A UN AÑO DEL 11-S
Cheney, enviado a un lugar "seguro y secreto" para que asuma el poder si matan a Bush
Alerta nacional en EU ante el "alto riesgo" hoy de ataques terroristas
Dice el procurador general que ha recibido información "confiable" sobre posibles atentados
Células de Al Qaeda preparan acciones en el sur asiático contra instalaciones estadunidenses
JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES
Washington, 10 de septiembre. El gobierno del presidente George W. Bush declaró una alerta nacional porque existe un "alto riesgo" de ataques terroristas contra Estados Unidos y sus intereses, y despachó al vi-cepresidente Dick Cheney a un sitio "seguro y secreto" para que, en caso de un atentado que provoque la muerte del mandatario, el vicepresidente esté listo para asumir el liderazgo del país.
"Consideramos cada amenaza seriamente. Las advertencias que hemos escuchado recientemente nos recuerdan el patrón de amenazas que escuchamos justo antes del 11 de septiembre" del año pa-sado, declaró Bush esta tarde.
Sin embargo, funcionarios de la Casa Blanca informaron que el presidente tiene la intención de mantener su programa de actividades para los próximos días.
El procurador general, John Ash-croft, declaró en televisión a nivel nacional que "en las últimas 24 horas" Estados Unidos había recibido información sobre posibles ataques diseñados para coincidir con el aniversario de los atentados del año pasado.
Las fuerzas armadas han sido colocadas en un nivel mayor de alerta, la fuerza aérea ha reiniciado sus sobrevuelos las 24 horas sobre Washington y Nueva York, y esta tarde fueron enviados boletines especiales a los departamentos policiales del país en los que se advierte de patrones particulares de posibles ataques contra objetivos de transporte o infraestructura energética.
En marzo pasado el gobierno federal estableció un código de colores para fijar una escala de alerta, y hoy, por primera vez, elevó de amarillo a naranja este nivel de alerta, una calidad abajo del más alto, el rojo.
"Información indica que células de Al Qaeda se han establecido en varios países del sur asiático para colocar coches bombas y otros ataques contra instalaciones de Estados Unidos", declaró esta tarde Ashcroft.
Agregó que esta información había provenido de un líder detenido de Al Qaeda que había sido interrogado por un país aliado, pero rehusó identificarlo.
Medio Oriente, otro frente
"La comunidad de inteligencia de Estados Unidos también ha recibido información de que uno o más individuos en Oriente Medio es-tán preparando un ataque suicida contra intereses estadunidenses", aseguró el procurador general.
El Departamento de Estado cerró cuatro de sus embajadas en países del sudeste asiático y fuerzas del Pentágono fueron puestas en alta alerta en Medio Oriente, y aunque Ashcroft subrayó que la información indica que los objetivos están fuera del continente, al-gunos funcionarios estadunidenses expresaron su preocupación porque este mismo tipo de amenazas desde el exterior fueron recibidas poco antes del 11 de septiembre del año pasado.
Por lo tanto, entre los objetivos posibles de los supuestos terroristas están algunas instalaciones y monumentos nacionales en el in-terior de este país.
Tom Ridge, director de Seguridad de la Patria, dijo que los ciudadanos estadunidenses deberían estar "muy alertas a toda actividad sospechosa" y reportarla de inmediato a la policía.
"Los padres de familia podrían querer tener un plan de comunicación y hablar con sus hijos y su familia sobre el significado del 11 de septiembre", aconsejó Ridge, y añadió: "Instaríamos a los patrones y los empleados a conocer sus propios planes de emergencia, de revisarlos".
El gobierno estadunidense ofreció pocos detalles sobre los tipos de ataques que podrían esperarse, más allá de advertencias generales del posible uso de Al Qaeda de coches-bomba o ataques suicidas contra objetivos simbólicos.
Pero había cierto escepticismo sobre esta alerta, declarada justo en vísperas del aniversario.
De hecho, a pesar de ésta y otras alertas repetidas en estos últimos meses, una reciente encuesta de CNN registró que menos de 20 por ciento de los estadunidenses cree que el 11 de septiembre tuvo un impacto significante en sus vidas personales; 82 por ciento afirmó que los atentados no ha-bían afectado sus vidas.
Nerviosismo, en la víspera
No obstante, en esta capital el número de personas afectadas por los atentados es mucho más alto que en el resto del país (con la obvia excepción de Nueva York), y hoy había señales visibles de nerviosismo en vísperas del aniversario del 11 de septiembre.
Varios residentes han decidido permanecer fuera de Washington el miércoles "en caso de..."; otros aconsejan a sus seres queridos evitar el transporte público o lugares como estaciones de tren o edificios federales.
En las calles alrededor del Congreso y otros edificios federales los tipos con auriculares han reaparecido, al lado de automóviles de último modelo que vigilan los cruces de calles.
Esta semana el Servicio de Guardacostas desplegó su primera lancha de alta velocidad para patrullar el río Potomac, navío equipado con una ametralladora pesada de alto calibre, en tanto que los militares estadunidenses anunciaron que los comandantes de un ejercicio militar que se realiza cerca de aquí serían equipados con municiones reales en caso de que tuvieran que responder en una acción defensiva.
Las tensiones se evidenciaron esta semana cuando a un turista no se le permitió ingresar a la biblioteca del Congreso por tener una pequeña navaja en su bolsillo, y comentó con ira a reporteros que habían ingresado poco antes al mismo edificio sin problema lo que le había sucedido.
"ƑQué tipo de seguridad es ésta? Sólo fue cuando decidí entrar por segunda vez y sacar todo de mi bolsillo que encontraron la navaja -dijo-. Si sólo van a encontrar las navajas que la gente les ofrece, Ƒentonces quién no va a pasar con un cuchillo?"