Anuncia el gobierno su plan demográfico; dos
hijos por pareja, entre las metas
Necesario, romper el círculo entre pobreza y
crecimiento poblacional
También prevé aumentar la esperanza de vida en localidades
con altos índices de marginación y concretar el acuerdo migratorio
con EU Futuro
de viejos y pobres si no hay desarrollo: Conapo
JUAN MANUEL VENEGAS
Con la meta de armonizar "los géneros demográficos"
con el potencial de desarrollo del país, ayer se presentó
en Los Pinos el Programa Nacional de Población 2001-2006, el cual
se propone alcanzar un nivel de fecundidad de dos hijos por pareja, equivalente
al remplazo intergeneracional; aumentar el uso de métodos anticonceptivos
a 74 por ciento en mujeres con edad fértil; disminuir la tasa de
crecimiento natural de 1.74 a 1.43 por ciento, y reducir la razón
de dependencia de 61.3 dependientes por cada 100 personas en edad laboral,
que se registra actualmente, a 53.
Asimismo,
se plantea aumentar la esperanza de vida en "al menos" 1.7 años;
acortar en 15 por ciento la "distancia promedio" que separa a las entidades
federativas en cuanto a ese indicador, y aumentarla a la población
de municipios con mayor índice de marginación y predominancia
indígenas en "al menos" dos años.
Con esas, entre otras medidas, se pretende contribuir
a romper el "círculo perverso" entre pobreza y rezago demográfico,
proteger y favorecer el ejercicio de los derechos de las personas en los
ámbitos de relevancia demográfica, anticipar las demandas
sociales derivadas del cambio de estructura por edad, fortalecer a las
familias mexicanas y propiciar una distribución territorial acorde
con el potencial de desarrollo regional sustentable.
De igual forma, se buscará influir en la consecución
de un sistema migratorio con Estados Unidos, "legal, digno, seguro y ordenado.
Movilidad de enormes proporciones
Respecto del fenómeno migratorio y su importancia
en la política poblacional, la secretaria general del Consejo Nacional
de Población, Elena Zúñiga Herrera, indicó
que "la movilidad territorial" de los mexicanos que alcanza a Estados Unidos
es de "enormes proporciones, con profundas ramificaciones económicas,
sociales, políticas y culturales, que demandan una atención
prioritaria", pues tan sólo "en las recientes cuatro décadas
la pérdida neta de población por efectos de la migración
se multiplicó más de 10 veces, al pasar de un promedio anual
de casi 30 mil personas en los sesenta, a 300 mil en la actualidad".
En tanto, el presidente del Consejo Nacional de Población
(Conapo), Héctor Hernández Bringas, subrayó que el
gobierno deberá encontrar alternativas adecuadas para encarar el
reto de las "transiciones demográficas dispares que se viven al
interior del país", a fin de romper la "circularidad entre pobreza
y crecimiento poblacional".
Ante el presidente Vicente Fox Quesada, Hernández
Bringas señaló además que en los próximos lustros
habrá ''incrementos considerables entre el segmento de la población
en edades activas, lo que supone la apertura de una ventana de oportunidad
o bono demográfico".
Sin embargo, ese fenómeno deberá acompañarse
de oportunidades suficientes, principalmente en materia de empleo y educación,
pues de lo contrario "ese bono demográfico se desperdiciará
y podría convertirse en una auténtica pesadilla social, pues
inexorablemente veremos el constante incremento del sector de adultos mayores
sin posibilidades de desarrollo, por lo cual nuestro futuro sería
de viejos y pobres".