Agradece el rey Juan Carlos el ''apoyo y la comprensión'' de México en este tema

Ofrece Fox seguir colaborando para la detención de etarras

El terrorismo, amenaza global, expresa el soberano español durante la ceremonia de bienvenida

Subraya la cooperación entre ambas naciones en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas

JOSE ANTONIO ROMAN Y CIRO PEREZ

El rey Juan Carlos de España agradeció al presidente Vicente Fox Quesada el ''apoyo y la comprensión'' que su país ha recibido de México frente al ''embate del terrorismo'', y subrayó la cooperación de ambos países en el seno del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

En la ceremonia de bienvenida por su visita de Estado a México, realizada ayer en el Campo Marte, Juan Carlos agregó que el terrorismo, como ha quedado demostrado tras los hechos del 11 de septiembre del año pasado en Washington y Nueva York, constituye una ''amenaza global'', no porque estas ''actividades criminales'' trasciendan las fronteras, sino porque atentan contra el orden moral frente al que nunca ven ambigüedades ni refugio alguno.

Relaciones ''de excelencia''

Tanto el rey de España como el presidente de México destacaron las buenas relaciones diplomáticas entre ambas naciones, las cuales este año cumplen su 25 aniversario. ''Hoy, las relaciones entre nuestros dos estados han alcanzado un nivel de excelencia sin precedente histórico'', dijo el visitante extranjero, quien se refirió al empeño de ambos pueblos de ver imperar en todo el mundo los valores de la paz, la democracia, la libertad y la justicia.

Tras la recepción, ambos personajes encabezaron una reunión privada de trabajo en la residencia oficial de Los Pinos. En ella, el rey Juan Carlos se refirió al tema de la ETA y agradeció la intervención de México para detectar y capturar a miembros de esta organización. A este respecto, el presidente Fox refrendó su compromiso de revisar la situación de miembros de Euskadi Ta Askatasuna en nuestro país.

En su visita oficial a México, los reyes de España cumplieron ayer una apretada agenda de actividades. Tras la ceremonia de bienvenida y un encuentro privado en la residencia oficial de Los Pinos, colocaron una ofrenda floral en el Altar a la Patria, en Chapultepec; inauguraron el Centro Cultural de España, en la calle de Guatemala, y fuera de protocolo aceptaron la invitación del cardenal Norberto Rivera Carrera para visitar la catedral metropolitana en compañía del presidente Fox y su esposa, Marta Sahagún, para conocer el Altar de los Reyes, uno de los principales retablos del recinto religioso.

Además, los visitantes estuvieron en la Cámara de Diputados y por la noche, en Palacio Nacional, el Presidente de la República Fox les ofreció una cena de Estado.

Durante el encuentro privado que siguió a la ceremonia de bienvenida, el presidente Fox y el rey Juan Carlos sostuvieron una reunión de trabajo con sus respectivas comitivas. Durante la reunión abordaron tanto asuntos de la agenda internacional como situaciones que privan en América Latina en su conjunto. En el ámbito interno, Fox se refirió a la reingeniería del gobierno en diferentes sectores, mientras que el rey de España se refirió al tema de la organización vasca ETA.

Ceremonia en San Lázaro

En la Cámara de Diputados se habló de la urgencia de que Iberoamérica se convierta en el factor que impulse el desarrollo de las naciones de este continente, y de la necesidad de consensos como el único elemento capaz de generar crecimiento.

No es ético ni viable socialmente que Latinoamérica siga siendo la región más injusta del planeta en materia de concentración de la riqueza, sostuvo la presidenta de la Cámara de Diputados, Beatriz Paredes Rangel, quien advirtió que Iberoamérica debe pugnar por la creación de oportunidades suficientes, remunerativas y por la distribución justa del ingreso.

Al recibir en sesión solemne a los reyes de España, la diputada Paredes Rangel dijo que, a partir de su identidad cultural, Iberoamérica debe pugnar por la cooperación entre países que determine que la globalización no signifique subordinación ni uniformidad, sino más bien un espacio de convivencia.

En su oportunidad, el rey Juan Carlos se congratuló porque una de las prioridades del gobierno foxista sea vincular a los estados del sur de México con los países del istmo centroamericano a través del Plan Puebla-Panamá (PPP), que España apoya firmemente y en el que ha comprometido ya importantes fondos en la interconexión eléctrica de la región, y lo hará también en la mejora de redes viales y en los programas sanitarios y educativos.

Hizo referencia asimismo a la transición a la democracia que vivió su país, y destacó que en este proceso los consensos entre las fuerzas políticas fueron determinantes para contar con un nuevo sistema de convivencia que hoy ampara a todos los españoles por igual. En este esfuerzo participaron no sólo las fuerzas políticas sino los sindicatos, las fuerzas armadas, los empresarios y la Iglesia católica, para buscar puntos de acuerdo que permitieran responder a la demanda social.

''Se buscó en todo momento el consenso entre estas fuerzas, con la vista puesta en el futuro más que en el pasado, procurando encontrarse en la mitad del camino, evitando la crispación y el enquistamiento de los conflictos, haciendo concesiones; en suma, anteponiendo el interés superior de la nación a todo otro interés'', dijo Juan Carlos.

El rey destacó ante los legisladores mexicanos que una vez desarrollados los pactos políticos que permitieron legislar las reformas estructurales, se inició con fuerza el crecimiento de la economía española, hecho que a 20 años ha facilitado que la renta per cápita se multiplicara por cuatro y que de ser un receptor de capitales haya pasado a ser el sexto exportador de éstos en el mundo.

Visita a la catedral

En el recorrido por la catedral metropolitana los reyes de España estuvieron acompañados por el arzobispo primado de México, cardenal Norberto Rivera Carrera; el presidente Vicente Fox Quesada y su esposa, Marta Sahagún; el jefe del Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, y una comitiva formada por el presidente del Fideicomiso del Centro Histórico, Carlos Slim, y la directora del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, (Conaculta), Sara Bermúdez, entre otros.