REPUBLICA DE PANTALLA
Jenaro Villamil
Del Quinazo al Pemexgate
Isidore Destructor vs la Caridad estilo Cosmopolitan
A PARTIR DEL 26 de septiembre en el horario estelar de los principales canales televisivos se transmite el siguiente anuncio oficial, con la imagen de una plataforma petrolera en el horizonte: "El gobierno federal no está en contra de los trabajadores de Pemex, de los sindicatos, de algún partido político, de los justos reclamos salariales... está en contra de los corruptos, de los que se enriquecen abusando del poder, de la impunidad, del pasado que nos impide avanzar hacia un mejor futuro... está con los mexicanos, lo sabemos todos. Parar a Pemex es parar a México".
EL INUSUAL spot acompañó esta semana lo que ha constituido la más amplia operación de toma de poder mediático del presidente Vicente Fox. Toda proporción guardada, la ofensiva desde Los Pinos en medio de las investigaciones del Pemexgate, de la solicitud de desafuero de los tres líderes petroleros involucrados en el multimillonario desvío de recursos para la campaña presidencial de 2000 es equiparable al famoso Quinazo de 1989, que inauguró la política de "golpes espectaculares" de Carlos Salinas de Gortari para legitimarse en la Presidencia.
LA DIFERENCIA esencial radica en que mientras en aquella ocasión el golpe fue seco, brutal y ejemplar, ahora el gobierno foxista se empantanó desde principio de año en una estrategia pendular que hasta el momento sólo ha producido un inédito escándalo mediático que ha ocupado las primeras planas periodísticas, las notas principales de los noticiarios televisivos y radiofónicos y una guerra de declaraciones que ha tensado el ambiente político sin que exista, hasta ahora, un proceso jurídico claro. Si en 1989 Salinas de Gortari buscó legitimarse en el poder con el descabezamiento en la cúpula del gremio petrolero, en 2002 Vicente Fox ha dilapidado una legitimidad indiscutible con contradicciones en su gabinete, filtraciones periodísticas, negociaciones con la directiva del PRI sin rumbo claro, un escándalo propio en las finanzas de los Amigos de Fox que ha desaparecido momentáneamente. El contragolpe ha venido por la parte que mejor conoce su administración: la mercadotecnia publicitaria para ganar a una opinión pública desencantada y desconfiada.
EL RESULTADO, en un corto plazo, ha sido benéfico en términos de popularidad, pero incierto en términos políticos. La encuesta de Canal 2, el mismo día que se transmitiera el spot, lo confirmaba: 82 por ciento opinó que los dirigentes sindicales de Pemex convocaron a una huelga para protegerse de las demandas en su contra. Encuestas presidenciales le dan más de 70 por ciento de respaldo a Fox después de su entrevista con la agencia británica Reuters, en la que afirmó: "nos quieren chantajear". El "círculo rojo" que opina en los medios apoya la batalla contra la corrupción, tal como se vio en programas como Zona Abierta y Reporte 13. Las imágenes de un Presidente que es vitoreado por trabajadores petroleros en su incursión a las secciones sindicales fueron transmitidas una y otra vez este fin de semana. La directiva del PRD lo respaldó. El PAN cerró filas después de los roces posinforme presidencial. El gobierno de George W. Bush también hizo lo propio, y hasta la Unión Europea le dio un espaldarazo. La jerarquía eclesiástica aprovechó el viaje para reclamarle al gobierno mano firme y desacreditar la transición.
SIN EMBARGO, con el sobredimensionamiento mediático de la "amenaza de los petroleros" viene el error político y el riesgo en términos de soberanía. Tres ejemplos de los mensajes poco claros que ha traído el Pemexgate son los siguientes:
A) TODOS HEMOS escuchado y leído en los días recientes las constantes "proyecciones" de lo que le sucedería al país si el sindicato de Pemex va a la huelga. Prácticamente sería más devastador que el huracán Isidore. Las damas de clase media se quedarían sin lápiz labial y sin maquillaje; la industria, sin energía; se tendría que importar gasolina; la economía del país se vendría abajo. Coparmex afirmó que se perderían "miles de millones de dólares". La exageración ha provocado nerviosismo en los mercados financieros. Los imagólogos foxistas no han reparado en su contradiscurso: si es tan estratégica la industria petrolera para el país, es obvio que no puede dejarse ni en manos de un corporativismo corrupto, pero tampoco privatizarlo, mucho menos abrir la participación de capitales extranjeros, tal como se intenta hacer con la reforma eléctrica. Por lo pronto, en su incursión el viernes pasado a la refinería de Cadereyta, Fox salió al paso de las demandas diciendo que sólo que estuviera "zafado de la cabeza" privatizaría Pemex. ƑPor qué no afirmar claramente que la paraestatal es y seguirá siendo de todos los mexicanos?
B) LA ESTIGMATIZACION de la huelga como una acción de lucha sindical legítima y legal es otro de las líneas de inducción que ha traído esta semana la batalla del Pemexgate. Los senadores del PRI que rompieron con la "línea" del dúo dinámico Madrazo-Gordillo se han escudado en esta argumentación, pero su posición está contaminada con la incapacidad de los partidos y de los poderes de la República para no dejarse arrastrar en la marea del escándalo. Aun cuando todo parece indicar que la huelga petrolera no estallará, el daño ya está hecho en términos de inducción mediática.
C) LA MEDIATIZACION de la justicia genera una espiral de incertidumbre y de marasmo ministerial. El foxismo ha reiterado slogans contra los "peces gordos" y los "lingotes de oro" que serán aprehendidos. La lucha contra la corrupción se convierte en un arma de doble filo para negociar políticamente con un priísmo entrampado en su naturaleza corporativa. Hasta el momento ha prevalecido la táctica de la filtración periodística, las versiones no confirmadas y hasta penosos contragolpes de imagen como el de Rogelio Montemayor que esperaba paciente en territorio estadunidense que la justicia foxista fuera por él.
Isidore y las ceremonias de la vanidad
MIENTRAS EN EL noticiario estelar de Televisa una anciana maya de Conkal se quejaba ante la cámara porque había sido marginada de la ayuda gubernamental "porque vive sola" y perdió todo con el paso del huracán Isidore en Yucatán, en el palacio de Bellas Artes, la presidenta de la fundación Vamos México coronaba su sueño de reunir a 20 mujeres Cosmopolitan en la 11 Conferencia de Esposas de Jefes de Estado y de Gobierno. El objetivo: hablar en favor de los pobres, que bien valen ceremonias y vanidades globalizadas.
"LOS MILLONES DE niños pobres no deben esperar más", dijo Marta Sahagún de Fox en la clausura. También afirmó que "el hambre que tienen nuestros niños y niñas no se sacia con demagogia. No permitamos que las palabras estén por encima de nuestros compromisos y de nuestras acciones". Aplausos, flores y mutuos halagos acompañaron el cierre de este cónclave.
POR SUPUESTO, las palabras ahí quedaron. En tanto, Canal 11 reportaba que existen 300 mil damnificados en Yucatán, Campeche y Quintana Roo por el paso del meteoro devastador. El Centro Nacional para la Prevención de Desastres difundía que cerca de 70 mil personas de la zona maya quedaron prácticamente sin nada. El Fondo Nacional de Desastres es de apenas 22 millones de pesos, prácticamente la tercera parte de lo que la fundación Vamos México logró captar para publicar "manuales" para padres de familia con la Fundación Televisa y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.
LA DESOLACION, la destrucción, la tristeza, la desesperación por la falta de agua y medicamentos que han dominado en estos días a las zonas afectadas que perdieron un año de producción maicera, avícola o apícola no llegaron hasta la cumbre de las primeras damas que sueñan con tomar la estafeta de Eva Perón.
EL CONTRASTE DE imágenes y diagnósticos fue sintomático del mundo de las buenas intenciones sin capacidad de respuesta rápida. Justamente en el programa En Contraste, la secretaria de Desarrollo Social informó sobre las 60 mil despensas entregadas, el envío de tres aviones Hércules cargados con láminas, alimentos y suero para las zonas afectadas. "En Yucatán la gente más pobre perdió sus casas", afirmó.
El rugido de la novia de King Kong
EN LA CEREMONIA del festival de San Sebastián la actriz estadunidense Jessica Lange dio una muestra de que el coraje que ha demostrado en películas como Frances o El cartero llama dos veces puede expresarse también en una toma de posición digna en momentos que su nación se debate internamente frente a un belicismo oprobioso que induce el miedo en sus ciudadanos y pretende un incendio globalizado para luchar "contra el mal":
"LO QUE GEORGE W. Bush pretende hacer con Irak es inconstitucional, ilegal e inmoral. Odio a Bush, lo desprecio a él y a toda su administración. Venir hoy de Estados Unidos sólo me da vergüenza, es humillante... Bush robó las eleciones y desde entonces lo padecemos todos. Lo de Irak es una absoluta locura, pero lo que no entiendo es que nadie lo frene ni dentro ni fuera de Estados Unidos."
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