A UN AÑO DEL 11-S
"Imprudente", agredir Bagdad; incrementaría
la tensión internacional: Kofi Annan
Rechazan Francia, Rusia y China apoyar a Bush en un
ataque a Irak
Chirac le recordó al presidente de EU que sólo
la ONU puede "adoptar medidas" contra Hussein
Desestima el secretario general de la OTAN las versiones
sobre una "inminente acción bélica"
AFP, REUTERS Y DPA
Washington, 6 de septiembre. El presidente de Estados
Unidos, George W. Bush, no logró convencer hoy a sus colegas de
Francia, Rusia y China de la necesidad de actuar militarmente contra Irak
"antes de que sea demasiado tarde", pese a la ayuda de su aliado, el primer
mi-nistro británico Tony Blair, quien conversó sobre el mismo
tema con los presidentes francés y ruso, Jacques Chirac y Vladimir
Putin.
Según el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer,
Bush insistió en "la necesidad de hacer que el mundo sea más
pacífico", y al pa-recer sus interlocutores se expresaron con cautela,
pese a que el mandatario les dijo que aún no ha tomado "ninguna
decisión" sobre una posible ofensiva militar.
Chirac le dio cierta satisfacción al decirle a
Bush que la comunidad internacional debe actuar con "de-terminación",
pero recordó al mandatario estadunidense y al primer ministro británico
la posición francesa repetida hasta la saciedad: corresponde a la
Organización de Naciones Unidas (ONU) y sólo a ella la decisión
de adoptar medidas contra Bagdad, informó la portavoz de la presidencia
francesa, Ca-therine Colonna.
Francia,
que considera que "el control de armas es indispensable para la seguridad
regional", desea por consiguiente "el regreso sin condiciones y sin trabas
de los inspectores" de armas de la ONU, que abandonaron Irak en 1998.
Diplomático pero firme, el presidente ruso, Vladimir
Putin, reiteró su negativa a Bush y Blair, quienes le pidieron una
vez más su respaldo a los ataques contra Irak pla-neados por Washington.
Según informó el Kremlin, Putin, aliado
de Estados Unidos en su lu-cha contra el terrorismo internacional, declaró
que "duda" seriamente de que el recurso de la fuerza esté justificado,
y estimó que existen posibilidades reales de solucionar políticamente
el problema iraquí.
Putin manifestó a Blair que "du-da mucho de que
el recurso de la fuerza esté justificado, tanto desde el punto de
vista del derecho internacional como de las posibles consecuencias negativas
para la situación en el golfo Pérsico y en Medio Oriente,
y también para la cohesión de la coalición antiterrorista".
Mutismo de Pekín
En Pekín, las autoridades no co-mentaron la llamada
telefónica de Bush, pero nadie duda de la posición china,
reiterada la víspera por Kong Quan, portavoz del Ministerio de Relaciones
Exteriores.
Quan afirmó que China se opone a una acción
militar estadunidense contra el régimen de Saddam Hussein, reclama
el regreso de los inspectores de la ONU a Irak y está "preocupada"
por el tema iraquí, que cree está empeorando.
La noche del viernes, el ministro de Defensa alemán,
Peter Struck, afirmó que "si se demuestra que Irak participaba activamente
en el terrorismo, se crearía una situación nueva", al dar
a entender sobre la posibilidad de un cambio de actitud de Berlín.
El canciller federal alemán, Gerhard Schroeder,
es el único de los grandes aliados europeos de Washington que ha
descartado participar en un ataque militar estadunidense contra Irak, incluso
si éste es respaldado por la ONU.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, reiteró
su oposición a un ataque estadunidense a Irak, tras reunirse con
el presidente francés en París, y afirmó que lo consideraba
"imprudente", porque incrementaría la tensión internacional.
Sin embargo, dijo estar "alentado" por la voluntad del
presidente Bush, de consultar a la comunidad internacional antes de lanzar
una operación militar contra Bagdad.
El gobierno de Canadá reiteró su rechazo
a un eventual ataque contra Bagdad y llamó a la Casa Blanca a presentar
pruebas contra el régimen. En declaraciones a la televisión
local, el primer ministro Jean Chretien afirmó que su país
carece de evidencias sobre supuestos planes bélicos de Hussein.
El jefe del gobierno canadiense manifestó que este
asunto será el tema principal a discutir durante una reunión
con Bush, el lunes próximo en Washington.
Gira de líder de la Liga Arabe
Por su parte, el secretario general de la Liga Arabe,
Amr Moussa, co-menzó este viernes una gira por Europa y Estados
Unidos para de-fender la posición unánime de todos los países
árabes contraria a un ataque contra Irak.
"Las campañas preparadas contra varios países
árabes y sobre todo las amenazas crecientes de una operación
militar contra Irak encabezan los temas", los cuales serán abordados
por Moussa, indicó el portavoz de la Liga Arabe, Hisham Yusef.
Sin la participación de sus aliados europeos, la
política de Estados Unidos respecto de Irak, Irán y Medio
Oriente posiblemente fracasará, según la opinión de
reconocidos expertos estadunidenses.
En un estudio publicado hoy para el Consejo Atlántico
y la Fundación Marshall de Estados Unidos se concluye, además,
que sin la cooperación de los europeos está en peligro la
alianza más importante de Estados Unidos y se socava la lucha contra
el terrorismo.
En lo referente a Irak, los expertos aconsejan a la Casa
Blanca ha-cer un esfuerzo conjunto con sus aliados para reanudar los controles
de armas. En el caso de que esto fracase en un lapso razonable, los socios
entonces deberían apoyar el uso de las armas.
El ministro de Relaciones Exteriores británico,
Jack Straw, declaró tener una "paciencia sin límites" con
respecto a Irak, pero descartar una opción militar sería
"una locura" irresponsable.
"Comparado con los regímenes totalitarios del pasado,
Irak pertenece a una categoría excepcional", declaró el jefe
de la diplomacia británica en un discurso en la Universidad de Birmingham.
Londres confirma bombardeo
Mientras, el gobierno de Gran Bretaña confirmó
que aviones de combate estadunidenses y británicos bombardearon
el jueves posiciones antiaéreas estratégicamente importantes
en el oeste de Irak.
Los aviones atacaron las posiciones después de
que se efectuaran disparos contra uno de sus aviones de reconocimiento
en la zona de exclusión aérea, informó Londres, confirmando
la información difundida por el comando supremo de Estados Unidos.
Agregó que hasta cien aviones participaron en las "medidas de autodefensa".
Según el diario británico Daily Telegraph,
se trató del mayor ataque anglo-estadunidense contra objetivos iraquíes
desde hace cuatro años, y aparentemente fueron destruidas posiciones
para que, en caso de un ataque, tropas especiales puedan llegar sin problemas
a Irak en helicóptero a través de Jordania y Arabia Saudita.
Sin embargo, el Pentágono negó el informe
y señaló que fue un ataque de "proporciones normales. Fue
mayor probablemente que los que realizamos en las dos semanas anteriores,
pero hemos llevado a ca-bo ataques de esa naturaleza varias veces en los
pasados 10 u 11 años".
En relación con el número de aviones utilizado,
que el Daily Te-legraph cifró en cien, David La-pan, portavoz
del Pentágono indicó que "el número está equivocado.
La idea de que fue el mayor bombardeo en cuatro años es falsa",
y no precisó la cantidad de aviones que participó en la operación.
En este contexto, el secretario general de la Organización
del Tratado del Atlántico Norte, el estadunidense George Robertson,
desestimó insistentes rumores que circulan sobre la "inminencia"
de un ataque aéreo de la coalición bélica contra territorio
iraquí.
"Es pura especulación -declaró Robertson-.
No existe decisión al-guna de la organización, y el tema
tampoco ha sido analizado por el consejo de la alianza atlántica".