Revisará el expediente del conflicto
con el Ajusco
Suspende el TSA resolución contra comuneros
de Jalatlaco
MATILDE PEREZ U.
"¡Jalatlaco no entregará las tierras que
le fueron reconocidas desde la época virreinal!", con esa consigna
casi 2 mil ejidatarios y comuneros de esa región del estado de México
llegaron ante las puertas del Tribunal Superior Agrario (TSA), y advirtieron
que no permitirán la ejecución de la resolución de
las autoridades de entregarle mil 509 hectáreas a comuneros del
Ajusco.
"Esa
gente ni siquiera conoce las 10 mojoneras que delimitan ambos pueblos.
¡Jamás conseguirán esas tierras, que nunca han trabajado
y ni siquiera han reforestado!, aunque tengan los dictámenes de
las autoridades agrarias", decían enardecidos los labriegos que
salieron de sus casas a las ocho de la mañana para dirigirse a las
oficinas del TSA.
Identificados con un gafete que decía "Movimiento
pro defensa de la tierra comunal!", los jalatlaquenses realizaron una ceremonia
de agradecimiento a la tierra y puntualizaron que no permitirán
el despojo. "Queremos que el Ajusco se desista de tener esas mil 509 hectáreas
para que podamos seguir como buenos vecinos".
Los campesinos permanecieron casi cinco horas a las puertas
del TSA. Manifestaron que se vieron obligados a dejar las actividades en
sus parcelas para llegar hasta la sede del TSA para "defender lo que es
nuestro, a eso nos ha obligado el Ajusco".
Una comisión de manifestantes, encabezada por las
autoridades comunales y agrarias, dialogó con el presidente del
TSA, Ricardo García Villalobos, y los jalatlaquenses obtuvieron
el compromiso de que se suspendería la ejecución agraria.
En el documento que entregaron a los campesinos, el presidente del TSA
y el magistrado del Tribunal Unitario Agrario en el Distrito Federal, Luis
Hernández Palacios, puntualizaron que no se aplicaría la
resolución del 19 de abril de 1999, mediante la cual se otorgaban
mil 509 hectáreas a los campesinos del Ajusco.
Asimismo, aseguraron que el expediente 23TUA 24/97 sería
sujeto a una nueva revisión. Los documentos que presentaron los
habitantes de Jalatlaco serán estudiados y el 3 de diciembre la
autoridad agraria emitirá una nueva resolución acerca de
la disputa por la tierra. Antes, convocaron a Jalatlaco y el Ajusco a llegar
a un acuerdo conciliatorio.
El enojo de los habitantes de Jalatlaco estuvo a punto
de estallar. Por medio de altavoces se anunció que una comisión
del Ajusco estaba sobre la calle Puebla -a unos pasos del TSA, ubicado
en la calle Orizaba-. "¡Vamos a darles un calambre a los del Ajusco!",
gritaron hombres y mujeres, y después -dirigiéndose a los
magistrados del TSA-, apuntaron: "nosotros también tenemos los machetes
guardados".
Sin embargo, varios comuneros llamaron a la reflexión
y a la unidad campesina, a no permitir que por "una resolución de
escritorio de un magistrado se llegara a la violencia entre comunidades".
Explicaron que el magistrado Jorge Gómez de Silva
Cano, quien resolvió a favor del Ajusco en 1999, tiene una larga
historia de haber sembrado -con sus decisiones- conflictos en las comunidades.
Ejemplo de lo anterior, aseguraron, son los casos de la Magdalena Contreras
y San Mateo; Milpa Alta, San Salvador Cuautenco y San Francisco Tlalnepantla.
Las comunidades San Pedro Atlapulco, Santa María
Coaxusco, San Pedro Tlanixco, Alianza de Pueblos Indígenas del estado
de México (integrada por San Jerónimo Acazulco, San Juan
Atzingo, San Miguel Almaya y Huixquilucan) y Alianza de Pueblos Indígenas
del Anáhuac participaron en la protesta frente al TSA, ya que también
enfrentan conflictos agrarios.