Según autoridades estadunidenses, 113 personas han fallecido entre Sonora y Arizona
Dos indocumentados mueren ahogados en el río Bravo al huir de la Patrulla Fronteriza
Representantes de ONG pedirán a George W. Bush cambios legales en pro de migrantes
MARTIN SANCHEZ, CRISTOBAL GARCIA Y JORGE A. CORNEJO CORRESPONSALES
Dos indocumentados murieron ahogados este lunes en el río Bravo cuando intentaban evadir a la Patrulla Fronteriza para cruzar hacia Estados Unidos. Los cuerpos fueron hallados a la altura del ejido Rancho Viejo, ubicado en la ciudad de Matamoros, informó la Policía Ministerial.
Entretanto, un reporte de la Patrulla Fronteriza dio a conocer que en lo que va del año fiscal de Estados Unidos (que termina el último día de septiembre) se tienen registradas 113 muertes de migrantes mexicanos que perecieron en la frontera entre Sonora y Arizona en su intento por llegar al país vecino.
El documento precisó que 64 migrantes fallecieron a causa del intenso calor que se registra en esa zona desértica, mientras que el resto murieron por otras causas.
En otro orden, una comisión especial conformada por representantes de la Iglesia católica, activistas y defensores de los derechos humanos de California, viajará a Washington, capital de Estados Unidos, para entregar al presidente George W. Bush un millón de tarjetas firmadas por miembros de esas organizaciones, a fin de que esa administración cambie las leyes de migración y permita la legalización de los millones indocumentados de origen latinoamericano que habitan en ese país.
El anuncio se efectuó en un templo de Los Angeles, California, durante una misa con motivo del Día del Trabajo que se celebró este lunes en el país vecino.
El cardenal Roger Mahony, el actor Edward James Olmos y miembros del cuerpo diplomático de México y Guatemala rindieron tributo a las contribuciones económicas de los trabajadores indocumentados.