Las lesiones que sufrió no motivaron el deceso, afirma Presidencia en un comunicado

Los golpes que recibió Espinoza Juárez sí incidieron en su muerte

Había broncoaspirado materia gástrica antes de ingresar, sostiene el director del nosocomio

CAROLINA GOMEZ MENA

Después de que ayer falleció el ejidatario José Enrique Espinoza Juárez, La Jornada preguntó textualmente al director del Hospital de Traumatología del Instituto Mexicano del Seguro Social, Juan Carlos de la Fuente Zuno: "¿Los golpes recibidos durante el enfrentamiento incidieron en su muerte?" El médico respondió: "Sí. Lo que pasa es que un paciente en las malas condiciones en que nos llegó Espinoza Juárez tiene una reserva vital baja. Así, ante cualquier estímulo negativo (como los golpes) no puede responder en la forma en que responde cualquier paciente sano o joven; la suma de las situaciones fue lo que desencadenó su muerte."

Después de dejar en claro que la atención médica que se le dio fue "del más alto nivel", detalló que Espinoza perdió la vida debido a que experimentó el síndrome de insuficiencia respiratoria progresiva del adulto, porque broncoaspiró contenido gástrico antes de ingresar al hospital. "Cuando lo ingresamos tenía huellas de broncoaspiración; eso ocurre cuando los pacientes están inconscientes y al vomitar ingresan ese material a las vías respiratorias. Al ponerle el tubo, nos dimos cuenta que había restos de alimentos; lo aspiramos, pero éste muchas veces alcanza a penetrar hasta el interior de los pulmones, en las vías más pequeñas, donde se queda y los ácidos biliares las dañan."

Pero también tuvo que ver la diabetes mal controlada. "Estaba descompensado; yo me entrevisté dos o tres veces con uno de sus hijos y él corroboró lo que nosotros detectamos: no se controlaba la enfermedad de forma adecuada."

Espinoza Juárez fue trasladado el 13 de julio al Hospital de Traumatología y Ortopedia de Lomas Verdes del IMSS, con traumatismo craneoencefálico, producto del enfrentamiento con agentes de seguridad pública del estado de México. El día 11, cuando ocurrieron los hechos, fue detenido y trasladado primero al Centro de Justicia de Ecatepec para que compareciera ante el Ministerio Público, luego fue consignado al penal de Villa de las Flores.

De la Fuente Zuno fue muy cuidadoso en precisar a este diario que la broncoaspiración ocurrió porque estaba inconsciente y que por su situación de salud "no pudo responder de manera adecuada ante los estímulos negativos".

Cabe aclarar que la charla telefónica con De la Fuente Zuno se produjo ayer por la tarde, gracias a la mediación de la Dirección de Comunicación Social del Instituto Mexicano del Seguro Social.

"Fue obligado" a participar el 11 de julio

Desde Los Pinos ayer se emitió un comunicado en el que el gobierno federal afirma que las lesiones sufridas por José Enrique Espinoza Juárez, durante el enfrentamiento del 11 de julio en Acolman, "no son la causa de la muerte".

Empero, reconoce que fue internado dos días después "con traumatismo craneoencefálico, producto del enfrentamiento" con policías del estado de México.

El texto atribuye a la esposa de la víctima, María del Socorro Merino Buendía, declaraciones en las que "aseguró que su marido no era ejidatario ni simpatizante del FUCCA", que fue obligado a participar en la marcha del 11 de julio y que "era objeto de presiones para sumarse al movimiento de rechazo" al aeropuerto.

José Enrique Espinoza llegó hace 12 años a la colonia Francisco I. Madero, se dedicaba a labores del campo, en terrenos propiedad de su esposa y la familia de ésta, y fue checador en una línea de autotransporte. Era miembro del movimiento contra la construcción de la terminal aérea y asistió a la mayoría de los actos convocados por la comunidad de San Salvador Atenco.

La agresión causó fallas orgánicas: CNDH

VICTOR BALLINAS

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) aseguró anoche que aun cuando José Enrique Espinoza Juárez padecía un cuadro clínico severo de diabetes mellitus, fueron los golpes que recibió el 11 de julio ?por granaderos del estado de México? los que precipitaron las fallas orgánicas múltiples que finalmente desencadenaron su muerte.

El organismo explicó que a las 10:45 horas de ayer recibió la petición del abogado Enoc Escobar Ramos solicitando la presencia de personal especializado de la CNDH en el Centro de Justicia de Naucalpan, estado de México, y también de autoridades del gobierno estatal para asistir a la necropsia de ley en el cadáver de Espinoza, quien falleció a las 3:40 de ayer.

Informó que la participación del doctor Fernando Cervantes Duarte, perito médico de la CNDH en dicha diligencia, arrojó lo siguiente: "De acuerdo con las determinaciones y comprobaciones médicas practicadas durante la diligencia de necropsia, el señor Espinoza Juárez padecía un cuadro severo de diabetes mellitus, descompensada por cetoacidosis, con notables alteraciones hidroelecrolíticas propiciatorias de edema cerebral, pancreatitis aguda, esteatosis hepática, daño glomerular y neumonía bilateral.

"Estas situaciones patológicas, para ser corroboradas, hicieron conveniente la realización posterior de estudios de laboratorio cuyos resultados están pendientes de ser emitidos.

"Las consecuencias clínicas del cuadro anterior, tras los hechos circunstanciales ocurridos el 11 de julio, en los que el señor Espinoza resultó con contusiones en diferentes partes del cuerpo ?a raíz de las cuales fue ingresado el 13 de julio en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Traumatología del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Lomas Verdes? produjeron las fallas orgánicas múltiples que finalmente desencadenaron su muerte".
 

El abogado de los labriegos presentará denuncia por homicidio contra la DGSPTEM

Responsabilizan ejidatarios a Fox y Montiel

El cadáver de José Enrique Espinoza fue entregado a su esposa a las 16:45 horas

SILVIA CHAVEZ GONZALEZ E ISRAEL DAVILA CORRESPONSALES

Naucalpan, Mex., 24 de julio. Envuelto en una bolsa de plástico negra, y por la puerta trasera del Centro de Justicia de Naucalpan, estado de México, fue entregado este miércoles el cuerpo de José Enrique Espinoza Juárez, ejidatario de San salvador Atenco, quien falleció a las 3:40 horas en el Hospital de Traumatología del IMSS de Lomas Verdes.

Juan Carlos de la Fuente Zuno, director general del Hospital de Traumatología del IMSS de Lomas Verdes, ubicado en este municipio, al informar de la muerte del labriego comentó que esta persona, además de la diabetes, ingresó al nosocomio con traumatismo craneoencefálico luego de participar en el enfrentamiento con policías mexiquenses en Acolman el 11 de julio.

En tanto, Ignacio del Valle, uno de los dirigentes de los ejidatarios que se oponen a la construcción del aeropuerto en Texcoco, responsabilizó del deceso de su compañero al gobernador del estado de México, Arturo Montiel Rojas, y al presidente Vicente Fox Quesada.

Aseguró que en el tratamiento que se dio a Espinoza Juárez "hubo negligencia médica y una actitud irresponsable, porque el motivo de su muerte fue la golpiza que le dieron, no otra cosa".

Espinoza Juárez falleció a las 3:40 de esta madrugada y, de acuerdo con el reporte oficial de De la Fuente Zuno, el paciente ingresó a la sala de terapia intensiva el pasado 13 de julio y presentaba un traumatismo craneoencefálico de grado uno, "considerado leve en una escala en la que el grado tres es el más grave".

En conferencia de prensa, De la Fuente Zuno informó que al momento de su muerte, Espinoza Cruz presentó el diagnóstico: "Diabetes mellitus descompensada, insuficiencia respiratoria aguda o neumonía bilateral o síndrome de insuficiencia respiratoria del adulto, síndrome de falla orgánica múltiple, traumatismo craneoencefálico grado uno y síndrome de posreanimación". Además de estos males degenerativos presentó de manera colateral broncoaspiración.

Explicó que durante media hora se realizaron maniobras de reanimación pero no fue posible revertir el cuadro crítico, declarando su muerte a las 3:40 horas. El médico aclaró que el cadáver de Espinoza Juárez presentaba "huellas" del esfuerzo que realizó el personal médico para sacarlo del paro cardiorrespiratorio y que su deceso no se debió al traumatismo craneoencefálico que presentaba, "sino a una diabetes mal tratada".

El cadáver de Espinoza Juárez fue trasladado al servicio médico forense del Centro de Justicia de Naucalpan, en donde un galeno legista del Hospital de Traumatología del IMSS de Lomas Verdes y uno de servicios periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México le practicaron la necropsia.

Aproximadamente a las 8 horas llegó al nosocomio Ignacio del Valle acompañado de Gustavo Camacho Guzmán, abogado de los ejidatarios de Atenco, y una comisión de unas 30 personas. "Nosotros responsabilizamos a los asesinos directos, que son Arturo Montiel Rojas y Vicente Fox, ellos son los responsables de este acontecimiento. Nosotros les exigimos que abrieran las orejas para que nos escucharan, y miren lo que ha pasado", señaló Del Valle.

Asimismo, cuestionó "la premura" conque las autoridades judiciales solicitaron que se practicara la necropsia, pues dijo que los familiares del occiso -que este día fue considerado "símbolo de la resistencia de Atenco"- nunca fueron informados de que le sería practicada esta diligencia.

Gustavo Camacho Guzmán, abogado de los ejidatarios, informó que presentará una denuncia penal por el delito de homicidio contra la Dirección General de Seguridad Pública y Tránsito del Estado de México (DGSPTEM). Explicó que durante tres días y sin tratamiento médico, Espinoza Juárez permaneció en las galeras de la Subprocuraduría de Justicia de Tlalnepantla y sólo recibió atención médica cuando se agravó su salud.

En tanto, a petición de ejidatarios de San Salvador Atenco, arribaron al Centro de Justicia de Naucalpan cuatro visitadores de las comisiones Nacional (CNDH) y de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), con la intención de corroborar el parte médico de la necropsia aplicada al cuerpo de Espinoza Juárez, debido a que los labriegos argumentaron que hubo torturas y negligencia médica.

El primer visitador de la Codhem, Manuel Zamora Vázquez, señaló que en el cuerpo del occiso no se encontraron muestras de tortura y que las lesiones que presentaba eran las mismas que personalmente observó el 11 de julio, cuando se entrevistó con Espinoza Juárez en las galeras de la Subprocuraduría de Tlalnepantla.

Sin embargo, el médico legista Adrián Ramírez, presidente de la Liga Mexicana de Derechos Humanos, llamado por los ejidatarios, dijo que de acuerdo con la evolución clínica del paciente y testimonios, "hay una cadena de elementos que inician con la golpiza, y cuando estaba detenido no fue atendido, y a una persona que padece diabetes se le complica el problema ante lo que esta persona vivió".

Ambos dijeron que no tuvieron acceso al dictamen de la necropsia, y que será en los próximos días cuando se confirme la causa de este deceso. Este miércoles se intentó practicar una segunda necropsia al cadáver, pero no se realizó debido a que el representante de la ONG tenía que cumplir una serie de requisitos que determinó el Ministerio Público.

A las 16:45, María del Socorro Merino, acompañada por familiares, recibió el cuerpo de su esposo Espinoza Juárez. Los camilleros del forense lo depositaron en una camioneta Dodge Ram, con placas del Distrito Federal, para ser trasladado a San Salvador Atenco.

No era ejidatario: Navarrete Prida

En Toluca, el procurador de Justicia mexiquense, Alfonso Navarrete Prida, aseguró que José Enrique Espinoza Juárez no era ejidatario de San Salvador Atenco y deslindó al gobierno estatal de toda responsabilidad por la muerte de esa persona, pues "su fallecimiento se debió a la mala atención" del cuadro de diabetes que padecía.

Indicó que la procuraduría inició una averiguación previa para determinar si existió negligencia médica en el tratamiento que se le seguía desde el 13 de julio en el Hospital de Traumatología del IMSS de Lomas Verdes, donde fue internado después del enfrentamiento. Explicó que el parte médico señala que familiares de Espinoza Juárez corroboraron "el mal control de la diabetes que padecía éste en forma crónica, lo cual ocasionó su deceso a los 53 años de edad a las 3:40 horas de hoy".

Aseguró que Espinoza Juárez ingresó al hospital de Lomas Verdes el día del enfrentamiento con la policía, donde certificaron que las lesiones que presentaba -traumatismo craneoencefálico grado uno- tardaban en sanar menos de 15 días. Sin embargo, "sus familiares nunca dieron aviso a los médicos del padecimiento de diabetes mellitus descompensada, ni de una enfermedad respiratoria mal cuidada, por lo que se le dio de alta, teniendo que reingresar el 13 de julio a las 12:30 horas porque su estado de salud había empeorado".

Luego de presentar un fragmento del video donde se observa el enfrentamiento entre policías estatales y ejidatarios de Atenco, el funcionario insistió en que la lesión traumática no fue provocada por un golpe de tolete, sino por "un objeto irregular".

"Queda muy claro en el video que la policía no fue a emboscar a este grupo opositor, que la policía fue agredida por un camión (sic), que los policías fueron lesionados con machete, que policías fueron apedreados, y quiero señalar que esta persona, José Enrique Espinoza Juárez, no es ejidatario, no tiene parcela ejidal; no lo dice el procurador, sino lo está declarando su esposa a la procuraduría y a medios de comunicación".

Tras señalar que esta persona sólo era poseedor de un lote en la zona de Atenco, el procurador dijo que la esposa del occiso declaró "que no comulgaban con el movimiento opositor del aeropuerto y que acudió a la cita porque había mucha presión de compañeros de él para que pudieran acompañarlos".

Revisará expediente la Codhem

El comisionado de los derechos humanos del estado de México, Miguel Angel Osorno Zarco, exigió a la Procuraduría de Justicia mexiquense no quedarse con el parte médico del hospital, sino realizar los exámenes médicos y periciales correspondientes para verificar la causa de la muerte de Espinoza Juárez.