Juicio como adultos a agresores de un mexicano

Dos adolescentes acusados de golpear a un migrante indocumentado mexicano el pasado 24 de septiembre en San Diego, California, serán enjuiciados como adultos por la fiscalía general del condado.

James Grlicky y Wylon Kennell, ambos de 17 años, fueron acusados en la Corte Superior de Justicia de esa ciudad de haber cometido el atentado contra José Luis Cisneros.

La fiscalía calificó el ataque contra el indocumentado como un crimen de odio racial, por lo que los jóvenes involucrados deberán enfrentar cargos de asalto agravado.

El juez Michael Harris dispuso una fianza de 200 mil dólares para Grlicky y de 500 mil dólares para Kennell. Justin Samuel Smith, de 18 años, también fue detenido por las autoridades por haber participado en el ataque.

Cisneros sufrió la agresión de los tres jóvenes cuando caminaba por un paraje montañoso ubicado al este del condado de San Diego. La golpiza le provocó serias lesiones y permaneció 10 días en estado de coma en un hospital.

Por otra parte, se informó que al menos 30 indocumentados de diferentes partes de México y Centroamérica fueron detenidos ayer por agentes del Servicio de Inmigración y Naturalización cuando estaban a punto de abordar un vuelo en el Aeropuerto Internacional de Los Angeles.

Asimismo, un agente de la Patrulla Fronteriza disparó contra un grupo de indocumentados mexicanos en un intento por detenerlos, pero la detonación provocó que los migrantes se dispersaran por el desierto de Arizona y regresaran a territorio mexicano.

Ante tal incidente, las autoridades consulares de México en Douglas, Arizona, solicitaron al Departamento de Justicia de esa jurisdicción que inicie una investigación por la detonación del arma realizada por el agente de la corporación policiaca.

El cónsul mexicano Miguel Escobar Valdés informó que en lo que va del año han ocurrido cuatro incidentes similares en los que han salido a relucir armas de fuego, sin que las autoridades estadunidenses intenten evitarlo.

Delatan a nueve obreros en Florida

En Miami, autoridades federales estadunidenses anunciaron ayer el arresto de nueve mexicanos indocumentados que trabajaban en la construcción de la nueva arena municipal de Jacksonville, en el norte del estado de Florida.

Los mexicanos fueron detenidos por elementos de la Patrulla Fronteriza después de recibirse quejas de que en las obras del complejo laboraban extranjeros sin documentos.

Voceros de la agencia dijeron que los indocumentados serán deportados la próxima semana, mientras el consulado de México en Orlando indicó este jueves a Notimex que contactará a las autoridades federales para conocer la situación de sus connacionales.

Los empleados de la construcción trabajaban en la nueva arena municipal de Jacksonville, que se edifica mediante una inversión superior a los 100 millones de dólares.

De acuerdo con autoridades estadunidenses, los mexicanos fueron empleados por subcontratistas para la construcción del complejo de más de 15 mil butacas, cuya apertura está programada para finales de 2003.

JORGE ALBERTO CORNEJO Y CRISTOBAL

GARCIA BERNAL, CORRESPONSALES; NOTIMEX