su profunda fe y le expresó que "él entregaba esto a Dios, que para él es lo más importante".

Junto con el breve comentario de Lagos de que "se cierra un capítulo de la historia", el ministro secretario de Gobierno, Heraldo Muñoz, también expresó satisfacción por considerar que contribuirá a la reconciliación y la paz, y estimó que era "esperable" lo ocurrido, ya que de no hacerlo habría puesto en duda el fallo que sobreseyó definitivamente el caso de la caravana de la muerte.

La presidenta de la organización de familiares de desaparecidos, Viviana Díaz, repudió el dictamen al apuntar que "para nosotros Augusto Pinochet es culpable".

A su vez, el senador socialista Ricardo Núñez lamentó que la decisión de la corte abra camino para la impunidad del ex dictador, que enfrentaba una petición de desafuero por el asesinato en Argentina en 1974 del general chileno Carlos Prats y su esposa.

La Federación Internacional de Derechos Humanos, desde París, emitió un comunicado en el que "lamenta y acoge con reservas" la decisión de la justicia chilena, que dictó el primero de julio el sobreseimiento por "demencia" del golpista.

El proceso había sido iniciado en marzo de 2000 por el juez Juan Guzmán Tapia, referente a 57 homicidios y 18 secuestros.

Pero el veredicto de hace tres días ratificó el dictamen que hace un año emitió la Corte de Apelaciones, cuando suspendió el juicio contra el ex jerarca militar, de 86 años de edad, al considerar el 9 de julio de 2001 que observaba signos de "demencia".

Pinochet fue detenido en Londres en oc-tubre de 1998, a solicitud de la justicia es-pañola que quería juzgarlo por los crímenes durante su régimen militar de 17 años, por requerimientos de querellantes chilenos y extranjeros, pero fue liberado por la justicia británica después de 16 meses de arresto por razones de salud, por lo que volvió a Chile en marzo de 2000 en medio de una gran indignación mundial.