Rosario Castellanos y otras mujeres debieron recibir premios nacionales: Poniatowska

El gobierno foxista carece de vocación científica y artística: Jesusa Rodríguez

Julieta Fierro demanda respaldo a la ciencia básica, que "a la larga" es aplicable

CARLOS PAUL Y MONICA MATEOS-VEGA

Persiste "un rezago increíble" en la asignación de recursos a la cultura, señaló Jesusa Rodríguez, invitada a la ceremonia de entrega de los Premios Nacionales de Ciencias y Artes, que ayer se realizó en el Palacio de Bellas Artes.

La creadora escénica agregó que el gobierno de Vicente Fox, "por más que lo oculte, no tiene vocación científica ni artística, es un gobierno comercial, ni siquiera diría que de empresarios, es un gobierno de comerciantes de baja estofa; entonces nunca le va a interesar el desarrollo de la ciencia, la tecnología y las artes. Eso lo dicen los presupuestos reales. Por eso los científicos y los artistas se quejan".

"Hay libertad de pensamiento"

En tanto, Adolfo Sánchez Vázquez puntualizó que el Premio Nacional que obtuvo "no me lo da un gobierno conservador, me lo da el Estado mexicano, que representa al pueblo mexicano. En este caso no se trata de conservadurismo o reformismo. Tomando en cuenta mi trayectoria filosófica e ideológica, este reconocimiento es una expresión de que en el país existe libertad de pensamiento, de investigación, por lo cual estoy muy complacido".

Acerca del presupuesto destinado por el gobierno federal a la ciencia, la tecnología y la cultura, señaló que "siempre es insuficiente, pero creemos que los legisladores hacen el esfuerzo para resolver la situación favorablemente. Debemos aspirar a elevarlo lo más posible, pues lamejor inversión que se puede hacer es en educación y cultura".

País machista

A su vez, Elena Poniatowska comentó que aun cuando se siente muy contenta con el premio y es la primera vez que se le otorga a alguien del género femenino, este galardón "se le debió haber dado a Rosario Castellanos o a otras muchísimas científicas. Ojalá que cada año se reconozca el trabajo de las mujeres. El premio siempre es muy masculino, pues es muy machista el país".

Jesusa Rodríguez añadió que en este siglo sería ridículo que no hubiera mujeres premiadas, aunque puntualizó que el reconocimiento que recibieron Poniatowska y Luisa Josefina Hernández no debió compartirse.

"Me parece un error. Creo que eso desacredita al premio más de lo que ya estaba. Es como decir otra vez: bueno, las mujeres. Por supuesto que hay muchas a las que hay que premiar, pero si era la primera vez que se iba a reconocer a una mujer, tendría que haber sido a una sola."

Para el fotógrafo Héctor García, galardonado en el área Bellas Artes, "sería bueno que se pensara en premiar otras áreas". Respecto al presupuesto que el Congreso aprobó para el sector cultura (menos de uno por ciento del PIB), señaló que cualquier aumento es bienvenido, "pero de todas maneras no es suficiente, seguimos siendo un pueblo pobre. Aún estamos divididos. Todavía en las montañas se escucha el fragor y la voz de los desesperados y eso tiene que terminar, para que la nación dé un gran paso a la integración y a la modernidad".

Galardón de muchos

Erasmo Palma Fernández, músico rarámuri, quien junto con Juan Rivera García fue distinguido en el área Artes y Tradiciones Populares, expresó sentirse orgulloso con el premio, "aunque no es para uno solo", pues "hay personas que lo levantan a uno, por ejemplo al llevarnos a diversos pueblos o ciudades. Nosotros hemos ido a esos lugares con el apoyo de ellos. Y es por ese respaldo que hemos recibido este premio".

En tanto, la astrónoma Julieta Fierro consideró que entre las tareas prioritarias en ciencia y tecnología el gobierno debe "seguir haciendo ciencia básica, porque eso es conocimiento y éste, a la larga, se aplica en cualquier rubro".

Pero lo más importante sería, añadió, "que las industrias tuvieran a más científicos trabajando. La única manera de lograr esto es que el Estado cubra el costo de tener a los científicos laborando en las industrias. Después de algunos años esas empresas se darían cuenta de que vale la pena y de que se fortalecerían.

"Por lo menos que cada industria tuviera a tres científicos, quizá un matemático, un físico, o algún tipo de ingeniero. Este esquema ha funcionado en otros países y ayudaría a que los industriales tuvieran confianza en los científicos y generaran nueva tecnología, que bien que mal es algo que necesita México."