Por lo menos 700 mil toneladas han sido trasladadas este año, asegura delegado

Persiste saqueo de arena de BC: Semarnat

Autoridades federales y estatales coordinan acciones para frenar prácticas abusivas, dice

JORGE ALBERTO CORNEJO Y CRISTOBAL GARCIA CORRESPONSALES

Por lo menos unas 700 mil toneladas de arena de Baja California fueron enviadas a Estados Unidos este año por las vías marítimas y terrestres, pese a la denuncia interpuesta ante la Procuraduría General de la República por el saqueo de los bancos de arena de la entidad en 2001.

Sin embargo, lo peor del saqueo ocurrió entre 1998 y 2001, cuando millones de toneladas de arena fueron exportadas. "No sabemos con exactitud cuanto se llevaron, pero fueron millones de toneladas", reveló Carlos de la Parra Rentería, delegado en Baja California de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

El funcionario aseguró que no se tienen evidencias concretas de que la arena de Baja California haya sido utilizada para embellecer las playas en Hawaii. "De lo que sí hay pruebas es de que actualmente se siguen explotando los bancos de arena de la entidad para abastecer la demanda del mineral en California, en los tres últimos años, para las costas y la realización de mezclas para concreto y asfalto", dijo.

Las operaciones de extracción y exportación de arena se han multiplicado en el estado, lo que plantea una amenaza ambiental significativa para la región. Tan sólo este año más de 4 mil toneladas de arena fueron acarreadas semanalmente, por tren, a través de la frontera de Tecate a Campo, California.

La cantidad es poco significativa comparadas con las más de 650 mil toneladas de material pétreo que fue exportado a San Diego y a Long Beach, California, en los primeros nueve meses del año, según un informe de funcionarios portuarios de Ensenada.

Actualmente, señaló el funcionario, en rueda de prensa, existen 16 empresas dedicadas a la explotación de los bancos pétreos en la entidad y cada una cuenta con los permisos correspondientes, aunque reconoce que se requiere un control más eficiente.

Adicionalmente, apunta que se revisa el marco regulatorio de esas concesiones, toda vez que los estudios de impacto ambiental presentados por las empresas en cuestión para llevar a cabo la extracción de arena carecen de una perspectiva regional.

Actualmente, dichos estudios únicamente consideran la afectación directa del lugar de extracción de la arena, sin considerar que el mineral forma parte de una cuenca y que existen otros permisos otorgados en esa misma zona, que en conjunto podrían provocar un deterioro al ecosistema.

Por ello, autoridades ambientales de la Federación, en conjunto con el gobierno de Baja California, trabajan de manera coordinada en la supervisión de los trabajos de explotación de los bancos de arena para evitar que el deterioro continúe por prácticas abusivas y al margen de la ley.

Asimismo, añadió, se realizan las gestiones para corregir irregularidades en los marcos regulatorios de la actividad, y se procura que se exijan obligadamente estudios de impacto ambiental mucho más completos.

Por su parte, Kim Sterrett, encargado del programa público de restauración de la playa de California, dijo al rotativo estadunidense San Diego Union Tribune, que la arena mexicana no ha sido utilizada en ningún proyecto de restauración del estado.

Sin embargo, la arena bajacaliforniana está siendo empleada por la industria de construcción en Estados Unido, debido a que la procedente del océano es demasiado salada para ser utilizada en concreto y asfalto, así que los constructores prefieren la de río.

Están en Sonora 2 reactores de energía que serán trasladados a EU

Los dos reactores de energía que serán instalados en la planta nuclear de Palo Verde, Arizona, que se encontraban anclados en una embarcación en Guaymas, Sonora, partieron hacia Puerto Peñasco, en la misma entidad, en espera de que sean transportados vía terrestre hacia Estados Unidos.

Las dos piezas, de 8.5 toneladas de peso y 23 metros de largo por 8 de alto, permanecieron desde el 19 de septiembre en los muelles de la Administración Portuaria Integral de Guaymas (Apiguay).

Bruno Treviño Santoyo, director general de Apiguay, aseguró que los aparatos, que fueron construidos con tecnología de punta, son "inofensivos", pues sólo son piezas de tubería vacías, que serán llenados en la nucleoeléctrica Palo Verde, Arizona.

Las dos piezas, agregó, son una especie de calentadores de fluidos nucleares, a condiciones extremas de presión y temperatura, fueron construidas en Italia con tecnología de varias naciones.

Las piezas tubulares transportarán miles de litros de fluidos que se convertirán en vapor para impulsar las turbinas, que a su vez generarán energía eléctrica.

Los casi 200 kilómetros de Puerto Peñasco-Sonoyta-Lukeville serán recorridos en cinco días, a razón de cinco kilómetros por hora, aproximadamente, en jornadas nocturnas.

Treviño Santoyo rechazó las manifestaciones del Partido del Trabajo, ya que, se les explicó ampliamente con videos y otros apoyos, qué tipo de piezas son, por lo que en ese partido saben perfectamente de qué se trata.

Aseguró que las autoridades federales y la Armada de México están al tanto de la existencia de esas piezas que ya han sido analizadas, y que el tránsito por territorio mexicano está perfectamente documentado, por lo que no hay problema de ningún tipo.