Combates en Colombia
Rescata el ejército al obispo Jiménez
AFP, DPA Y REUTERS
Santafe de Bogota, 15 de noviembre. El ejército co-lombiano rescató esta mañana sanos y salvos al obispo Jorge Enrique Jiménez y al sacerdote Desiderio Orjuela, en poder de las guerrillas, operación militar en el centro del país que fue calificada por el gobierno y los sectores políticos y sociales como "gran victoria" de las fuerzas armadas y de seguridad.
La liberación de los religiosos, secuestrados el lunes por presuntos rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Co-lombia (FARC), se produjo en un paraje rural de Topaipi, departamento de Cundinamarca, durante combates en que los rebeldes fueron cercados, y uno de ellos murió mientras que otros tres fueron capturados.
De inmediato todos los sectores se regocijaron por la liberación de Jiménez, de 60 años y presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano, y del cura Orjuela, de 65, que lo acompañaba el día del plagio, quienes quedaron a la deriva mientras los captores huían al ser sorprendidos por fuerzas de despliegue rápido y contrainsurgencia.
Desde el día del secuestro el ejército emprendió un amplio operativo por tierra y aire en una vasta zona de Cundinamarca, con unos 500 hombres que estuvieron al mando del general Carlos Alberto Ospina.
Tras el rescate, ambos religiosos fueron llevados en helicóptero a Bogotá, mientras que en el curso del día continuaban los combates con las FARC en la zona.
"Tenemos que ayudar a sacar a Colombia de esto tan duro, que no solamente he vivido yo. Debemos apoyar al presidente, a las autoridades, al ejército y creer en ellos", afirmó en sus primeras declaraciones a la prensa el también obispo de Zipaquirá.
Muy cansado, agradeció a Dios y a las autoridades que intervinieron en lo que definió como "la mayor experiencia de su vida".
El presidente Alvaro Uribe celebró desde República Dominicana, donde participa en la Cumbre Iberoamericana, el retorno del jerarca católico, y ordenó al ejército "desterrar" a las FARC de Cundinamarca, en los alrededores de la capital del país, donde mantienen una fuerte presencia.
La ministra de Defensa, Marta Lucía Ra-mírez, señaló que ésta es "una demostración de que la fuerza pública tiene capacidad de darle seguridad a los ciudadanos, siempre y cuando éstos nos ayuden".