Las medidas de apoyo a migrantes se han convertido en fotografías de ocasión, señala

Duras críticas de la CNDH al Programa Paisano

Para proteger los derechos humanos de los migrantes que entran al país por la frontera sur y cuyo objetivo es llegar a Estados Unidos, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), abrirá en marzo próximo cinco oficinas para recibir quejas por abusos en sitios de alto flujo migratorio como Magdalena de Kino, Sonora; Tijuana, Baja California; Ciudad Juárez, Chihuahua; Tenosique, Tabasco, y Chetumal, Quintana Roo.

La CNDH denunció que persisten las conductas violatorias de los derechos humanos contra los migrantes en tránsito y las acciones lesivas más frecuentes contra esa población son la extorsión, amenazas, trato degradante en los centros temporales de retención y la detención prolongada.

El organismo reiteró su preocupación por el recrudecimiento en las agresiones a los trabajadores migratorios mexicanos y centroamericanos en Estados Unidos, principalmente en Arizona, Nuevo México y Texas.

En esas entidades de Estados Unidos grupos de particulares organizan milicias armadas con el objetivo de dirigir los flujos migratorios procedentes de México hacia zonas desérticas y ponen en riesgo la vida de quienes cruzan por esa región.

Las medidas de apoyo a migrantes mexicanos que implementa el gobierno federal desde hace 10 años, como el Programa Paisano, "han demostrado considerables limitaciones, y al ponerse en marcha cada año se han convertido en fotografías de ocasión para los funcionarios sin (...) un trabajo permanente y sistemático", dijo la CNDH.

Recordó que a nueve años de aplicación en Estados Unidos del programa Guardián, son más de 3 mil los trabajadores que han muerto en su intento por internarse en el vecino del norte. Ante ello, precisó, "se ha solicitado al gobierno mexicano medidas de apoyo y asesoría jurídica en favor de la integridad jurídica y los derechos de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos, y que se exija a las autoridades estadunidenses la investigación de los abusos cometidos, castigo a los autores y medidas preventivas de información y denuncia contra actitudes racistas y xenofóbicas. Insistió en que otra de las violaciones frecuentes a los derechos humanos de trabajadores migratorios es la repatriación de menores sin avisar a las autoridades consulares mexicanas o del país de que se trate, práctica igualmente contraria a las garantías individuales".