Llama a privilegiar el diálogo para resolver conflictos
Herrera Tello descarta estallidos sociales por la apertura agrícola
RENATO DAVALOS
La secretaria de la Reforma Agraria, Teresa Herrera Tello, descartó que el próximo 1Ɔ de enero, cuando se abran las puertas comerciales para 19 productos agrícolas en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC), estallen conflictos sociales. El gobierno "está tomando medidas para que no haya problemas", pero tiene que privilegiarse el diálogo, pues la "violencia no soluciona" nada.
En la comida de fin de año con representantes de los medios de comunicación, la funcionaria dijo que en el caso del predio de Santa Ursula, en el que se encuentra vinculado el senador panista Diego Fernández de Cevallos, quien pretende cobrarle a la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) más de mil 200 millones de pesos, la futura resolución depende en buena medida del Congreso. En el presupuesto del próximo año, a la dependencia se le asignaron apenas 200 millones de pesos para cubrir todas las "obligaciones jurídicas" en 2003.
La secretaría, precisó, tiene en litigio 114 conflictos agrarios de los 600 que hay en el país y entre los que figuran 120 de las distintas entidades federativas.
Dijo que el próximo año la SRA dispondrá de 780 millones de pesos adicionales a los planteados en el proyecto original del presupuesto que el Ejecutivo planteó al Congreso. El gasto total será de 2 mil 800 millones de pesos, de los que más de 300 se utilizarán para la resolución de conflictos agrarios, incluida la adquisición de tierras. Otros cien millones se destinarán al desarrollo de proyectos productivos y 150 millones más para programas vinculados con las mujeres campesinas, entre otros rubros.
El próximo año será el primero en esta administración en el que la secretaría disponga de recursos específicos para la resolución de los conflictos agrarios cuya solución se busca por la vía de la conciliación, añadió.
Cuando le preguntaron si prevé conflictos por la entrada en vigor del capítulo agropecuario del TLCAN, contestó que la violencia no es una vía para solucionar los problemas. "Tiene que haber corresponsabilidad y, sobre todo, no olvidar que se trata de asuntos muy antiguos", expresó.
El gobierno, sostuvo, está tomando medidas para que no haya conflictos, pero también tiene que señalarse que durante años anteriores se debió haber preparado productivamente al agro. Por ello, abundó, no debe culparse a este gobierno y hay responsabilidades por la falta de atención en administraciones anteriores.
Admitió que el proceso electoral del próximo año influirá en todo el escenario nacional y que los partidos no deben politizar los conflictos agrarios. La lección de Atenco, resumió, fue que el gobierno privilegia el diálogo.