Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 10 de septiembre de 2002
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CIUDAD PERDIDA

Miguel Angel Velázquez

Los favores de la Corte

LA DECISION DE la Suprema Corte de Justicia de no ir a la revisión de la controversia constitucional de la ley indígena no sólo dividió, cuando menos en lo técnico, a los jueces, sino que trajo como consecuencia exactamente lo que se trataba de evitar, la separación, la división entre los mexicanos.

PARA QUIENES HAN tratado de disculpar a los jueces por su, digamos, ¿omisión?, habría que recordarles que el fallo no fue unánime, es decir, hubo tres votos de ministros que encontraron base jurídica para supervisar la actuación y las decisiones del Legislativo, como ya se había hecho con anterioridad en el caso de Manuel Camacho, quien pretendía ser electo jefe de Gobierno del DF, después de haber sido regente.

PERO HUBO, ADEMAS, ciertas formas que despiertan sospecha en el actuar de la Corte y por ello levantan algunas preguntas sin explicación, sobre todo cuando se trata de hacer lo justo, de hallar en lo legal la regla que impida el enfrentamiento y que por ello conduzca a la sociedad a la convivencia pacífica.

LA SUPREMA CORTE de Justicia de la Nación, que como usted sabe sesiona lunes, martes y jueves, esta vez sesionó en viernes; siempre lo hace casi al mediodía, pero este fin de semana empezó a sesionar desde muy temprano.

¿CUAL ERA EL miedo de los magistrados? La ley, cuando es justa, puede no gustar, pero convence y sólo quien sabe que no está en lo justo o bien pretende un acto de traición busca la sombra para actuar con ¿tranquilidad?

PERO BUENO, EN este caso puede que sean otros los motivos por los cuales la Corte decidió, eso sí, con irregularidad no conocida, sesionar en un día y a una hora inusual.

EN FIN, AHORA lo preocupante son los resultados de la ley que impulsó el gobierno de Vicente Fox, a todas luces injusta porque propone, como afirma don Pablo González Casanova, la redistribución del territorio mexicano (La Jornada, 8 de septiembre de 2002) para el beneficio, otra vez, de unos cuantos.

SOLO QUIEN NO quiera verlo podrá decir que la mencionada ley se halla fuera de los compromisos de campaña de Fox. Sólo quien se suponga ignorante podrá señalar que el fallo de la Corte es nada más técnico y que no habrá de causar serios problemas a una parte de la población.

NO SE CUANTO tarde, pero dentro de muy poco veremos a las muy exitosas empresas gringas y a los limpios y honrados capitales nacionales aliarse para tratar de despojar a los indios de lo poco que les queda, pero seguramente no será fácil, tal vez quede por ahí algún recurso legal que impida la razón de esta ley: el Plan Puebla Panamá.

DICEN POR AHI que la misma Corte habría fallado en contra del Ejecutivo en el caso Atenco, y tal vez sea cierto, pero a cambio de aquella parte del estado de México le pusieron en posibilidad de ofertar todo el sureste del país. No cabe duda, la justicia es totalmente ciega.

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