Murió ''plácidamente'' en el hospital
University College, informaron sus hijos en un comunicado
Falleció el actor británico Richard Harris;
sufría cáncer linfático
Un hombre llamado caballo y Motín a
bordo, sus trabajos más recordados
Fue calificado como uno de los mejores actores jóvenes
de la escena inglesa, junto a Albert Finney y Peter O'Toole
JUAN JOSE OLIVARES Y AGENCIAS ENVIADO
Londres, 25 de octubre. El actor británico
Richard Harris, protagonista de Un hombre llamado caballo, figura
relevante en cintas como Los cañones de Navarone, El violinista
en el tejado y Motín a bordo, y postulado al Oscar como
mejor actor de soporte por su papel del emperador Marco Aurelio en la cinta
Gladiador,
de Ridley Scott, murió la noche del viernes a consecuencia de cáncer,
informó la BBC.
Durante
la conferencia de prensa en la que se presentó la cinta Harry
Potter y la cámara de los secretos, en la que el actor personifica
al profesor Albus Dumbledore, se informó que Harris estaba hospitalizado,
pues se encontraba delicado de salud, y que por eso no había acudido
al encuentro con los periodistas. Horas más tarde se informó
sobre su fallecimiento.
El actor británico murió a los 72 años
de edad en el hospital University College, de Londres, donde era tratado
de la enfermedad de Hodgkin (cáncer a las glándulas linfáticas),
reportó la British Broadcasting Corporation (BBC).
El actor de la película Un hombre llamado caballo
(1970) actuó por última vez en la pantalla grande en el papel
del profesor Dumbledore en la segunda parte de la saga del niño
mago Harry Potter.
Un portavoz de la familia informó, en nombre de
los hijos de Harris, Damian, Jarid y Jamie, que su "querido padre" había
muerto "plácidamente" en el hospital.
A Harris le fue diagnosticada la enfermedad después
de haber finalizado el rodaje de Harry Potter y la cámara de
los secretos, a estrenarse el próximo 15 de noviembre, cuando
ingresó al hospital con una infección de pecho severa en
agosto pasado.
Estaba en tratamiento de quimioterapia e incluso confiaba
en recuperarse para participar en la tercera película basada en
los libros de la escritora J.K Rowlings, Harry Potter y el prisionero
de Azkabán, bajo la dirección del cineasta mexicano Alfonso
Cuarón.
Rudo, duro, iracundo, apasionado...
Hombre alto, robusto y de rostro curtido por la intemperie,
Harris nunca tuvo figura de astro de cine.
El actor, hijo de un comerciante de harinas, acababa de
cumplir los 72 años el pasado 1º de octubre e ingresó
en los años 50 a la Academia de Música y Arte Dramático
de Londres.
Luego se unió a la compañía Theatre
Workshop, vanguardia del teatro realista y experimental británico.
Lee Strasberg, del Actors Studio de Nueva York, dijo luego
de verlo en un papel breve que le había causado el "impacto más
fuerte" en Gran Bretaña.
El
crítico Clive Barnes dijo que formaba parte de una nueva raza de
actores británicos, "más rudos, duros, iracundos y apasionados
que sus cultos antecesores... muchachos salvajes con vidas privadas muy
coloridas e imagen pública a veces truculenta".
Otro crítico lo juntó con Albert Finney
y Peter O'Toole, como los tres mejores actores jóvenes de la escena
inglesa.
Fue galardonado con el premio al mejor actor en 1963 en
el Festival de Cannes gracias a su papel de jugador de rugby en El ingenuo
salvaje y además, se ganó una postulación de la
Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Hollywood.
Harris incursionó en la música, con el disco
MacArthur
Park, del que vendió más de cinco millones de copias,
así como en la literatura y la dirección y recibió
dos postulaciones para el Oscar.
Fue conocido por su estilo de vida desordenado y por su
afición a la bebida, características que, según confesó,
pusieron en peligro su participación en las películas de
Harry Potter.
Actuó en cintas como Los cañones de Navarone
(1961), Motín a bordo (1962), La Biblia (1966), Cromwell
(1970), El violinista en el tejado (1971), Sin perdón
(1992), Juego de patriotas (mismo año), El barbero de
Siberia (1999), Gladiador (2000) y Harry Potter y la piedra
filosofal (2001).