Abogados británicos advierten al premier que sería ilegal
una invasión al país asiático
Exigen a Blair demostrar la existencia de armas de
destrucción masiva en territorio iraquí
DPA Y AFP
Amman,
28 de julio. El gobierno de Irak desafió nuevamente este domingo
al primer ministro de Gran Bretaña, Tony Blair, para que muestre
pruebas sobre sus acusaciones de que posee armas de destrucción
masiva, al tiempo que la prensa británica sostuvo que asesores gubernamentales
han advertido a Blair que una participación británica en
una eventual operación contra Irak sería ilegal.
"Aparentemente, Blair está determinado a rehuir
el ofrecimiento iraquí hecho el 28 de febrero, cuando Bagdad expresó
su disposición inmediata a recibir un equipo británico para
guiarnos dónde y cómo son producidas esas armas", dijo un
vocero del Ministerio del Exterior iraquí, según citó
la agencia oficial de noticias Ina.
"Si Blair aún quiere probar sus acusaciones, nuestra
oferta sigue siendo válida, y lo desafiaremos una vez más
a mostrar una evidencia. Pero él es incapaz de hacer eso, como fue
el caso de los anteriores equipos de inspección de armas" de la
Organización de Naciones Unidas (ONU), añadió la fuente.
En su edición de la víspera, el diario británcio
The Guardian informó que Blair dijo al presidente de Estados
Unidos, George W. Bush, que Londres apoyará un ataque contra Irak
si el presidente Saddam Hussein se niega a aceptar la reanudación
de las inspecciones de armas. Un apoyo "en principio" que también
fue prometido por Francia, señaló el rotativo.
En este contexto, abogados del gobierno británico
advirtieron a Blair que la participación de Gran Bretaña
en una invasión a Irak sería ilegal sin la autorización
de la ONU. El aviso, el cual es de alta confidencialidad, llevó
al Ministerio de Exteriores británico a señalar a Downing
Street que una resolución de Naciones Unidas podría ser el
mejor paso para asegurar un moderado apoyo de Rusia y los países
árabes a cualquier ataque contra Hussein, indica el periódico
británico The Independent en su edición de este lunes.
En otro orden, dos guerrilleros kurdos murieron en un
enfrentamiento entre facciones rivales en la provincia separatista del
norte de Irak, informó un funcionario de la administración
regional.
Los enfrentamientos se recrudecieron el sábado,
luego que diez miembros del Partido de la Solución Democrática
del Kurdistán ingresaron a territorio controlado por la Unión
Patriótica del Kudistán, dio a conocer Adnan Mufti, viceprimer
ministro de la UPK en el enclave del gobierno regional.
Ambas agrupaciones políticas rivales tomaron el
control del norte de Irak después que gobernara ahí el presidente
Saddam Hussein, hasta la guerra del Golfo en 1991. Desde entonces administraron
juntos el enclave kurdo, protegido por aviones de combate estadunidenses
que vigilan la declarada zona de prohibición de vuelos.