Critican el gobierno federal por no enfrentar violaciones al tratado comercial

Productores agropecuarios buscan protegerse del TLCAN

PATRICIA MUÑOZ RIOS

Al gobierno mexicano le ha falta mano dura para enfrentar el incumplimiento de los acuerdos comerciales que Estados Unidos contrajo al firmar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), sostuvo el líder del Consejo Nacional Agropecuario, Armando Paredes, y añadió que los productores buscarán que el país recurra a "salvaguardas" para no padecer la apertura brutal que se producirá en 2003.

Se solicitará al gobierno federal que recurra a los mecanismos establecidos en este acuerdo comercial para casos en que "productos sensibles" pueden verse afectados por la apertura, así como a otras políticas de protección, y que incluso aplique las normas sanitarias que nunca ha empleado, para que no se liberalice totalmente el próximo año la entrada de productos agropecuarios extranjeros al país, expuso el dirigente.

Desde su punto de vista, tendrá un "alto impacto" en el sector agropecuario mexicano la liberalización total del sector, pactada para 2003, y varios sectores serán arrasados por las importaciones de alimentos extranjeros que entrarán sin límite al país.

Por ello, se debe buscar, o bien un acuerdo adicional al TLCAN con Estados Unidos y Canadá -para hacer "más transitable" esta apertura- en el que se convengan nuevos plazos, o bien establecer estrategias y recurrir a los propios instrumentos de salvaguarda del convenio para no enfrentar de golpe esta liberalización que se hace doblemente grave por la política de altos subsidios que el vecino país del norte estableció para su producción agropecuaria.

Mejor comportamiento del sector comercio, pero basado en importaciones

Armando Paredes reconoció que de suyo parte del mercado mexicano ya ha sido avasallado por las importaciones estadunidenses, por ejemplo 35 por ciento de la carne de res que se come en México es extranjera, así como 20 por ciento de la papa. Es decir, algunas cadenas del sector ya "sufren", pues la apertura no va a empezar en 2003, sino que comenzó hace muchos años.

Estimó que este año, al igual que el anterior, el país tendrá una balanza agropecuaria deficitaria; el tipo de cambio se mantendrá con poca variación hacia el fin de año, y que el aparato productivo mexicano se mantendrá aún en una fase recesiva.

Del comportamiento global de la economía comentó que "el presente año es complicado", pero con inflación controlada y a la baja, al igual que las tasas de interés, y que aun cuando en general la planta productiva nacional y el empleo no presentan condiciones favorables, el sector comercio mostrará un mejor comportamiento, pero desafortunadamente sustentado en gran medida en la venta de productos importados.

Del sector agropecuario explicó que hay señales muy preocupantes por el alto nivel de importaciones que se está registrando en productos como preparados alimenticios, rubro en que se ha elevado 34.3 por ciento la entrada de productos extranjeros; la leche en polvo registró un crecimiento de 46.2 por ciento y los alimentos balanceados 33.6 por ciento.