El ministro de Cultura de La Habana anuncia las actividades que llevará a la FIL

''Cuba tiene la madurez para separar el aporte literario de la posición política''

ARTURO GARCIA HERNANDEZ ENVIADO

La Habana, 9 de septiembre. El gobierno cubano concede una ''tremenda importancia'' a la presencia de Cuba, en calidad de invitada de honor, en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), porque es una ocasión excepcional de intercambio cultural con el pueblo mexicano, en especial con el lector. Abel Prieto, ministro de Cultura del gobierno cubano, sostuvo lo anterior al dar a conocer algunos aspectos del programa de actividades culturales que se llevarán a cabo.

"Apreciamos ese encuentro en toda su magnitud, en toda su trascendencia, y pensamos que es un gran momento para acercarnos culturalmente al pueblo mexicano, para reforzar esas relaciones culturales, que jamás ninguna coyuntura en ningún momento ha debilitado".

El funcionario expuso que, entre otras cosas, asistirá a la capital jalisciense una representación de ''lo mejor de la literatura cubana'' de varias generaciones de escritores, "que están en los distintos géneros creando, aportando para una literatura poderosa, vigorosa, con una ostensible alta calidad''.

Enfatizó que en dicha muestra estarán presentes, como expresión de una política cultural madura, lo mismo autores que radican en la isla que los que han emigrado. En ese sentido serán apreciadas las acciones que se han hecho ''para recuperar para el pueblo lector cubano la creación de escritores cubanos, vivan donde vivan e independientemente de sus posiciones y de sus ideas políticas''.

La política cultural cubana -abundó el ministro de Cultura- "tiene hoy una madurez que nos permite separar el aporte literario, el aporte creativo de un escritor de su posición política".

Aseguró que no se trata de una política de última hora, sino que empezó a promoverse desde finales de los ochenta. De hecho, es una política que lleva más de 15 años de trabajo serio de investigación, difusión. Los autores cubanos residentes fuera de la isla "no son invitados, sino integrantes de nuestra delegación y forman parte de nuestra vida literaria normal''. De ahí que vayan a participar en la FIL Guadalajara escritores residentes incluso en Miami.

''Hoy en Cuba conocemos mejor lo que hacen en términos culturales los emigrados que en cualquier otro país del mundo.

"Ustedes saben que el tema migratorio ha sido muy manipulado políticamente, no por nosotros, desde fuera, y se ha asociado con una especie de disidencia política la decisión de vivir fuera de Cuba. Se ha manejado eso en términos de imagen, y nosotros desde los ochenta empezamos una política editorial destinada a difundir libros fundamentales de autores emigrados''.

Prieto explicó que la ausencia de la obra de Guillermo Cabrera Infante y de Reynaldo Arenas entre la producción editorial cubana se debe a la negativa sistemática del primero a aparecer en ediciones hechas en Cuba y de los herederos del segundo para ceder los derechos de publicación.

La presencia de Cuba en la FIL de Guadalajara se da en un momento de ascenso y pujanza de su industria editorial, tras la crisis de los noventa. En Guadalajara se ofrecerán 25 mil títulos de 45 casas editoriales cubanas.

La industria editorial cubana

Uriel Sánchez, director del Instituto Cubano del Libro, ofreció en el mismo acto cifras que permiten mirar con optimismo el presente y el futuro inmediato de la industria editorial de la isla. Por ejemplo, informó que en la más reciente feria del libro realizada en La Habana se vendieron dos y medio millones de ejemplares, cifra bastante alta en relación con la población total, que es de 11 millones de habitantes.

Además, según estudios, entre 60 y 65 por ciento de cubanos afirma leer sistemáticamente, y se ha detectado ''un incremento importante'' de asistencia a las librerías.

''Nos encontramos -subrayó- en un momento de recuperación de algo que en Cuba, hasta los ochenta, era un fenómeno de masas: la lectura''.

De acuerdo con esto, la industria editorial cubana "logró producir hasta finales de los ochenta 50 millones de ejemplares anualmente y más de 12 mil títulos. Para una población como la nuestra es una cifra muy alta". En 1993 tocaron fondo; a partir de 1995 empezó el proceso de recuperación, y el año pasado, aunque es poco comparado con los anteriores 50 millones, se produjeron 18 millones de ejemplares, superior a los 16 millones que, se calcula, producirá este año la industria editorial argentina, otrora una de las más pujantes del continente.

Presente en el anuncio en que se dieron a conocer algunas asistencias y actividades de Cuba en la FIL, el presidente de la feria, Raúl Padilla, dijo que ''el comité organizador está realmente satisfecho y emocionado por este nutrido y extraordinario programa cultural que se prensenta en la FIL. Es una presencia que veníamos trabajando desde hace más de dos años y finalmente la tendremos. Teníamos interés en contar con Cuba por su historia, tradición y fuerza cultural. En Guadalajara han estado como invitados de honor una decena de países, todos con presencias dignas e importantes, pero en cantidad y en calidad creo que nunca como la que ahora tendremos".

El directivo de la FIL -que será inaugurada el 30 de noviembre próximo- dijo que este año estarán representadas en Guadalajara más de mil 300 editoriales, casi 90 mil títulos en exposición y más de 13 mil profesionales del libro.