Positivo, que los líderes sindicales "entraron en razón" y se evitó el paro en el Metro
Está claro que nadie pondrá contra la pared al gobierno de la ciudad, afirma López Obrador
Los acuerdos con el SUTGDF permitirán ir a fondo en la solución de problemas: Encinas
ELIA BALTAZAR
Queda claro que nadie, por poderoso que sea, pondrá contra la pared a las autoridades de la ciudad de México, advirtió ayer el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, luego de expresar su satisfacción porque los líderes sindicales del Metro "entraron en razón" y suspendieron sus amagos de paro.
En su conferencia de prensa matutina, López Obrador aseguró que siempre apostará por el diálogo y el acuerdo, pero "no vamos a permitir que nadie, por poderoso que sea, intente poner contra la pared a los ciudadanos y el gobierno capitalino".
Aunque el jefe de Gobierno se manifestó satisfecho porque "recapacitaron" los líderes de los sindicatos Unico de Trabajadores del Gobierno del DF y Metropolitano del Metro, José Medel y Fernando Espino, respectivamente, advirtió que las autoridades ya estaban preparadas y contaban con un plan alternativo para enfrentar un posible paro. Sin embargo, dijo, es mejor que los servicios funcionen normalmente, porque nadie tiene derecho a dejar sin servicios a los ciudadanos.
Por su parte, el subsecretario de Gobierno del DF, Alejandro Encinas, destacó que los acuerdos alcanzados, particularmente con la dirigencia del SUTGDF, permitirán "entrar a fondo de los problemas" mediante la revisión del manual de procedimientos administrativos, el tabulador de puestos y las condiciones generales de trabajo. Encinas afirmó que este último tema es muy importante para el gobierno, ya que incluye los asuntos estructurales, como la renivelación, retabulación y basificación de los trabajadores. Agregó que hay algunas cláusulas en que las prestaciones y sus montos quedan sujetos a decisiones discrecionales, por lo que es necesario tener claramente establecidos estos puntos, para sentar las bases de una nueva relación laboral, totalmente distinta, "que mucha falta hace a la ciudad". Por eso, señaló, "queremos revisar las condiciones generales de trabajo y no sólo puntos de programas específicos, para rescatar la bilateralidad con los trabajadores, más allá de las presiones y los asuntos políticos, y promover su desarrollo".
Si bien advirtió que será un proceso de revisión de varios meses, que probablemente se concretará el próximo año, dijo que las autoridades ya entregaron una propuesta al SUTGDF, que a su vez entregará sus comentarios y observaciones. Pasados 15 días naturales, después de que el sindicato dé respuesta, "comenzaremos la revisión conjunta de las condiciones generales de trabajo".
Para abordar las demandas inmediatas de ese gremio, Encinas informó que a partir del 18 de septiembre, como ya se había acordado con anterioridad, se realizarán reuniones de trabajo en las unidades administrativas del gobierno de la ciudad, en las que participarán los titulares -ya sean secretarios o directores de área-, en coordinación con las dirigencias sindicales respectivas. El SUTGDF, por su parte, entregará una agenda de trabajo, a partir de las prioridades de los trabajadores y su representación.
Respecto de la basificación, que es una de las principales demandas de los trabajadores, Encinas afirmó que "estamos en la mejor disposición de acabar con la simulación que significa el trabajo eventual en la ciudad", por lo que expresó su disposición a poner en marcha un programa de revisión.
El subsecretario de Gobierno también destacó los acuerdos con el sindicato del Metro, entre ellos la entrega de un terreno en la delegación Iztacalco, que se concretó ayer mismo, para la ampliación de un deportivo para los trabajadores de ese gremio. Informó también que las autoridades del Metro autorizarán una ampliación presupuestal de 17 millones de pesos para realizar mejoras en comedores y centros de trabajo de la institución. Adelantó que el próximo 27 de septiembre se entregarán terrenos para la construcción de 400 viviendas para los trabajadores.
Encinas puntualizó que, sin duda, 2003 será un año de revisión a fondo de las condiciones de trabajo en el gobierno de la ciudad.