Elevar réditos y controlar la inflación, el propósito
Endurecen la política monetaria; se amplía el corto a $400 millones
JUAN ANTONIO ZUÑIGA
El Banco de México (BdeM) endureció su política monetaria y determinó ayer ampliar de 300 a 400 millones de pesos la sustracción de liquidez de la economía mediante el denominado corto, para inducir una alza temporal en las tasas de interés que estimule el ahorro, encarezca el crédito y propicie una menor demanda de bienes y servicios para mantener bajo control la inflación.
Entre los factores que determinaron una mayor restricción monetaria por parte del banco central figuró "la reciente volatilidad en los mercados financieros internacionales y nacionales", la cual aumentó "la incertidumbre sobre el posible cumplimiento de las metas de inflación".
En comunicado, el BdeM advirtió que para evitar un crecimiento de los precios superior a al 3 por ciento que se fijó para 2003, "resulta crucial que las negociaciones de los salarios contractuales se sustenten en expectativas de inflación congruentes con esa meta".
Y apuntó: "Para que esto ocurra es importante evitar que las expectativas de inflación para 2003 se vean contaminadas por la revisión al alza que han registrado las expectativas para el año en curso".
Desde el 11 de marzo de 1998 esta restricción monetaria es la más cuantiosa en las 19 ocasiones en que el banco central ha recurrido a este instrumento para atemperar presiones inflacionarias, y desde entonces su aplicación ha respondido básicamente a tres circunstancias: "cuando es necesario restaurar el orden en los mercados de dinero y cambiario"; cuando "se presentan perturbaciones exógenas sobre los precios" y "en el momento en que se detectan presiones inflacionarias incongruentes con la meta establecida.
Esta vez se intenta, explicó el BdeM, "inducir una corrección de las expectativas inflacionarias de mediano plazo, así como coadyuvar a que los ajustes en los mercados financieros nacionales se den de manera ordenada".
Puntualizó que la restricción monetaria busca también "establecer una mayor congruencia en las revisiones de los salarios contractuales, los objetivos de inflación y las condiciones del mercado laboral".
