Acusan a comuneros de desviar el líquido
a un balneario
Clausuran en Hidalgo tomas de agua en protesta
por la escasez
El problema afecta a sólo mil 200 de 40 mil personas,
dice el alcalde de Ixmiquilpan Ordena retirar sellos y abrir candados
CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL
Ixmiquilpan, Hgo., 21 de agosto. Molestos por la
escasez de agua que padecen desde abril, vecinos de tres colonias y de
parte del centro de esta localidad "clausuraron" las tomas del manantial
de la comunidad de Humedades, y acusaron a comuneros, militantes de la
Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), de "desviar"
el líquido para el balneario Tollan, de reciente creación,
que además surte de líquido al centro recreativo El Paraíso.
El
alcalde Cirilo Hernández Quezada informó que el problema
del agua es "preocupante", pero indicó que sólo afecta a
unas mil 200 personas, de una población de 44 mil. Lo grave, dijo,
es que de los más de 44 mil usuarios, 95 por ciento no paga la cuota
anual de 60 pesos, mientras el municipio tiene que liquidar a la Comisión
Nacional del Agua (CNA) 120 mil pesos trimestrales por el suministro en
bloque. Además, agregó, existe una mala cultura del cuidado
del agua.
La falta del líquido en zonas periféricas
del centro de Ixmiquilpan ha provocado movilizaciones de los vecinos, quienes
este miércoles realizaron un plantón en la presidencia municipal,
y la semana pasada acudieron hasta el manantial que les abastece para clausurar
la puerta de entrada con sellos del barrio de San Antonio.
La protesta fue reprobada por el alcalde, quien, acompañado
por el director de Gobernación, José Ramón del Campo,
y el dirigente estatal de la UNTA, Isidro Pedraza Chávez, ordenó
el retiro de los sellos y violar el candado de la puerta.
Zona rica en manantiales, mala distribución
El problema se agravó al descubrirse que, además
del agua que se desvía presuntamente para el centro recreativo Tollan,
propiedad de los comuneros, Epigmenio Montiel, dueño del balneario
El Manantial, que se surte de El Paraíso, construyó en el
techo de su casa un gigantesco tanque para vender agua a las pipas.
Más aún, los piperos aprovechan la falta
de líquido en barrios y colonias y venden hasta a 600 pesos la pipa.
Isidro Pedraza Chávez argumentó que el asunto
se ha complicado por el mal manejo del sistema de distribución,
no por falta de líquido, porque "esta es una zona rica en manantiales
de aguas termales".
Recordó que desde los años 40, esta agua
era utilizada para riego por los comuneros, pero en 1998 se acordó
que debería ser distribuida para consumo humano, y a cambio se ofrecieron
aguas del canal del Tecolote para irrigar los cultivos, acuerdo "que nunca
se cumplió".
Por este problema, que no se resolverá hasta que
la CNA y la Comisión Estatal del Agua realicen un estudio sobre
el aforo del manantial, unos 36 vecinos del centro acudieron a la ciudad
de México a entrevistarse con el senador panista José Antonio
Hagenbeck, para que interceda en este problema.